Carlos Pérez Soto Proposición de un marxismo hegeliano (DITORIALARdS I Carlos Pérez Soto, Profesor de Estado en Física, se desempeña desde 1986 como profe sor de marxismo en la Universidad ARCIS. Realiza regularmente cursos sobre Epistemolo gía, Filosofía Moderna, fundamentos de la Psi cología, historia de la Danza y la filosofía de G. W. E Hegel. Ha publicado Sobre la condición social de la Psicología (Arcis-Lom, 1996); Sobre un con cepto histórico de ciencia (Arcis-Lom, 1998, 2008); Para una crítica del poder burocrático. Comunistas otra vez (Arcis-Lom, 2001, 2008); Sobre Hegel (Palinodia, 2006); Desde Hegel, para una crítica radical de las Ciencias Sociales (Itaca, México, 2008) y Proposiciones en torno a la Historia de la Danza (Lom, 2008). Carlos Pérez Soto Proposición de un marxismo hegeliano m¡m ;ái(ii © Universidad ARCIS Editorial ARCIS Libertad 53 Teléfono: (56-2) 386 6412 E,-mail: [email protected] - www.uarcis.cl Coordinador de publicaciones: V/ctor Hugo Robles Diseño y diagramación: Paloma Castillo Registro de Propiedad Intelectual N° 173.634 ISBN: 978-956-8114-78-7 Impreso en Alfabera Artes Gráficas Carmen 1985 Fono Fax 364 9242 para mi hijo Pablo Salvador para mi hijo Simón Emilio para mi hijo Ignacio Mijael ÍNDICE Prologo Introducción I. Nuevas formas de dominación II. Sobre la idea de enajenación III. Icoría del valor y explotación IV. Diferencias epistemológicas: marxismo y C'iencias Sociales V. Burgueses pobres, asalariados ricIC OS VI. Para una izquierda marxista en el siglo XXI 177 VII. Sobre la relación entre Hegel y Marx 191 Anexo. Mitos y leyendas sobre Hegel Bibliografía PRÓLOGO ¿Qué puede tener de hegeliano un marxismo "hege- liano"? El historicismo absoluto. ¿Qué puede tener de marxismo un "marxismo" hegeliano"? La completa secu larización del conflicto que ha constituido a la historia humana hasta hoy: la idea de lucha de clases. ¿Por que recurrir nuevamente a Hegel? Por su lógica de la movilidad absoluta. Por una lógica que permite pensar la universalidad como internamente diferenciada, y a la diferencia como operación de la negatividad. ¿Por qué recurrir nuevamente a Marx? Por su idea de que el horizonte comunista, el fin de la lucha de clases, es posible. Por su radical crítica de la explotación capitalista, que puede extenderse de manera consistente a una crítica del usufructo burocrático. C'ontra todo naturalismo, contra la idea de finitud humana, tan característica de la cultura de la derrota. C'ontra la esterilidad burocrática de las Ciencias Sociales. Contra el academicismo desmovilizador de la fragmenta ción "postmoderna". Recturir hoy a la conjunción posible entre Hegel y Marx es una bofetada a las modas académicas y a la resignación encubierta de teoría. Pero ¿qué Hegel? El de la lógica, el filósofo de la negatividad, el que consideró que nada grande se ha he cho en la historia sin pasión, el que instaló la tragedia en la índole misma del Ser. Pero ¿qué Marx? El que resulta de leer bajo una lógica común tanto la Ideología Alemana como El Capi tal. No el marxismo del siglo XX: Marx. Su idea de la historia, su materialización de la dialéctica. Se trata de volver a considerar seriamente el papel de la violencia en la historia. Se trata de romper con el continuo triunfalista de la tolerancia represiva y, a la vez, con la autocrítica destructiva, que se complace en los méritos del enemigo. Se trata de romper con la ominosa luminosidad de la administración y el lucro. No habrá paz mientras se siga mirando como paz la violencia estructura! que !as clases dominantes nos imponen como Estado de Dere cho. No habrá paz mientras se siga tolerando en su nom bre cjue cientos de millones de seres humanos simple mente sobren, y que otros tantos cientos de millones no tengan más horizonte que la mediocridad de la vida ad ministrada. Decir de una vez basta, y echar a andar. Tenemos derecho a correr el riesgo. Santiago, septiembre de 2008 10