Description:Y Duke, el editor y propietario del “Wichita Sundey”, se echó hacia atrás en su sillón y esperó a que entrara el vaquero anunciado. No habían transcurrido cinco minutos cuando apareció éste. Duke le miró con asombro y extrañeza. Si había visto otro vaquero más alto no se acordaba ya. De lo que sí estaba seguro era de no haber visto antes a ese muchacho. Pues no llegaba a los treinta. Podría asegurarlo, y Duke presumía de “vista” en este sentido.