Michelle deseaba lo que había conseguido su prima. Un marido que la amara y que protegiera todo lo que había conseguido en la vida. Para eso inicia un largo viaje donde conoce a un hombre malhumorado, grosero y que no la aprecia en absoluto. Fue una sorpresa para ambos que fueran parientes lejanos, pero Michelle con su objetivo en mente no se dejaría deprimir por lo que Edward opinaba de su búsqueda de marido. Ese estirado no la conocía en absoluto.