Interesados huéspedes en el yate del norte americano Mr. Shyler, la hermosa Lady Bull y su marido, Sir George, arriban al melancólico y negligente pueblo de Hearlsease-Sea. La opresión que sintieron al contemplar ese caserío quedó inesperadamente justificada. Sobre ellos se abatió la sombra indescifrable de un violento crimen. El aborrecido Paul Peter Charleson había sido asesinado. era difícil precisar la hora del hecho: el cadáver fué descubierto en una cámara de hielo y los ulteriores procesos de la muerte se habían detenido.