¿Qué posa cuando la voz de oro de un artista se transforma en un graznido? Bueno, un accidente lo tiene cualquiera. Se habla de la fatalidad, se cobra el seguro… y ya está. Pero cuando las voces de oro que se transforman en graznidos son tres, y los artistas dueños de esas voces pertenecen todos a la misma emisora de radio y TV, y las sumas que debe abonar la compañía de seguros corresponden al “calibre” de las fortunas, es casi seguro que alguien está haciendo trampas… calibre 45.