Este era un universo de concentración regido por mujeres, habitado por mujeres.De un lado de las alambradas, las detenidas, vistiendo el infame uniforme de las deportadas, sometidas a un trabajo agotador, mal nutridas, golpeadas por los Kapos, mujeres también, atormentadas por las «Blockowas», pisoteadas, sirviendo de «Kaninchen» a los médicos-SS, perdidas en la miseria y la angustia, pero luchando ásperamente por no ser empujadas hacia el fondo de la «Lagerstrasse», allí donde se encontraban las cámaras de gas y el «Krematorium» con sus altas chimeneas eternamente humeantes...Del otro lado de las alambradas, las hembras del «Herrenvolk», puras arias, las «Führein» y las «Aufseherin» ostentaban un poder sin límites, dueñas absolutas de la vida y de la muerte. Asexuadas unas, lesbianas las otras, acomplejadas todas por las teorías nazis, daban libre curso a sus pasiones ocultas, se hundían en orgías inconcebibles...Una cruda historia, implacable como la misma realidad; un relato apasionante donde se han cambiado los nombres, un libro de dolor, de sufrimiento, de crueldad y de angustia de donde el amor no ha podido, sin embargo, ser desterrado.