Los Evangelios Sinopticos Y La Cultura Mediterranea Del Siglo I

212 Pages·16.546 MB·Spanish

by  Malina Bruce Y Rohrbaugh Richard

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LOS EVANGELIOS SINÓPTICOS Y
LA CULTURA MEDITERRÁNEA DEL SIGLO I
J.
Bruce Malina
Richard L. Rohrbaugh
Los evangelios
sinópticos y la cultura
mediterránea del siglo 1
Comentario desde
las ciencias sociales
EDITORIAL VERBO DIVINO
Avda.de Pamplona, 41
31200ESTELLA (Navarra)
1996
Presentación
LIM-r1á-;
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7 )')'S"~ 2.
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Esta obra-hunde sus raíces en la actividad de un círculo de pro
El texto bíblico del Evangelio ha sido tomado de la traducción de La Casade la
fesores conocido durante estos últimos años como «The Context
Bibliasiempreque hasidoposible. .
Group: Project on the Bible in its Cultural Environment» (Grupo
de Contexto: Proyectopara el estudio de laBiblia ala luz de su en
torno cultural). Basándose en la amplia gama de sus publicaciones,
David Bossman, director de la revista Biblical Theology Bulletin,
ha descrito a los miembros del citado grupo como «exploradores,
no inventores; buscadores, no protagonistas; pioneros, no predica
dores. El fruto de su obra es susceptible de que otros lo usen, valo
rando el esfuerzo que lo produjo y asumiendo el riesgo de ignorar
lo. Enconsecuencia, estas obras sirven paraasentar unavez más las
bases de una teología bíblica» (BTB 19[1992J 50-51).
Quienes firmamos esta obra tenemos mucho en común. Aparte
de ser miembros fundadores del «Grupo de Contexto», nuestra es
pecialidad universitaria se centra en los actuales métodos literarios
ehistóricos usados en lainterpretación de laBiblia. Nuestras carre
ras profesionales están dedicadas asimismo a la investigación y a la
docencia. Ambos estamos interesados desde hace tiempo en la an
Títulooriginal: Social-sciencecomentaryonthe SynopticGospels
tropología cultural y en los estudios interculturales. Quizás lo más
Traducción: VíctorMorla Asensio importante es que los dos hemos pasado largas temporadas fuera
de los Estados Unidos, quenas han ayudado a enfocar nuestras
lentes mediterráneas de dos mil años de grosor haciendo estudios
sobre el terreno entre algunas poblaciones contemporáneas del
©J\ugsbu.rgFortress, 199~..©EditorialVerboDivino, 1996.Es propiedad. Prin
Mediterráneo. Estas poblaciones incluyen los tradicionales encla
ted ID SpaID. Fotocornposición: Arte 4c, Pamplona(Navarra). Impresión: Gráfi
cas Lizarra,Estella(Navarra). ves semitas palestinos, imperturbables a pesar de la brutalidad y la
inhumanidad desplegadas continuamente por los israelíes y apoya
Depósito Legal:NA. 527-1996 das por los Estados Unidos. Incluyen también algunos poblados
ISBN: 84-8169-048-1
del sur de Italia y de laMeseta Central española.
6 LOSEVANGELIOSSINÓPTICOSYLACULTURAMEDITERRÁNEADELSIGLOI
La interpretación desde las ciencias sociales del Nuevo Testa Introducción
mento constituye una aproximación «natural» para cualquiera que
haya pasado por un trance de choque cultural y eventualmente ha
ya llegado a entender y apreciar a otros grupos de seres humanos
culturalmente distintos. Resulta incluso más «natural» tras prolon
gados contactos con gente tradicional del Mediterráneo oriental.
Estamos profundamente agradecidos a quienes nos han ayuda
do en nuestra aventura, especialmente a los miembros del «Grupo
de Contexto», que han viajado por diversas partes del mundo. Las
características peculiares de este grupo resultaron evidentes a nues
tros anfitriones mediterráneos, presididos por elDr. Carlos del Va
lle, en elPrimer Congreso Internacional sobre las Ciencias Sociales
y la Interpretación del Nuevo Testamento, celebrado en Medina
del Campo (España) en mayode 1991. Los profesores participantes
demostraron entusiasmo, perspicacia y capacidad de relación. Fue Las consecuencias materiales de la revolución industrial saltan
este estimulante congreso elque marcó nuestra valoración positiva claramente alavista, y la mayoría de la gente anda con impaciencia
de este tipo de comentario, el que nos impulsó a completarlo y el tras ellas la mayorparte del tiempo. Sin embargo, con nuestras ciu
que nos ayudó a entender elvalor que supone haber sido puesto a dades superpobladas y ante nuestro medio ambiente amenazado,
prueba por nuestros colegas mediterráneos en sus propios térmi nos vamos dando cuenta con consternación de que el progreso no
nos, sobre su propio terreno. ha sido una bendición completa. De hecho, la inmensa mayoría de
Expresamos también nuestro agradecimiento a tanta gente que los críticos sociales, teólogos, poetas, filósofos, artistas e incluso
nos rodeó de favores y nos ofreció su mecenazgo y su amistad. Fi políticos se han mostrado continuamente preocupados por elvalor
nalmente damos las gracias a nuestras esposas, que han experimen del cambio operado porla modernidad.
tado junto anosotros elchoque cultural y nos han hecho partícipes
Tambiénlas consecuencias sociales y psicológicas han sido con
de sus amplias y profundas intuiciones sobre este mundo medite
trovertidas. Su historia tiene buenas y malas noticias que ofrecer.
rráneo que nos esfamiliarmente extraño.
Algunos críticos han concebido la modernidad como la liberación
del espíritu humano de los grilletes del pasado, mientras que otros
BruceJ. Malina han censurado la aridez e inhumanidad que parecen haberse cerni
Richard L. Rohrbaugh do sobre nosotros. Los críticos, por tanto, han sido incapaces de
ponerse de acuerdo sobrelo que ha supuestoparanosotros concre
tamente como seres humanos. Sin embargo, lainmensamayoría re
conoce que las sociedades industrializadas han cruzado una línea
divisoria que ha cambiado de manera irreversible el panorama de
los empeños y la percepción humanos.
Nuestro interés principal al escribir este libro se ciñe ala inter
pretaciónbíblica, especialmente alainterpretaciónde los tres evan
gelios «sinópticos» (llamados así porque Mateo, Marcos y Lucas
tienen mucho en común en su presentación de la historia deJesús).
Sin embargo, nuestro interés por estos escritos de laAntigüedad no
desvía la atención del interés por los rasgos que caracterizan al
8 LOSEVANGELIOSSINÓPTICOSYLACULTURAMEDITERRÁNEADELSIGLO1 INTRODUCCIÓN 9
mundo moderno. El hecho es que la revolución industrial ha teni La Gran Transformación
do un granimpacto en nuestra capacidad de leer einterpretarla Bi
Actualmente leemos elNuevo Testamento, nacido en un ámbi
blia, y este aspecto de la interpretación eselque nos interesa de ma
to agrario, en elcontexto de un mundo moderno eindustrial. ¿Qué
nera principal. Paraalgunos lectores de la Biblia, esta líneadivisoria
sucede en este proceso? Para afinar nuestra sensibilidad respecto a
que hemos cruzado (la «Gran Transformación», como ha sido de
lo que ocurre, debemos ser conscientes, al menos de un modo ge
nominadaaveces) amenaza nuestracapacidad de oírlo que una vez
nérico, de los cambios que ha experimentado nuestra sociedad.
la Biblia dijo con tanta claridad asus antiguos lectores. Después de
Una buena forma de empezar consiste en aclarar'el sentido de los
todo, la Biblia fue escrita en un mundo agrario, preindustrial, don
términos «agrario» e «industrial». Con el término «agrario» no nos
de lascosas eran muydiferentes de lo que sonahora. Ni los autores
referimos alo «agrícola». Actualmente sólo un pequeñoporcentaje
bíblicos ni sus primeros oyentes podían haber anticipado nada pa
de la población en las sociedades industrializadas trabaja la tierra.
recido a la Gran Transformación que ha tenido lugar durante los
Son agricultores. Sin embargo, el término «agrario» no sirve para
doscientos últimos años. Han cambiado para siempre vastas áreas
señalar elcontraste entre estos granjeros rurales y nuestros obreros
de la experienciahumana, y con ello seha producido un nuevo mo
de las ciudades. Quizás los obreros del campo y de las fábricas po
do de percibir el mundo, una nueva panorámica. Más aún, si lapa
drían ser distinguidos en cualquiermarco comúnhistórico o social,
norámica de la Antigüedad era tan notoriamente diferente de la ac
pero lo que nos interesa es un problema de mayor alcance: cómo
tual (y nuestra idea es que así lo era), no tendría por qué extrañar
era la vida antes y después de la revolución industrial. El hecho es
que nuestra capacidad de leer y entender la Biblia hubiese sufrido
que elobrero del campo y elde lafábrica compartenprobablemen
algún cambio fundamental.
te en lo esencial una perspectiva moderna de las cosas, y tienen más
Por supuesto, se ha convertido en un lugar común reconocer en común entre sí de lo que podrían tener con sus respectivos ho
los límites espacio-temporales de la Biblia. Sabemos que el Nuevo mólogos de la Antigüedad.
Testamento es el producto de un pequeño grupo de personas que El término «agrario», tal como lo usamos, tiene un significado
vivieron en el siglo primero de nuestra era, en el Mediterráneo más cercano a «preindustrial» que a «agrícola». Lo utilizamos para
oriental. Pero ladistancia entre el mundo de aquel grupo y el nues referirnos globalmente atodos cuantos vivieron antes de la revolu
tro se calcula normalmente en términos históricos, en términos del ción industrial, lo mismo ala gran mayoríaque se dedicaba atraba
discurrir de los acontecimientos e ideas que pudieran explicar lo jar la tierra que ala minoría que vivía en poblaciones o en las pocas
que claramente describen los textos bíblicos. Los especialistas han ciudades existentes. En este sentido, en el siglo 1, eran «agrarios»
dedicado gran parte de su esfuerzo a contar aquella historia. Sin tanto el campesino como el habitante de la ciudad que nunca había
embargo,tales explicacionesno son suficientespara entenderlapo pisado un campo de cultivo. De manera análoga, tanto.elhon:b~e
sición del lector contemporáneo de la Biblia. Debemos reconocer de empresacomo elagricultor modernos sonpersonas «industriali
también, como han empezado ahaceralgunos recientes estudios de zadas». En resumen, tratamos de subrayar el contraste entre la
las ciencias sociales sobre el Nuevo Testamento, que la distancia perspectiva del moderno periodo industrial y la visión que se tenía
entre nosotros y la Biblia, además de temporal y conceptual, es so del mundo con anterioridad a la GranTransformación.
cial. Tal distancia social incluye diferencias radicales respecto a es
tructuras sociales, roles sociales, valores y rasgos culturales genéri
El mundo agrario
cos. De hecho, puede ser que tal distancia social sea la más funda
mental de todas. Puede que sea más decisivaparanuestra capacidad Las sociedades agrarias empezaron a hacer su aparición en los
de leer y entenderla Biblia que la mayor parte de las cosas que han fértiles valles del OrienteMedio hace unos cinco o seis mil años. Su
ocupado la atención de los especialistas. Para entender esta afirma presencia estuvo marcada por lainvención del arado, la rueda y la
ción, por qué es necesario abordar directamente este problema, vela, eldescubrimiento de la metalurgia y la domesticación de ani
puede ser útil que recordemos unavez más lo realmente revolucio males. Todo ello desembocó en un rápido crecimiento de la pro
naria que fue la GranTransformación. ducción agrícola, que creó por vez primera en la historia humana
10 LOSEVANGELIOSSINÓPTICOSYLACULTURAMEDITERRÁNEADELSIGLOI INTRODUCCIÓN 11
tandistintos de los conocidos en otras regiones de Europay en Es
un excedente económico relativamente sustancioso. Esas innova
tados Unidos.
ciones tecnológicas produjeron una reacción en cadena que alteró
de manera irreversible muchos de los modelos de las antiguas so Por supuesto, los críticos y los escépticos reconocerán rápida
ciedades horticultoras (granjas a pequeña escala) que dominaban el mente la necesidad de formular dos importantes reservas. Por una
Mediterráneo oriental. La producción agrícola se desarrolló a una parte, resulta obvio elhecho de que no son exactamente equivalen
escala desconocida hasta entonces. Por vez primera aparecieron la tes el antiguo continente cultural mediterráneo y la moderna re
escritura alfabética, la acuñación de monedas y los ejércitos regu gión mediterránea. Las cosas han cambiado necesariamente en dos
lares. De igual modo, este paso del mundo horticultor al agrario se mil años. Pero convendría ofrecerun parde comentarios aeste res
vio acompañado por la expansión de la ciudad preindustrial, la pecto. El primero es que, dada lapersistencia de numerosas carac
emergencia del imperio integrado por ciudades-estado y el rápido terísticas de las áreas culturales alo largo del tiempo, lassociedades
crecimiento de la población. Como resultado de esta revolución de la actual cuenca mediterránea ofrecen laanalogía viva más cerca
tecnológica agraria, el Mediterráneo oriental fue siendo ocupado na que poseemos a los conjuntos de valores y a las estructuras so
por sociedades estrictamente agrarias durante laEdad del Bronce. ciales que caracterizaban las relaciones humanas cotidianas en la
Biblia. Por supuesto, habría que comprobar en cada caso el grado
Los expertos identifican generalmente una segunda fase de la
de coincidenéia entre lo antiguo y lo moderno. Sin embargo, esim
revolución agraria con el comienzo de la difusión del hierro. En el
portante decir que podemos comprobar algo real y bastante con
siglo VIII a.e. el uso del hierro empezó a afectar ampliamente a la creto. Más aún, el mejor modo de realizar tales comprobaciones es
vida diaria. Durante este periodo emergieron sociedades agrarias
usar con cuidado y de forma controlada los modelos extraídos de
«avanzadas», unperiodo que conocen bien los estudiantes de laBi
los estudios actuales del área mediterránea. Los modelos son repre
blia. Importantes sociedades como Egipto, Persia, Grecia y Roma
sentaciones abstractas y simplificadas de interacciones más comple
despuntaron, florecieron y se desvanecieron en la corriente social
jascon elmundo de lo real. Parapoder entender, controlary/o pre
de lahistoria. Sin embargo, todas ellasfueron sociedades tan típica
decir, la gente piensa con modelos. Veremos dentro de poco con
mente agrarias como lasque siguieron existiendo hastaelcomienzo
mayor claridad la relevancia de lo que estamos diciendo, pero es
de la revolución industrial. Muchos de sus rasgos agrarios funda
importante recordar que los modelos son en realidad mecanismos
mentales persistieron inalterables hasta la Era Moderna.
cognitivos que ayudan adesenterrarlasdimensiones, aprimeravis
Los antiguos que vivieron y escribieron en estas sociedades ta no aparentes, de determinados marcos sociales, así como air de
agrarias del mundo mediterráneo, el mundo bíblico, habitaron lo sarrollando las ramificaciones de tales dimensiones. Los modelos
que los antropólogos modernos han dado en llamarun «ámbito de deben ser comprobados con datos reales, en este caso con informa
difusión» (una región que comparte una serie de instituciones cul ción tomada de los textos bíblicos, y retocados en consecuencia. Si
turales comunes que han persistido durante largos periodos de facilitan la comprensión que se espera de ellos, estupendo. Si no,
tiempo). Tal regiónformaba un «continentecultural», como sedice deben ser descartados en favor de otros, pues un determinado mo
aveces. Cinco milenios de participación común en conquistas, co delo puede ser inadecuado para una serie de datos, o la antigua si
lonialismo, mezcla de razas y comercio, junto con una economía tuación descrita puede diferir enormemente de aquella para la que
rural mixta de granjeros y ganaderos a pequeña escala, tomaron fue creado el modelo.
cuerpo en una serie de grandes imperios agrarios y crearonun con La segunda reserva encierra más dificultades. Como ocurre con
junto de instituciones culturales comunes, que persistieron tam los autores de estas páginas, la mayor parte de los especialistas del
bién durante mucho tiempo. Ahora bien, este «continente cultural Nuevo Testamento fueron educados como historiadores y apren
mediterráneo» resultante sigue existiendo todavía hoy. dieron a centrarse en lo que es particular y único de un momento
del pasado. Así, innumerables libros y artículos andan todavía es
Para los estudiosos del Nuevo Testamento todo esto quiere de
forzándose por discernir entre lo romano y lo griego, lo egipcio y
cir que en la región mediterránea tenemos a nuestra disposición
lo hebreo. Todos conocemos lo que era típico y único de los anti
una especie de laboratorio vivo en el que podemos descubrir unos
guos israelitas, y como historiadores nos resistimos a mezclarlos
modelos sociales y una dinámica que a menudo sorprendenpor ser
12 LOSEVANGELIOSSINÓPTICOSYLACULTURAMEDITERRÁNEADELSIGLO1 INTRODUCCIÓN 13
con otros grupos. Nos resulta molesto asumirque ciertas condicio Sin embargo, sisituamos en un nivel alto de abstracciónlascua
nes que sab~mosque existieron en elsiglo segundo puedan ser apli lidades únicas de las ciudades particulares que a los historiadores
~ada~ ~l pnmero, o que la situación en Siria en el año 90 pueda gusta ponerde relieve (cualidades que exigen datos extraídos de ca
identificarse conla del año 80. da lugar particular estudiado), observaremos que, apesar de laspe
culiaridades, siguen existiendo una serie de modelos sociales com
Las ciencias sociales, por el contrario, investigan lo que es cul
turalmente común y genérico. No se centran en los detalles únicos partidos por todas las ciudades del área cultural mediterránea, in
cluidas Jerusalén y Damasco. Tales características comunes consti
sino en !as generalizaciones. Sus métodos se aplican a lo que los
tuyen el centro de atención de los estudiosos de las ciencias socia
grupos tienenen co~ú.n, más que ~ lo qu~ lo~ hace únicos. En lugar
de observar lo que distingue alantijnio egIpcIOdel antiguo romano les, y con frecuencia pueden resultar muy instructivas para nuestra
,especialist~s ambo~ lectura de los textos bíblicos. Pueden iluminar. Pueden proporcio
los en cienci.associales desean conocer lo que
teman en comuncomo miembros del mundo agrario mediterráneo. nar una comprensión del contexto social de laBiblia como no pue
Podrían incluso quer~rsaber durante cuánto tiempo persistieron den hacerlo los datos del historiador. Por esta razón, hemos recu
l<;>s rasgos c?mu,n.es.SIn ~mbargo, y por desgracia, dado que histo rrido a los modelos de las ciencias sociales deducidos de los estu
nador.es y cIentlfI~os SOCIales parten típicamente de estos dos cen dios de los antropólogos mediterráneos (que trabajan aun nivel de
tros diferentes de Interés, sus conversaciones se convierten con fre abstracción bastante alto) para elaborar los «Escenarios de lectura»
cuencia en diálogos de sordos. y las «Notas» que ofrecemos en nuestro comentario. Son un inten
to de situar los evangelios en un contexto agrario mediterráneo lo
.La razón ~rincipalde la dificultad es que la gente puede pensar
más cercano posible alcontexto del que provienen.
a ~Iferentes. niveles de abstr.acció?, y distintas disciplinas acadé
nucas trabajan con frecuencia a diferentes niveles de abstracción.
L.as ~atemáticas, por ejemplo, son muy abstractas, pues los proce La revolución industrial
dIm~entosmatemáticos se refieren a todo en general y a nada en
Aunque la redacción del Nuevo Testamento tuvo lugar en el
particular; «Uno más uno son dos» se refiere a cantidades abstrac
mundo agrario mediterráneode laAntigüedad, nuestro deberesleer
tas, aplicables casi a cualquier situación. Los modelos de las cien
lo en elOccidente moderno industrializado. La segunda gran revo
cias sociales trabajan también a un nivel de abstracción comparati
v~mente~lto y 1?uedt;nasimismo ser aplicados a un espectro más lución industrial, que es la que nos interesa, fue la que creó la era
bien amplio de situaciones. Por ejemplo, en el nivel en que funcio moderna. A finales del siglo XIX, los historiadores de la economía
empezaronausar eltérmino «revoluciónindustrial» paracaracteri
nantales modelos nos encontramos con una realidad ampliamente
zar las innovaciones tecnológicas y económicas que constituían es
genérica llamada «ciudad preindustrial». Este modelo o construc
c~ór:mentalde l~ ciudadpreindustrial está formado porlas caracte ta segunda gran revolución de la historia humana. Los historiado
res sociales descubren sus inicios en las innovaciones tecnológicas
n,s;Icas co.mpa=tldaspor las ciudades de ese tipo existentes en la re
de Escocia e Inglaterra que, entre 1760 y 1830, cambiaron radical
gIOnmediterránea durante largos periodos de la historia humana.
A.un, ~llVel alto de abs:r~cción, nos p~oporcionauna amplia des mente la faz de la sociedad británica. A decir verdad, los avances
c~IpcIOnde las c~ractenstlcas de tales CIUdades. Sin embargo, si nos tecnológicos habían dado ya algunos pasos tanto en Gran Bretaña
como en el Continente, pero durante ese periodo crucial, a finales
SItuamos en el nivel de abstracción bajo en el que trabaja explícita
mente el~istoriador, sólo existían ciudades únicas, particulares, co del siglo XIX, se dieron ciertos desarrollos particulares que desem
bocaron en un rápido y sustancial crecimiento de la actividad in
mo por ejemplo Damasco. A este nivel, los historiadores tienen
dustrial.
que pensar confrecuencia en lo que es distintivo de la ciudad clási
ca,por u.naparte, y.de la ciudad oriental, por otra, o quizás incluso De entre estas innovaciones del siglo XIX, lasmás conocidas son
de dos CIUdades onentales como Jerusalén y Damasco. Percibidas lasque afectaban alaindustriatextil: lalanzadera móvil, larueca de
desde el nivel bajo de abstracción, no son iguales en modo alguno. hilado fino y las grandes máquinas tejedoras, a las que pronto se
Como todos sabemos, en el nivel más concreto de larealidad nunca aplicó un nuevo sistema de vapor. Hacia 1845 la producción textil
hay dos cosas exactamente iguales, ni siquiera dos copos de nieve. en Gran Bretaña había aumentado el 500 por ciento sobre el nivel
INTRODUCCIÓN 15
14 LOSEVANGELIOSSINÓPTICOSYLACULTURAMEDITERRÁNEADELSIGLOI
«primarias» (agricultura y materias primas). Actualmente, en las
alcanzado por la generación anterior. Siguieron otras invenciones,
sociedades industrializadas lacifra no supera el5por ciento.
que industrializaron todos los sectores de la sociedad británica.
Durante el mismo periodo, nuevos métodos de producción multi 3.Enlas sociedades agrarias, sabíanleer y escribirentre el2 y el
plicaron por veinticuatro el volumen de producción de hierro, y 4porciento de lapoblación. En lassociedades industrializadas esas
por nueve el de carbón. Así surgió una industria basada en la má cifras se refieren alos analfabetos.
quina, y con ella llegaron los esfuerzos iniciales por la estandariza 4.El índice de natalidad de lamayoríade lassociedades agrarias
ción de las piezas, que hizo la reparación de la máquina al mismo se situaba en torno al40 por mil. En la mayor parte de las socieda
tiempo posibley barata. des industrializadas, se sitúa a menos de la mitad. Sin embargo, el
índice de mortandad ha descendido incluso más drásticamente que
Hacia 1860hacíansu apariciónladinamo, eltransformadory la
el de nacimientos. Nos encontramos así con el curioso fenómeno
industria del aceite. Cada uno de estos elementos produjo reaccio
de la disminución de los nacimientos y del rápido aumento de la
nes en cadena. En la década de los 80 se descubrieron nuevos pro
población.
cesos paralaproducciónde acero; como resultado, los ferrocarriles
se extendieronpor Gran Bretaña y por la mayor parte de los Esta 5. La esperanza de vida en la Roma del siglo I a.e. era de unos
dos Unidos. La agricultura sevio transformadaporla invención de veinte años en el momento de nacer. Sise sobrevivía a los peligro
segadoras, agavilladoras, trilladoras, tractores a vapor y arados de sos años de la infancia, se alcanzaban los 40, la mitad de nuestras
acero. y lo que esmás importantepara eldesarrollo del comercio y actuales expectativas en lassociedades industrializadas.
los mercados, la nueva industrialización se extendió rápidamente 6. En contraste con las descomunales ciudades que actualmente
por Europa occidental y Norteamérica. conocemos, la ciudad más grande de la Europa del siglo XIV, Vene
cia, tenía una población de 78.000 habitantes. Londres tenía 35.000
Resulta innecesario para nuestros propósitos contar las ulterio
y Viena 3.800. Aunque resulta muy difícil dar con las cifras de po
res fases de esta permanente revolución. Hemos dicho lo suficiente
blación de la Antigüedad, actualmente se habla de 35.000 habitan
para hacer ver que, cuando hablamos de sociedades industrializa
tes paraJerusalén, 1.500para Cafarnaúny unos 200para Nazaret.
das, nos referimos alas sociedades en las que la producción indus
trializada dinamizó y elevó elcrecimiento económico aproporcio 7.EnEstados Unidos, elDepartamento de Trabajo tieneinscri
nes sin precedentes, desde mediados del siglo XVIII hasta nuestros ta actualmente una cifra superior a las 20.000 profesiones, cifra a la
días. Es éste un mundo que nunca pudieron haberse imaginado los que se suman varios cientos cada año. Por contraste, los archivos
escritores del Nuevo Testamento. Sin embargo, no hemos dicho lo de impuestos de París (59.000 habitantes) en 1313 sólo tenían ins
suficiente para evocar realmente una estimación de la magnitud de critas 157.
lo sucedido. La mayoría de las veces damos todo por supuesto, de
8. A diferencia del mundo moderno, en las sociedades agrarias
modo que olvidamos la gran cantidad de áreas de lavida que sehan
entre el l y el3porciento de lapoblaciónposeíande una ados ter
visto afectadas. Seráútil, portanto, destacaralgunos de los cambios ceras partes de los terrenos de labranza. Como el 90 por ciento o
específicos provocados por la industrialización. La siguiente lista más eran agricultores, lainmensamayoríaposeía alo sumo algunas
no pretende ser exhaustiva, sino sólo ilustrativa. Setrata de una se parcelas para subsistir.
rie de datos tomados al azarde entre laproducción de los historia
9. La burocracia federal en Estados Unidos en 1816 alcanzaba
dores sociales, que nos ayudarán a recordar lo realmente grande
la cifra de 5.000 funcionarios. En 1971 ascendía a 2.852.000, y ha
que fue aquella transformación.
seguido creciendo rápidamente. Aunque en la Antigüedad se con
1. En las sociedades agrarias, la población rural superaba el 90 tabaconun aparato político, administrativo y militar, nuncaexistió
por ciento. En las sociedades industrializadas, más del 90 por cien nada que se pareciera por lo más remoto a la moderna burocracia
to esurbana. gubernamental. En su defecto, los bienes y servicios tenían como
intermediarios apatronos, que actuaban muy almargendel control
2. En las sociedades agrarias, entre el 90 Yel95por ciento de la
gubernamental.
población se dedicaba a lo que los sociólogos llaman industrias