ebook img

los cuadrados mágicos matemáticos en al-andalus. el tratado de azarquiel mathematical magic ... PDF

33 Pages·2009·0.3 MB·Spanish
by  
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview los cuadrados mágicos matemáticos en al-andalus. el tratado de azarquiel mathematical magic ...

AL-QAN(cid:1)ARA XXX 1, enero-junio de 2009 pp. 137-169 ISSN 0211-3589 LOS CUADRADOS MÁGICOS MATEMÁTICOS EN AL-ANDALUS. EL TRATADO DE AZARQUIEL MATHEMATICAL MAGIC SQUARES IN AL-ANDALUS: AZARQUIEL’S TREATISE MERCÈ COMES ROSA COMES UniversidaddeBarcelona Elartículoestudialapresenciadeloscuadra- Thispaperfocusesonthepresenceofmathe- dos mágicos matemáticos en al-Andalus. matical magic squares in al-Andalus. After Despuésdeunrepasointroductorioalahis- an introductory review on the history of toriadedichoscuadradosmágicos,alproble- magic squares, the problem of their origins madesuorigenyasudesarrolloeneloriente and their development in Eastern Islam, the islámico,seexaminanlosmétodosdecons- methods of construction of the talismanic trucción de los cuadrados talismánicos que squares appearing in two manuscripts of aparecen en dos manuscritos del tratado de Azarquiel’streatise,theonlyoneonthissub- Azarquiel,elúnicosobreestetemaconocido jectknowninal-Andalus,aswellastheirre- enal-Andalus,asícomosurecepciónenEu- ceptioninEuropeareexamined. ropa. Palabrasclave:cuadradosmágicos;al-Anda- Keywords:Magicsquares;al-Andalus;Azar- lus;Azarquiel;magiatalismánica. quiel;Talismanicmagic. Introducción Esteartículotrataráexclusivamentedeloscuadradosmágicosma- temáticosenal-Andalus,esdecirdeaquelloscuyascasillascontienen unaseriedenúmerosnaturalesconsecutivos,empezandoporel1,que mantienenentresíunarelaciónmatemática,excluyendo,porlotanto, los cuadrados con letras o números representando palabras que no guardan las proporciones matemáticas exigidas. No disponemos de información fiable sobre los orígenes de estos cuadrados mágicos en al-Andalus, ni en el mundo islámico en gene- ral.NisiquieraelgranesfuerzoinvestigadorqueleshadedicadoJac- ques Sesiano permite ofrecer alguna certidumbre al respecto. Sesiano propone algunas hipótesis, entre ellas, la posibilidad de que existiera una cierta conexión con la introducción del juego del ajedrez en Per- 138 MERCÈCOMESYROSACOMES sia, lo que explicaría el uso de ciertos movimientos de las piezas del ajedrez,especialmenteelcaballo,elalfilylareina,enlaconstrucción de algunos cuadrados1. Loquesíestáclaroesque,ensusinicios,lacienciadeloscuadra- dos mágicos, tal como la encontramos en los documentos islámicos, ofrecía una vertiente puramente matemática y así lo demuestran los manuscritosmásantiguosencontrados.Tambiénelnombreárabecon el que eran designados, wafq al-a‘d(cid:4)d o al-awf(cid:4)q al-‘adadiyya (dis- posición armónica de los números) y el de su estudio (cid:7)is(cid:4)b al-wafq o al-wifq2 (cálculo de la disposición armónica), apuntan en esta misma dirección. SegúnSesiano,laconexióndeestoscuadradosmatemáticosconla magia y la influencia de los planetas no solamente sería más tardía sinoquesetrataríadelaúnicatradiciónquesetransmitiríaalaEuro- pa latina donde, efectivamente, no encontraremos ningún ejemplo de la tradición matemática. Esto habría dado pie a que hoy se les conoz- ca como «cuadrados mágicos»3. Sin embargo, aunque efectivamente latradiciónquellegaráalaEuropalatinaserálatalismánicadeAzar- quiel,nodebemosolvidarquefuentesanteriores,comolasRas(cid:4)’ilde los Ijw(cid:6)n al-(cid:16)af(cid:6)’, ya atribuyen propiedades mágicas a los cuadrados matemáticos, combinados con ciertos datos astrológico-planetarios, que coinciden con las que ofrecerán los autores que relacionan direc- tamente cada uno de los cuadrados con un planeta en concreto4. En líneas generales, cabe decir que en el mundo islámico la cien- cia de los cuadrados mágicos tiene sus inicios en el siglo IX, se desa- rrolla entre los siglos X y XI, ofrece su máximo esplendor en el XII y comienzaadeclinarenelXIII.Apartirdeestemomentosuusosere- lacionacadavezmásconlamagiaysevuelvemáspopular5.Encon- secuencia,comienzanaescasearlosautoresqueconocenlosdistintos métodos de construcción y son capaces de desarrollar tratados mate- 1 Sesiano,J.,“ConstructionofMagicSquaresUsingtheKnight’sMoveinIslamic Mathematics”,ArchivesfortheHistoryofExactSciences,58(2003),1-20. 2 Souissi,M.,Lalanguedesmathématiquesenarabe,Túnez,1968,353. 3 Sesiano,J.,“MagicSquaresforDailyLife”,enCh.Burnettetalii(eds.),Studiesin the History of Exact Sciences in Honour of David Pingree, Leiden-Boston, 2004, 715-734. 4 Ras(cid:4)’ilIjw(cid:4)nal-(cid:18)af(cid:4)’,ed.Beirut,s.f.,1,109-113. 5 IbnJald(cid:4)nenlaMuqaddima,dedicauncapítuloalamagiaylostalismanes,donde se mencionan cuadrados de letras y números. Ver Rosenthal, F. (trad.), The Muqaddi- mah:anIntroductiontoHistory,Princeton,1958,III,156-227. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 LOSCUADRADOSMÁGICOSMATEMÁTICOSENAL-ANDALUS.ELTRATADODEAZARQUIEL 139 máticos al respecto, pues les basta con copiar los cuadrados, previa- mente atribuidos a un planeta, e indicar las posibles utilidades mági- cas.Esporelloqueprácticamentenuncaaparecejuntoalcuadradola descripcióndelprocedimientoempleadoensuconstrucciónyquelos diferentes manuscritos de una misma obra ofrecen cuadrados de dis- tinta procedencia, a menudo extremadamente corruptos. Definición del cuadrado mágico desde el punto de vista matemático6 Unabrevedefinicióndelcuadradomágicoyunadescripcióndesu tipología nos permitirán identificar los cuadrados andalusíes. En términos generales, se trata de una construcción formada por un cuadrado dividido en un número igual de casillas por lado, que contienen números naturales consecutivos, comenzando por el 1, or- denadosdetalformaquelasumadelosnúmerosqueaparecenenlas casillasdecadaunadelaslíneashorizontalesesconstanteeigualala suma de las casillas verticales, así como a la de las dos diagonales principales.Dichasumarecibeelnombredesumamágicaoconstante mágicayserepresentahabitualmenteporM .Loscuadradosmágicos n se distinguen por su número de orden (n), que viene dado por el nú- mero de casillas por lado. Así, un cuadrado que contiene 3 casillas por lado será un cuadrado de orden 3, uno que contenga cuatro casi- llas será de orden 4, etc.7 Generalmente se emplean los primeros nú- meros enteros que corresponden a n2, siendo la suma de estos núme- ros:n2(n2+1)/2.Lasumadetodaslasfilas,todaslascolumnasylas dos diagonales principales será: M = n (n2 + 1) / 2. n 6 J.Sesianoofreceunadescripcióndetalladaenlamayoríadesuspublicacionesso- breeltema.VéasemuyespecialmentelosprólogosdeUntraitémédiévalsurlescarrés magiquesdel’arrangementharmonieuxdesnombres,Lausanne,1996yLescarrésma- giquesdanslespaysislamiques,Lausanne,2004. 7 Elcuadradodeorden3eselmínimoposible,puestoqueuncuadradodeorden2no esfactibleyaqueparaquesecumplieralacondiciónprincipal,segúnlacualtodaslasfi- las,columnasydiagonalesdebensumarlomismo,todossusnúmerosdeberíanserigua- les,loqueinvalidalacondiciónindispensabledequetodoslosnúmerosseanconsecuti- vosy,porlotanto,diferentes. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 140 MERCÈCOMESYROSACOMES Tipos de cuadrados DeformamuygeneralysiguiendoaSesiano,podemosdividirlos cuadrados en tres categorías según el orden al que pertenezcan. a) Impares:nesimpar(n=2k+1),dondeneselnúmerodecasi- llasporladoykcualquiernúmeronatural.Porejemplo3,5,7,9,etc. b) Parmente pares: n es par y divisible por 4 (n = 4k), por ejem- plo 4, 8, 12, etc. c) Imparmente pares: n es par y divisible únicamente por 2, por lo que se refiere a los números pares, siendo el resultado de esta divi- sión impar (n = 2 (2k+1)), por ejemplo 6, 10, 14, etc. Si atendemos al tipo, que implica la adición de condiciones com- plementarias que se reflejan a menudo en los métodos de construc- ción, podemos dividirlos en: 1) De magia simple: los que únicamente cumplen con los requi- sitos esenciales. 2) Con bordes: aquellos en los que aunque se vayan suprimiendo lossucesivosbordessiemprequedaenelinterioruncuadradomágico. 3) Pandiagonales: los cuadrados en los cuales, además de ser mágicas las sumas de sus diagonales principales, lo son también las sumas de las diagonales parciales (paralelas a una diagonal principal) complementarias. 4) Compuestos o compartimentados: es decir, que se componen de una serie de compartimentos cada uno de los cuales es, en sí mis- mo, un cuadrado mágico. Existen también varios métodos de construcción que no implican cambio de tipo, como por ejemplo: i) El método de las diagonales complementarias, que se basa en llenar mediante números consecutivos y en operaciones sucesivas, pri- mero la mitad superior y luego la inferior (o viceversa) de las casillas de las diagonales complementarias paralelas a una de las principales. ii) Elmétododeldiamanteocuadradooblicuo,consistenteenla inclusión en el cuadrado a completar de un cuadrado oblicuo, que se rellena en primer lugar, generalmente con los números impares. Me- diante este método se obtiene un cuadrado mágico similar al del mé- todo anterior8. 8 Loscuadradosconstruidosconelmétododelcuadradooblicuopresentanlaparti- cularidaddequelacifracentralesiguala(n2+1)/2(n=númerodeorden);mientrasque Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 LOSCUADRADOSMÁGICOSMATEMÁTICOSENAL-ANDALUS.ELTRATADODEAZARQUIEL 141 iii) El método de puntuación: que es un sistema pensado para completar los cuadrados de orden parmente par, especialmente el de orden4,yqueconsisteenmarcarconpuntoslasdiagonalesprincipa- lesyapartirdeahí,llenarconnúmerosconsecutivosendosoperacio- nes sucesivas, primero las casillas de las diagonales principales, par- tiendo del cuadrado superior derecho y en dirección sinistrorsa, es decir de derecha a izquierda; a continuación se llenan las casillas que hanquedadoenblanco,partiendodelcuadradoinferiorizquierdoyen dirección dextrorsa (de izquierda a derecha). Este método fue creado en principio para el cuadrado de orden 4 pero se adaptó con facilidad a los otros cuadrados parmente pares, como los de orden 8. También los cuadrados de orden imparmente par, como los de orden 6, se pue- den completar con una adaptación de este método9, aunque dichos cuadrados fueron los más difíciles de sistematizar, puesto que no ad- miten la aplicación directa de los métodos que funcionan sin proble- ma en los otros casos (impares y parmente pares)10. iiii) El método del salto de caballo, que implica, como su nom- bre indica, la distribución de los números en las distintas casillas me- diante el movimiento de esta pieza del ajedrez y el salto de una casi- lla,obienainiciodecolumnaodefila,cuandolacasillaacompletar está ya ocupada por un número anterior. Asimismo,podemoshablardetransformacionesdeloscuadrados, lo que implica rotaciones, inversiones, etc. lacifraqueleantecedeenlacolumnacentralesigualan2ylaquelesigue,1.Apartede enloscuadradosde3delosmanuscritosdeAzarquieldeViena(V)yLondres(B)identi- ficadosenlasnotas43y44yquecomoveremosmásadelantenosonrepresentativos, encontramostambiénestacaracterísticaenloscuadradosde5y9(B)yenlatradición posterior,especialmenteenAgrippa. 9 Paraunadescripcióndelmétodousadoenelcuadradode6(V),cf.Nowotny,K.A., “The Construction of Certain Seals and Characters in the Work of Agrippa of Nettes- heim”,JournaloftheWarburgandCourtauldInstitutes,12(1949),46-57,51ySesiano, J.,“Untraitépersansurlescarrésmagiques”,Ayene-yeMiras,ns,v.3,n.º1(28),2005, 69-116,esp.93-95,figs.25-26. 10 Savage, D.F., “Oddly-Even Magic Squares”, en W.S. Andrews et alii, Magic SquaresandCubes,NuevaYork,1960,217-224,esp.217. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 142 MERCÈCOMESYROSACOMES Relación de los cuadrados con los planetas Larelacióndeloscuadradosmágicos,enconcretodelossietepri- meros, es decir del orden 3 al 9, con las virtudes mágicas de los siete planetas conocidos desde la antigüedad (aquellos observables a sim- ple vista), está documentada en épocas muy diversas. Ya desde tiem- pos muy antiguos, los espíritus de los planetas se invocaban para su- plicar ciertos favores, sobre todo en la magia que emplea talismanes, construidos mediante ciertos rituales y bajo condiciones astrales de- terminadas, con el fin de modificar de alguna manera el destino, en contraposición a la magia adivinatoria, que pretende averiguar el fu- turo11. La invocación a los planetas en el contexto de la magia talis- mánica era una costumbre habitual entre los sabeos12 y quizás no deba sorprendernos que los primeros textos matemáticos sobre cua- drados mágicos procedieran de este entorno. Porotraparte,mientrasqueenOrientesedesarrollóunaimportan- te labor matemática, diseñándose métodos cada vez más sofisticados de construcción, en al-Andalus no conocemos ningún tratado de este tipo. El único tratado andalusí sobre cuadrados mágicos, obra de un científico precisamente, trata únicamente del uso de estos cuadrados relacionándolos con los planetas con el fin de obtener ciertos benefi- cios mediante algunas de sus virtudes mágicas compartidas. Precedentes históricos de los cuadrados mágicos Desde la antigüedad y en gran diversidad de culturas se consideró que la combinación en condiciones específicas de letras y números formando cuadrados tenía unas propiedades mágicas de las que care- cíanlasmismasletrasynúmerosconsideradosaisladamenteocombi- nados de manera distinta. 11 Ver al respecto la introducción de Savage-Smith, E., Magic and Divination in EarlyIslam,Aldershot,2003,xiii-li. 12 ConrespectoalpapeljugadoporlossabeosdeHarranenlatransmisióndeciertos ritosmágicos,verelartículo“(cid:16)(cid:6)bi’a”deTouficFahdenEI2,VIII,675-678;Peters,F.E., “Hermesand(cid:13)arr(cid:6)n.TheRootsofArabic-IslamicOccultism”,enSavage-Smith,Magic and Divination in Early Islam, 55-86 y Green, T.M., The City of the Moon God. Reli- giousTraditionsofHarran,Leiden,1992. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 LOSCUADRADOSMÁGICOSMATEMÁTICOSENAL-ANDALUS.ELTRATADODEAZARQUIEL 143 Lacombinacióndelosnúmerosnaturalesconpropiedadespareci- das es también muy antigua y de hecho el primer cuadrado que en- contramos es el de orden 3, conocido en el mundo musulmán con el término bud(cid:10)(cid:7), formado con las letras que corresponden a los núme- ros de las cuatro esquinas de este cuadrado (fig. 1), el más sencillo posible puesto que admite una única combinación con el 5 en el cen- tro, aunque puede mostrarse en rotación o inversión13. Muestra de este cuadrado la encontramos ya, por ejemplo, en la antigua China. Nonosconstaquecuadradosdeordensuperiorhubieranaparecidoen China antes del siglo XIII, momento en que el contacto con las cien- cias exactas árabes, especialmente la astronomía y las matemáticas, está ya bien documentado. Nosetienennoticiasconcretasdequeloscuadradosmágicosfue- ranconocidosenlaGreciaantigua,aunqueciertostestimoniosárabes evocanunateóricaprocedenciagriega.Esteorigen,posiblementemí- tico y por otra parte habitual en distintos aspectos del conocimiento, muy probablemente tendría por objetivo, como bien señala Sesiano, la justificación que dicha procedencia otorgaría a esta ciencia14, o simplemente se argüiría por desconocimiento, basándose en la supo- sicióndequetodoaquelloqueteníaimplicacionesmatemáticasdebía provenirdeGrecia.Hayquedestacarqueestasreferenciasseencuen- tran en fuentes tardías y de escasa solvencia científica, como puede ser al-Qazw(cid:9)n(cid:9) (s. XIII), quien atribuye su invención a Arquímedes. Los bizantinos sí les dedicaron un cierto interés, pero esto ocurriría muyaprincipiosdelXIV,delamanodeManuelMoschopoulos,quien muestrapocaoriginalidadysutratadoparece,segúnlosestudiosmás recientes, derivar de algún antecedente árabe o persa, ya que los cua- drados que reproduce eran ya bien conocidos del mundo musulmán por lo menos desde el siglo XI15. 13 El cuadrado de orden 3 no es representativo ya que las 8 apariencias que puede mostrarsonelresultadodelas3rotacionesy4inversionesposiblesdeunmismocuadra- do,independientementedelmétododeconstrucciónempleado. 14 Sobre la mitología alrededor del origen de los cuadrados mágicos, ver Sesiano, Lescarrésmagiquesdanslespaysislamiques,8y266-268.Encuantoasuposiblecono- cimientoenGrecia,verVinel,N.,“Uncarrémagiquepythagoricien?Jambliqueprécur- seurdestémoinsarabo-byzantins”,ArchivefortheHistoryofExactSciences,59(2005), 545-562. 15 Sesiano,J.,“LescarrésmagiquesdeManuelMoschopoulos”,ArchivefortheHis- toryofExactSciences,53(1998),377-397. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 144 MERCÈCOMESYROSACOMES Aunque en la India aparecerán también durante el XIII, sin que se tengannoticiasanterioresalrespecto,cabedestacarquealrededordel sigloVII,PersiaimportarádelaIndiaeljuegodelajedrez,enelquese basalaconstrucciónprimitivadeloscuadrados.Sesianoapuntalapo- sibilidad de que éste fuera el lugar donde se originaran, basándose en elhechodequelosprimerosautoresdetratadosdelgéneroenlengua árabe y la mayoría de los posteriores eran de origen persa16. Desarrollo en el Oriente islámico Comoyahemosvisto,loscuadradosmágicossedesarrollaronbási- camente en los países del Oriente islámico donde, entre los siglos X yXVIII,autoresdetodotipodedicaronsuatenciónaestetema.Aunque setienennoticiasdetextossobrecuadradosmágicosdelsigloIX,nose ha conservado ninguno. En un texto árabe de (cid:14)(cid:6)bir b.(cid:13)ayy(cid:6)n (s. VIII) se describe el uso como amuleto de un cuadrado de orden 317, aunque parecequelatransmisióndataríadelsigloIXoX.Sinembargo,eltrata- do más antiguo sobre el tema que mencionan los biógrafos árabes se deberíaa(cid:20)(cid:6)bitb.Qurra,sabeode(cid:13)arr(cid:6)n(s.IX),aquienIbnAb(cid:9)U(cid:5)ay- bi‘a le atribuye el opúsculo titulado Ris(cid:4)la f(cid:2) ‘adad al-wafq18. Ahora bien, los primeros tratados de construcción de estos cuadrados que se han conservado datan del siglo X y en ellos se explican los distintos métodos para construir cuadrados de los tipos y órdenes más diversos. El tratado más antiguo es el de Ab(cid:4) l-Waf(cid:6)’ al-B(cid:4)z(cid:3)(cid:6)n(cid:9) (X)19. Medio siglo más tarde también dedicará su atención al género Ab(cid:4) ‘Al(cid:9) l-(cid:13)asan b. al-Hay(cid:19)am (Alhazen) (965-1040), cuyas descripciones nos han sido transmitidas por un tratado anónimo del siglo XII20. 16 Sesiano, J., “La science des carrés magiques en Iran”, en D.N. Pourjavady y (cid:21). Vesel(eds.),Sciences,techniquesetinstrumentsdanslemondeiranien(Xe-XIXesiècle), Teherán(2004),165-181,esp.167-8. 17 Ahrens, W., “Studien über die magischen Quadrate der Araber”, Der Islam, 7 (1917),186-250eidem,“MagischeQuadrateundPlanetenamulette”,Naturwissenschaf- tenWochenschrift,19(1920),465-475. 18 IbnAb(cid:9)U(cid:5)aybi‘a,‘Uy(cid:10)nal-anb(cid:4)’f(cid:2)(cid:17)abaq(cid:4)tal-a(cid:1)ibb(cid:4)’,Beirut,1957,2,193-201. 19 Sesiano,J.,“Letraitéd’Ab(cid:4)l-Waf(cid:6)’surlescarrésmagiques”,ZeitschriftfürGes- chichtederArabisch-IslamischenWissenschaften,12(1998),121-244. 20 Ms. Fatih 3439. Ver al respecto Sesiano, J., “Herstellungsverfahren magischer QuadrateausislamischerZeit(I)”,SudhoffsArchiv.ZeitschriftfürWissenschaftgeschich- te,64(1980),187-196,esp.187,n.º3. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 LOSCUADRADOSMÁGICOSMATEMÁTICOSENAL-ANDALUS.ELTRATADODEAZARQUIEL 145 LossiglosXIyXIIcorresponderánalaépocadeorodeloscuadra- dosmágicosenlospaísesmusulmanes.Enestemomento,sellegaráa lamayorsofisticaciónenladescripciónyvariedaddelosmétodosde construcción. Hasta entonces, la finalidad era predominantemente matemática,suestudiopertenecíaalateoríadelnúmero,almismoni- vel que el estudio de los números amigos. Sin embargo, a partir del XII el elemento mágico, que no tuvo un papel esencial en sus orí- genes, irá ganando importancia21. También,comohemosvisto,encontramoslaseriedesietecuadra- dos en las Ras(cid:4)’il de los Ijw(cid:6)n al-(cid:16)af(cid:6)’22. A partir de este momento destacaránunaseriedematemáticospersas,comoAb(cid:4)(cid:13)(cid:6)timMu(cid:22)af- far Asfiz(cid:6)r(cid:9), (cid:14)am(cid:6)l al-Zam(cid:6)n ‘Abd al-(cid:14)abb(cid:6)r Jaraq(cid:9), ambos de fina- lesdelXIprincipiosdelXIIoyaentradoelsigloXIII,‘Abdal-Wahh(cid:6)b b. Ibr(cid:6)h(cid:9)m Zan(cid:6)n(cid:9), que escribirán tratados al respecto, aportando in- novaciones de interés. Es en este momento cuando empieza a perder- se originalidad y, tal como ocurre en otros ámbitos de la ciencia, se desarrollan las compilaciones y encontramos tratados en otras zonas, como por ejemplo Egipto, donde Mu(cid:7)ammad Šabr(cid:6)mallis(cid:9) compuso un tratado, alrededor de 1600, en el que el autor discute otras figuras mágicas, como círculos con cuadrados inscritos, cuyo valor se inscri- bemásenelcampodelosamuletosqueenelmatemático23.Eltrata- do más tardío, estudiado también por Sesiano, es del sudanés Mu(cid:7)a- mmad al-Ful(cid:6)n(cid:9) l-Kišn(cid:6)w(cid:9), del XVIII24, quien vivió durante cierto tiempo en El Cairo, donde murió. 21 VeralrespectoSavage-Smith,E.,“MagicandIslam”,enF.MadisonyE.Sava- ge-Smith(eds.),Science,Tools&Magic,Londres-Oxford,1997. 22 EnmuchosmanuscritosdelasRas(cid:4)’ilfaltanalgunosdeloscuadrados.Porejem- plo,enelms.Árabe2304delaBibliotecaNacionaldeParís(antes1005),encontramos llenosloscuadradosdeorden3,4,5y6,mientrasquelosdeorden7,8y9aparecenva- cíos.VertraducciónparcialdeDieterici,F.,DiePropaedeuticderAraberinzehnteJahr- hundert,Berlín,1865.Sinembargo,laedicióndeElCairode1928presentalatotalidad deloscuadrados,lomismoquelaedicióndeBeirutsinfechaquesehautilizadoeneste artículo.VertambiénHermelink,H.,“DieältestenmagischenQuadratehöhererOrdnung undihreBildungsweise”,SudhoffsArchivfürGeschichtederMedizinundderNaturwis- senschaften,XLII,3(1958),199-217. 23 Sesiano,“ConstructionofMagicSquares”,1-20. 24 Idem,“Quelquesméthodesarabesdeconstructiondescarrésmagiquesimpairs”, BulletindelaSociétéVaudoisedesSciencesNaturelles,83(1994),51-76. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589 146 MERCÈCOMESYROSACOMES Desarrollo en el Occidente islámico. Al-Andalus y Norte de África Vista la panorámica general de la atención que se dedicó a estos cuadrados mágicos en el Oriente islámico, cabe centrarse ahora en lo que ocurrió en el Occidente musulmán, donde no despertaron, ni por asomo,elmismointerés,especialmentedesdeelpuntodevistamate- mático, dominante en Oriente. Hay que señalar únicamente dos casos destacables, el de Ab(cid:4) Is(cid:7)(cid:6)q al-Zarq(cid:6)lluh, nuestro Azarquiel, en al-Andalus, siglo XI, y el del argelino A(cid:7)mad al-B(cid:4)n(cid:9) a principios del XIII. Tenemos referencias varias a autores andalusíes que trataron el tema, directa o indirectamente, pero no se conserva su obra. Conoce- mos un cuadrado mágico, de orden 5, que aparece en un manuscrito de la Geografía de al-Zuhr(cid:9) (s. XII), aunque al parecer no habría for- mado parte del original, puesto que no se menciona en la edición de los demás manuscritos y el texto de la página anterior (69) continúa sininterrupciónenlapáginaposterior(71).Juntoalcuadradoaparece unabrevedescripciónsobreloscuadradosmágicos.Elcuadradocon- tienemuchoserrores,ademásdefaltarlelosnúmeros8,18y19,leso- bra el 26 y muestra el 13 y el 14 repetidos25. Por otra parte, no pode- mos descartar la posibilidad de que otro andalusí más tardío, el matemático Ya‘(cid:9)š b. Ibr(cid:6)h(cid:9)m al-Umaw(cid:9) al-Andalus(cid:9) (s. XIV), fuera también autor de un opúsculo sobre cuadrados mágicos. Después de dostratadosaritméticosdeesteautor,enunmanuscritoqueseconser- va en la British Library26 aparece un método de construcción de cua- drados mágicos de orden impar, sin atribución de autor, en el que se menciona a al-B(cid:4)n(cid:9)27. La tradición continuará también en el norte de África donde, ya entrado el siglo XV, encontramos a Na(cid:5)(cid:9)r al-D(cid:9)n Mu(cid:7)ammad b. Mu(cid:17) (cid:7)ammad b. Q(cid:4)qam(cid:6)z al-Buktumr(cid:9) al-Q(cid:6)hir(cid:9) al-(cid:13)anaf(cid:9), quien dedica 25 ManuscritoSM288delacoleccióndemanuscritosorientalesdelaHoughtonLi- brarydelaUniversidaddeHarvard.VerTolmacheva,M.,“Al-Zuhr(cid:9)’sGeographyinthe HoughtonCollection”,Al-Qan(cid:1)ara,VI(1985),507-516.Laposibleexplicaciónquedala autoradelartículorespectoalainclusióndelcuadradoesinadecuada,entreotrosmotivos porquelaconstantemágicadelcuadradode5es65yno70.Estecuadradoestásiendo estudiadoporlasautoras. 26 MS.StoweOr.10(OMPB7554). 27 Saidan,A.I.,“MagicSquaresinanArabicManuscript”,JournalfortheHistoryof ArabicScience,4(1980),87-89. Al-Qan(cid:1)ara(AQ) XXX1,enero-junio2009, pp.137-169 ISSN0211-3589

Description:
este cuadrado la encontramos ya, por ejemplo, en la antigua China. G×yat al-çakêm, más conocida por su nombre latino de Picatrix 47, donde se
See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.