Description:Una limpia mañana de abril, un hombre cruzaba apresuradamente por el Home Park, de Windsor. Asistió, confundido entre el público, a una ceremonia en la que estuvieron presentes la reina Isabel II y el príncipe Carlos. El individuo en cuestión tenía unos ojos de córnea brillante, seca como porcelana, en la que el iris destacaba con un negro intenso. La falta de humedad en la retina, lo rotundamente negro del pigmento, provocaban en la persona a quien mirase una sensación de fricción, de herida en la piel. Quizá por ello llevara gafas oscuras. Con ellas puestas, su rostro era vulgar y se perdía en el conjunto. Faz cuadrada y sin salientes, pelo liso, negro. Estatura mediana. Su traje tampoco llamaba la atención.