Digitized by the Internet Archive 1 ¡n 2014 https://archive.org/details/obraOOvega ¡tairciHa CLASICOS CASTELLANOS G ARCIL ASO OBRAS MADRID V> ñ EDICIONES DE «LA LECTURA* % ^ 1911 IMPRENTA DS "CLÁSICOS CASTELLANOS" INTRODUCCIÓN Garcilaso de la Vega nació en Toledo, año de 1503; fué hijo segundo de D. García (1), notable político de la Corte católica, y de D.a Sancha de Guzmán, señora de Batres hubo en su estirpe es- ; critores, artistas, santos y guerreros, desde D. Pe- dro Laso, almirante del Rey Alfonso el Sabio, hasta su hermano el mayorazgo, llamado también D. Pedro Laso, corregidor de Toledo y capitán del partido rebelde al comienzo de las Comuni- dades, cuando éstas defendían sinceramente los fueros castellanos (1) Heredaba D. García, por su padre D. Pedro, el apellido Suárez de Fijgueroa pero, hijo segundón, educado ; acaso con su abuela D.B Elvira, hermana de D. Iñigo, el famoso Marqués de Santillana, tomó el apellido de ésta, la cual á su vez quiso conservar el de su madre D.' Leo- nor Laso de la Vega en vez del de su padre D. Diego Hurtado de Mendoza. El solar de la Vega se halla en las Asturias de Santillana, en la ribera del Vesaya, á una le- gua de Santillana y otra del mar. (V. Navarrete, Vida de Garcilaso, Ilust. I.) (2) "Don Pedro era un caballero de sanas entrañas y sin malicia, y junto con esta bondad, amigo de justicia y del bien del reino, y por esto se metió tanto en estos bu- llicios." (Sandoval, Hist. de Carlos V, lib. V.) VIII INTRODUCCIÓN Siendo Garcilaso mozo de pocos años quedó huérfano de padre; pasó en Toledo su primera juventud (i), y cuando fué de edad para servir al César, recibióle éste en la noble guardia de su persona. "En el hábito del cuerpo tuvo justa propor- ción, porque fué más grande que mediano, res- pondiendo los lineamentos y compostura á la grandeza; la trabazón de los miembros igual, el rostro apacible con gravedad, la frente dilatada con majestad, los ojos vivísimos con sosiego, y todo el talle tal, que aun los que no le conocían, viéndole le juzgaran por hombre principal y es- forzado, porque resultaba de él una hermosura verdaderamente viril (2)." Fué un perfecto cortesano; hablaba el griego, el latín, el toscano y el francés; manejaba las armas con gentileza; tañía el arpa y la vihuela con rara habilidad, y en las fiestas galantes, con Boscán, Acuña, Mendoza y Villalobos, triunfaba por su ingenio y su donaire; llevóle á la corte de Fran- cisco I una airosa embajada de la Emperatriz; en la deleitosa Nápoles, predilecto del virrey D. Pedro de Toledo, sirvió al Estado en car- (1) Así dicen Herrera, Tamayo y Cienfuegos pero ; Navarrete supone que debió criarse en la Casa Real, según la antigua costumbre que hacía educar junto á los príncipes á los hijos de los nobles. (2) Tamayo de Vargas, fol. 4.