ebook img

La Operación “Pianista del Burdel” - La gran fiscal de la Argentina K convertida en garante de la Mafia de los Contenedores PDF

261 Pages·2017·2.891 MB·Spanish
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview La Operación “Pianista del Burdel” - La gran fiscal de la Argentina K convertida en garante de la Mafia de los Contenedores

1 OPERACION "PIANISTA DEL BURDEL" PRIMERA PARTE/LIBRO AMARILLO PLAN AMBICIOSO, PERO NO IMPOSIBLE. Uno de los cerebros de la “mafia de los contendores”, tras ser detenido y encarcelado, aseguró en sede judicial que la movida involucraba a 9500 grandes cajas metálicas retenidas por distintos motivos en las terminales portuarias de Buenos Aires. Hizo un cálculo rápido. Si cada “lata” tenía mercadería por 1,2 ó 1,5 millones de dólares, el valor total de las telas, prendas confeccionadas, electrónica y chucherías para la venta callejera ascendía a una suma extravagante; oscilaba entre 12 mil y 14 mil millones de dólares. 2 Representaba un monto de dinero superior a la renta completa anual que el Estado Nacional les cobra a los productores de soja. Eran más dólares que los que el gobierno argentino dedica cada doce meses a solventar el déficit energético colosal que dejó el kirchnerismo. El Frente para la Victoria había convertido a la Aduana Nacional en un agujero negro, de la mano de Ricardo Echegaray. Los funcionarios que cobraban peajes en los muelles se volvìan ricos de la noche a la mañana. Los “corta-boletos” podían financiar sin problemas la política local en un abrir y cerrar de ojos. 3 El macrismo se tentó y envió a la estratégica Dirección General de Aduana a Juán José Gómez Centurión, un ex militar carapintada sin la menor expertise en la importación y exportación de mercaderías. Sus principales “virtudes” radicaban, en primera instancia, en que el hombre era capaz de asumir una dependencia y tabicarla por completo. Se había transformado en un acabado especialista en transformar a las sedes burocráticas en una suerte de cuartel gracias al temor generalizado y a las duras represalias que aplicaba contra quienes no se alineaban. Ya había demostrado su efectividad en la gran generadora de fondos turbios de la 4 política porteña: la Agencia General de Control. Su segundo gran mérito se basaba en una reconocida capacidad para “bancar la parada” y soportar las malas. Un libro que repasa la vida de los mejores 200 soldados de dos siglos de historia de nuestras Fuerzas Armadas le dedican una página completa ya que en la Guerra de Malvinas este ex mayor del Ejército se ganó la Cruz al mérito por su valentía en la acción. Demostró un gran arrojo para asistir a sus compañeros heridos en la decisiva batalla de Ganso Verde, en las cercanías de Puerto Argentino. Treinta años más tarde, también cubrió a sus superiores inmediatos y se hizo cargo 5 en buena medida del desastre de Iron Mountain, un galpón incendiado en el barrio de Barracas cuyo siniestro se llevó la vida diez bomberos y rescatistas. Esta empresa custodiaba importante documentación de empresas privadas pero nunca cumplimentó debidamente los planes de emergencia para evacuación del predio. Pese a ello, Iron Mountain siguió funcionando sin inconvenientes hasta el día de su colapso. A principios de 2016, las cartas estaban sobre la mesa de la DGA: la liberación de los 9.500 contenedores generaría un torrente de alegría para los agentes que se ocuparan de levantar las alarmas que retenían las cargas en el Canal Rojo. 6 Un héroe estaría a cargo de la gigantesca operación y eso acotaría las naturales suspicacias que se generarían en el ambiente JJGC debía ser capaz de desplazar y reemplazar a casi todos los agentes de control interno existentes para poner tropa propia. Los nuevos no iban a cuestionar su laxitud a la hora de pasar cientos de semáforos al color verde. Gómez Centurión se transformó, gracias a una resolución interna de Aduana que él mismo ordenó, en una suerte de Rey Midas. A partir de la llamada “578” todo lo que tocaba se convertía en oro ya que el mencionado número mágico permitía que 7 cada container que permanecía en calidad de rezago (por problemas de peso, contenido o papeles) pudiera ser recategorizado e ingresado sin demasiados inconvenientes al mercado argentino. Se les permitió a las flamantes autoridades aduaneras cambiarles a las “latas” su identificación, llamada B/L (Bill of lading), y tambièn modificar en las pantallas de control su puerto de partida. El sistema informático María, diseñado para ordenar nuestro comercio exterior, se volvió fácilmente vulnerable. La banda de delincuentes que funcionó a menos de cinco cuadras de la Casa Rosada modificaba en un santiamén el origen geográfico de los bienes adquiridos por 8 supuestos comerciantes locales y también la razón social de las firmas importadoras. En lugar de proteger las cargas que tenían en custodia, los integrantes de esta organización criminal aprovecharon sus privilegiadas posiciones dentro de la pirámide estatal para liberar los bienes a cambio de suculentas coimas. Según el “informante” privilegiado del titular de la DGA, un empresario con pésimos antecedentes judiciales y policiales llamado Carlos Oldemar Barreiro Laborda, se cobraban 125 mil dólares para hacer la vista gorda con las cajas que contenían productos de electrónica, cien mil por las que portaban textiles y una suma similar por las baratijas calificadas como “boludeces del Once”. 9 Sin embargo, como suele ocurrir en nuestro país, “el problema no es el robo, sino el reparto”. En su supuesto avance contra el crimen organizado, Gómez Centurión tocó intereses de ex agentes de inteligencia quienes se encargaron de demostrar que no había buenos y malos en la lucha desatada. Se habían plantado en el ring el Frankestein de Mauricio Macri contra el Drácula de los K y el Hombre Lobo de los ex Side. Nada bueno podía salir de semejante trifulca. Los topos de “La Casa” grabaron las conversaciones de la delictiva entente mixta de agentes estatales y “empresarios” 10

See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.