Description:En el silencio de la noche vibró agudo, penetrante, con la dureza de un pistoletazo repetido varias veces, el ladrido de «Tom», el perro que Leonard Sass soltaba por las noches en los pastos para que vigilase. Poseía más confianza en el tremendo y poderoso mastín, que en la agudeza y práctica de sus peones para olfatear intrusos. Los peones sólo podían descubrirlos por el ruido, si lo producían, pero «Tom» les olfateaba y de nada les servía las precauciones para no denunciarse.