ebook img

Obras del Lic. don Alfredo Chavero PDF

269 Pages·2011·33.42 MB·Spanish
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview Obras del Lic. don Alfredo Chavero

BJJIOTECA. í'B áÜT0B29 MJSOGAiro ' 1080013796 DEL Lic. DON- ALFREDO CHAVERO Miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua y correspondiente de la Española. TOMO L ESCRITOS DIVERSOS MÉXICO, Tipografía de Victoriano Agüeros, Hdilor Primera de Mesones ululi. 18 II Ji. PQ p . 05 R OI Noticia biográfica del autor V -l c -l El señor Lic. Don Alfredo Chavero, personalidad conspicua en la historia de la cultura de México, debe considerarse bajo el triple aspecto de literato, arqueólogo y político. En cada uno de esos ramos del saber humano ha prestado valioso contingente al adelantamiento de la patria, marcando profunda huella y figurando en señalado puesto entre los mexicanos que en esas agrupaciones han sabido ser prez y honra de su nación. Estudiante aprovechado desde los pri- meros años de su carrera literaria alcan- zaba siempre el primer lugar entre sus con- /ONDO H STOrkìo discípulos, y era el alumno aventajado, RCAfìD0C0VABRU8,AS que en los desempeños de certámenes., justas científicas y actos escolares sabia 135289 poner en buen lugar el nombre del maes- tro y del aula que cursaba. _ Pasaron así los primeros anos de su vi- da, hasta alcanzar el grado de licenciado rarias, á partir del año 1860, época en que en leyes y obtener el correspondiente ti- tulo. aun no dejaba las bancas de Letrán. En los escritos mencionados, el señor Las aficiones á la bella literatura, resulta- Chavero no ha seguido si:-terni determi- do de los buenos conocimientos que el Sr. nado, ni se ha adherido á ninguna escuela : Chavero había acaparado en las humani- su vigorosa imaginación y su claro talento dades, le impelieron á la poesia, y desde le han permitido abordar to.dos los géneros esos tiempos, én varias publicaciones pe- de composición literaria. riódicas publicó sus primaros versos. Hubo una época en que el amor á las be- Desde el 26 de Septiembre de 1877, en llas letras pareció ocuparlo del todo, v que estrenó la primera, hasta el día en que entonces, tomando un camino más serio esto escribimos, (1) ha producido Chavero y difícil, se dió á la composición de obras dieciocho obras dramáticas, con un total para el teatro, tanto en verso como in de cuarenta y siete actos, en su mayor par- prosa. te en verso. Ni los dramáticos del siglo Fecunda fué su labor en esa materia, de oro de la literatura castellana, con todo como lo demuestran los dramas: "Xó- y haber sido tales, que tuvieron por dis- chitl,? "La Ermita de Santa Fe," "El Va- cípulo á Comedie y á Molière, y pos rival lle de Lágrimas," "Sin Esperanza," "La á Schakespeare, lograron ser fecundos, sin Hermana de los Avilas," "El huracán de dejar de ser defectuosos : excusado nos un beso," "El aviso en el puñal," "Lo& parece decir que las obras de nuestro tam- Amores de Alarcón," y las comedias, tra- bién fecundo amigo no carecen de defec- gedias y óperas cómicas intituladas "Bien- tos ; pero no siendo el señalarlos la misión aventurados los que esperan," "Quien más de estas páginas, dejémoslos ocultos, co- grita más puede," "Quetzalcoatl." "Fan- mo lo están, entre los pliegues de la am- tasea," "El Sombrero," "El paje de la plia vestidura de bellezas con que nos pre- Virreina," "El Duquesito," "La Gitana." senta su autor el mayor número de sus ,-El Mundo de Ahora" y "En dos gabine- variadas creaciones. ¿Cómo no mostrar- tes." Los periódicos "La Madre Celestina," nos seducidos por la valentía del argumen- "El Renacimiento," "Veladas literarias." to de "Xóchitl," cuyo final del segundo "El Domingo," "El Federalista" y otros, contienen casi todas sus producciones lite- [1] D. E de Olavarría y Ferrari. pertenece; es como los bosques de su pa- acto bastaría para acreditar á cualquier tria, que por más que sean un trozo de la autor como un hábil y profundo conoce- naturaleza, como los demás bosques del dor de los efectos dramáticos, vedados á mundo, son, no obstante, diversos de to- escritores no obstante muy distinguidos? dos los bosques que no sean bosques ame- ¿ Cómo no maravillarnos del felicísimo en- ricanos. Don Juan, en el drama titulado sayo de la tragedia mexicana titulada "Los Amores de Alarcón," es también una "Quetzalcoatl," aunque no rea por otra criatura exclusivamente de Chavero, y tal cosa que por habernos probado que la an- vez la más admirable y legítima, porque tigua historia de este país, tiene toda la la "construyó," digámoslo o sí, como se épica grandiosidad que dictó los poemas construyen los mosaicos, tomándola de eternos del mundo pasado? ¿Qué puede las obras mismas del gran poeta de Méxi- tacharse, en conjunto, á la mayor parte de co, y extrayendo con criterio sin rival el sus dramas y comedias, felices estudios de espíritu del personaje de todas aquellas los más diversos géneros, desde el román- laboriosas pero, incompletas noticias que tico al realista, desde aquel que obliga á de él nos han dado infatigables indagado- meditar al espectador con su profunda fi- res y prodigiosos críticos. ¿Qué es e¡ losofía. hasta el que le hace olvidar sus "Quetzalcotl," si no .una creación de crea- últimos restos de seriedad para entretener- ciones, nacidas de un ímprobo y laborioso se con todos los caprichos de la móvil farsa estudio de muchos años, especie de "'fiat- cómica? lux" en la noche de aquellas remotísimas y oscuras edades? Si en cuanto al conjunto la mayor parte de las obras de Chavero sólo nos ofrecen Pasemos por último á la forma. ¿Cuál motivo de aplauso, ¿qué podremos decir de sus obras en verso no abunda en teso- de ellas en detalle? "Xóchitl" es una po- ros de poesía y en ejemplos de métrica? sitiva creación: la idealizac'ón de la pure- ¿ Qué elegante prosista no se muestra sa- za que vincula, podrá tener, quién lo nie- tisfecho del puro V correcto castellano que ga, muchos semejantes en otras literatu- Chavero pone en labios de sus persona- ras ; pero esto mismo dá mayor realce aún jes? Modelo de estudio y dedicación rin- á su originalidad, porque el carácter de la de por igual tributo de r espetuoso di se protagonista del bello drama, es legítima- lo á Garcilaso y á Cervantes, y ya en verso mente azteca, es decir, tiene toda la nove- ó ya en prosa es dulce y tierno con dad de las costumbres del pueblo á que "Xóchitl" y "Jerónima," apasionado con D. naturalismo: no hay un sólo tipo en la obra Juan" y "Gonzalo," arrebatado con "Her- que no tenga su retrato en un sér de carne nán Cortés" y sublime y majestuoso con y hueso, que conozcamos: el interés de la "Quetzalcoatl." I obra, fundado únicamente en la verdad de De propósito no hemos querido multi- la pintura, es tal, que seduce, y obliga sin plicar los ejemplos, deseando dar á nues- violencia al lector á devorai la comedia. tros lectores, con la brevedad de nuestro "La hermana de los Avilas" es un dra- artículo, mayores facilidades para leerle. ma de innegable mérito, y nada deja que En cuanto á las obras que este tomo desear en su lectura; no ha sido aún re- comprende, podríamos decir tanto, que presentado, y como "Los amores de Alar- faltásemos á nuestra determinación. "El cón," exige, para ser puef-to en escena, Autor de su Desdicha" acaba casi de re- compañías tan completas, ccmo en la ac- presentarse, y en su género es, después de tualidad no existen en los teatros caste- "Xóchitl," una de las mejores obras de llanos, ni de Europa ni de América. En Chavero: los lectores encontrarán el últi- versificación inspirada, conceptuosa, fácil mo acto poco menos que escrito de nue- y correcta, supera, á nuestro entender, á vo, porque entre las cualidades de nuestro todas las obras en verso de Chavero. amigo, sobresale la de una falta absoluta de Podríamos seguir hablando sobre las mal entendido amor propio, no sabe rebe- tres que acabamos de citar; pero inútil nos larse contra la crítica, por más necia é in- parece, cuando el lector va á juzgar por sí justa que sea; sabe en cambio seguir los mismo de la verdad de nuestro elogio: si consejos que con buena intención se le dan, hubiéramos de señalar sus bellezas, nece- y jamás lleva su amor á sus hijos literarios, sariamente anticiparíamos una edición es- al grado de defenderlos y amarlos por sus pecial de todas las escenas culminantes defectos: la obra, aplaudida extraordina- en que abundan. riamente en los dos primeros actos, estuvo Sólo nos falta probar, por medio.de un á punto de fracasar en el tercero: vió su breve extracto de opiniones í-.genas, que la autor la causa del mal, y le cortó con es- nuestra se acerca á lo justo tanto como tudiado y radical remedio. es posible, en nuestra inteligencia limi- tada. "El mundo de ahora" es una sucesión El señor Don Luis Fernández Guerra y de cuadros, tomados de la más palpable Orbf, ante cuya autoridad literaria se in- realidad, y presentados con un encantador clinan con respeto cuantos tienen noticia obras han merecido á otros literatos ma- de lo que es un privilegiado talento, ha drileños. No acabaríamos, en cambio, si dicha de ''Los amores de Alarcón:" "Su pretendiéramos reproducir los de nuestros "drama de usted, por lo mismo que es una distinguidos críticos mexicanos, razón por "obra alta y esencialmente literaria, senci- la cual sólo transladaremos algunos, toma- "11a de acción, rica en caracteres bien de- dos al acaso. Dice el señor Gómez Flores, lineados y sostenidos, limpia de relum- cuya opinión es por muchas circunstan- brones, y está hablada en correcto, casti- cias importante, refiriéndose á "Xóchitl: * go y elegante castellano, exige especia- "Lo primero que llama la atención en e! les elementos artísticos para su desem- "drama del señor Chavero, es el marcadí- peño en las tablas. ¿Cómo lograr si- "simo carácter nacional que supo impri- guiera un mediano conjunto en la repre- "mirle. En este sentido, creo que ninguna "sentación de una obra de tantas figuras, "otra obra dramática mexicana puede su- "importantes todas, las unas por lo que perarle y está llamada á representar "tienen que decir y las otras por lo que "un gran papel en la creación del genuino "representan ?" "teatro mexicano, sobre todo, por el sello En otra de sus cartas llama el eminente "hermosísimo de nacionalismo que ha sa- escritor español al dramático mexicano "bido imprimirle con tanta maestría co- "ilustre biógrafo de "Sahagún," "deudor "mo belleza." Habla en otros artículos al cieilo de florido y vigoroso ingenio, ti- "de la excelente prosa que la péñola del tulando "poema dramático" á "Los amo- "ilustre autor sabe manejar siempre con res de Alarcón," y calificando su pluma "tanta maestría y elegancia," é iguales de "adiestrada y maravillosa." "elogios hace del poeta lírico, "á quien muy Hemos dado á las opiniones del escri- "poco tiene que tachársele." Guillermo tor español el primer lugar, tanto porque Prieto, quizá el más popular poeta de su no disponemos de mucho, lo repetimos, patria, dice en uno de los axtículos, que el como porque se juzgue de que no es sólo romance puesto en boca de Berna! Díaz, en México, sino en España y en el seno de describiendo los sucesos de la "noche la Real Academia, donde Chavero es es- triste," "no le habría desdeñado como su- timado en todo ,su valer. Un exceso de vo el Duque de Rivas;" y de las décimas modestia de nuestro amigo, nos priva del de Hernán Cortés, "creemos escuchar un gusto de transladar aquí el juicio que sus eco de Calderón, por la valentía con que están versificadas."

Description:
El señor Lic. Don Alfredo Chavero, personalidad conspicua en la historia de la cultura de México, debe considerarse bajo el triple aspecto de literato,
See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.