F e r n a LA GEOPOLÍTICA AMBIENTAL n d o E GLOBAL DEL SIGLO XXI n el debate ambiental Norte-Sur, históricamente el Sur –par- E s ticularmente Latinoamérica– ha sostenido una mirada so- t e Los desafíos para América Latina n cioambiental. Por ejemplo, frente al tema del agotamiento de s s los recursos naturales, como es el caso del agua, el Sur rechaza que o r o el problema sea el «exceso» de seres humanos. Por el contrario, el S problema es que su consumo está muy mal distribuido, y mientras . OTROS TÍTULOS PUBLICADOS los más pobres tienen serias dificultades para su acceso, los más POR ESTE SELLO L ricos la derrochan. A En este mismo sentido, para el Sur hay recursos y comida para G ¿Por qué los jóvenes chilenos alimentar saludablemente a todo el planeta pero, sin duda, si estos E rechazan la política? Desafección O recursos se utilizan con criterios especulativos, buscando el enrique- P Fernando política juvenil en el Chile O postransición cimiento de permanentes minorías, estos nunca alcanzarán para to- Estenssoro Saavedra L Juan Ignacio Venegas dos. Por lo tanto, si se enfrenta la crisis ambiental con criterios de Í Doctor en Estudios Americanos por la T verdadera justicia y equidad global, esta desaparecerá, incluido el I Universidad de Santiago de Chile; magís- C • problema del cambio climático. A ter en Ciencia Política por la Pontificia Universidad Católica de Chile; licenciado A Sin embargo, el Norte, más allá de su retórica políticamente co- en Historia por la Pontificia Universidad Chile y América Latina: democracias, M Católica de Chile; geógrafo (egresado) de ciudadanías y narrativas históricas rrecta, siempre ha actuado en función de su propio bienestar e inte- B la Universidad de Chile. Consuelo Figueroa reses. Por lo tanto, ante un agravamiento de la crisis ambiental du- IE Académico e investigador del Instituto N rante el presente siglo, el Norte global, en su carrera y competencia de Estudios Avanzados (IDEA), de la Uni- T • frenética por mantener y aumentar sus cuotas de poder así como A versidad de Santiago de Chile (USACH). L Especializado en pensamiento político, Desarrollos y subdesarrollos en los por asegurar su supervivencia, necesita de los recursos, la biodiver- G época moderna y contemporánea. En los territorios de Chile sidad y los ecosistemas latinoamericanos y viene por ellos. Sólo con L últimos años ha profundizado sobre la di- O Martín Arias Loyola mensión política y geopolítica del debate un accionar unitario en el escenario internacional, Latinoamérica B Francisco Vergara P. ambiental. podrá aumentar sus posibilidades de superar con éxito los aun más A Es autor de Historia del debate am- L • complejos escenarios geopolíticos ambientales que se aproximan. D biental en la política mundial. 1945-1992. La perspectiva latinoamericana (2014) y E L Medio ambiente e ideología. La discusión Gobernar: ¿arte o ciencia? Los pública en Chile, 1992-2002. Anteceden- problemas de la capacidad S I tes para una historia de las ideas políticas de gobierno G a inicios del siglo XXI (2009). L Marco Moreno Pérez O Ha coordinado y editado seis libros colectivos tanto en Chile como en Brasil. X Además tiene una gran cantidad de capí- X ISBN 978-956-01-0729-9 I tulos de libros y artículos en revistas cien- tíficas especializadas. Es integrante del grupo de trabajo de clacso, «Geopolítica, Integración y Siste- FERNANDO ESTENSSORO ma Mundial». La geopolítica ambiental global del siglo xxi Fernando Estenssoro Saavedra La geopolítica ambiental global del siglo xxi Los desafíos para América Latina 304.2 Estenssoro Saavedra, Fernando E La geopolÍtica ambiental global del siglo XXI: los desafíos para América Latina / Fernando Estenssoro Saavedra. – – Santiago : RIL editores, 2019. 232 p. ; 23 cm. ISBN: 978-956-01-0729-9 1 ecología política. 2 política ambiental. 3. análisis de impacto ambiental La geopolítica ambiental global del siglo xxi Primera edición: septiembre de 2019 © Fernando Estenssoro Saavedra, 2019 Registro de Propiedad Intelectual Nº 293.287 © RIL® editores, 2019 Sede Santiago: Los Leones 2258 cp 7511055 Providencia Santiago de Chile (56) 22 22 38 100 [email protected] • www.rileditores.com Sede Valparaíso: Cochrane 639, of. 92 cp 2361801 Valparaíso (56) 32 274 6203 [email protected] Sede España: [email protected] • Barcelona Composición e impresión: RIL® editores Diseño de portada: Matías González Pereira Impreso en Chile • Printed in Chile ISBN 978-956-01-0729-9 Derechos reservados. Índice Índice de siglas ........................................................................9 Introducción ..........................................................................11 I parte La crisis ambiental global, un problema político y geopolítico 1. La tensión norte-sur en el debate ambiental: el concepto de crisis ambiental .....................................19 2. La perspectiva ambiental del norte: eco-malthusianismo y geopolítica .................................27 3. La perspectiva ambiental del sur: socio-ambientalismo, ecodesarrollo y soberanía ........51 4. La gran negociación política norte-sur: el desarrollo sostenible y la cumbre de Río-92 ..........71 5. De Río-92 a Río-2012. De la ilusión al desengaño ........81 6. El ejemplo del cambio climático ....................................91 II parte La dimensión ambiental de la geopolítica del siglo xxi 7. El tema ambiental en la geopolítica del norte global desde Estocolmo-72 a la pos guerra fría ......107 8. El ascenso de China y su «ingreso» al norte ..............125 9. América Latina en el ojo del huracán geopolítico del siglo xxi ...............................135 10. El norte frente a la propuesta ecuatoriana yasuní - itt ..................................................171 11. La hegemonía del norte sobre el imaginario geoambiental ................................181 Reflexiones finales .............................................................201 Bibliografía ..........................................................................209 Índice de siglas AMLC América Latina y el Caribe BM Banco Mundial CCE Comisión de las Comunidades Europeas CAMLC Comisión de Desarrollo y Medio Ambiente de América latina y el Caribe CE Comisión Europea CDB Convenio Sobre la Diversidad Biológica CELAC Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños CEPAL Comisión Económica para América latina y el caribe CIA Central de Inteligencia Americana CLACSO Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales CMMD Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo CMNUCC Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COCHILCO Comisión Chilena del Cobre COP Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático DDT Dicloro Difenil Tricloroetano FCC Foro China-Celac FNGM Foro Para Una Nueva Gobernanza Mundial GSI Global Stevia Institute IPCC Panel Intergubernamental Sobre Cambio Climático PNUMA Programa de Naciones Unidas Para el Medio Ambiente ONU Organización de las Naciones Unidas ORPALC Oficina Regional para América Latina y el Caribe del PNUMA PMD Países Menos Desarrollados NSSM-200 National Security Study Memorandum 200 UE Unión Europea UNAM Universidad Autónoma de México UNASUR Unión de Naciones Suramericanas USSOUTHCOM United States Southern Command (Comando Sur del Departamento de Defensa de los Estados Unidos) 9 Introducción En la medida que se ha desarrollado la conciencia de que nuestro mundo, la Tierra, constituye un único y gran ecosistema, en donde una determinada acción o impacto de deterioro ambiental en un lugar del planeta puede repercutir en otro muy distante y/o sobre el conjunto de la biósfera, también ha crecido la importancia del tema ambiental en la agenda geopolítica mundial. Basta recordar, por ejemplo, en el problema del Cambio Climático, que según el cono- cido Informe Stern, este no solo afectará gravemente a la economía mundial, sino que además implicará la propia existencia para muchas sociedades actuales, siendo las más pobres las más amenazadas1. Al respecto, nunca debemos olvidar que el ser humano, como toda especie viva «actúa primariamente a base de una lógica instinti- va de mantenimiento y reproducción (supervivencia) como individuo y como especie. Y solo cuando ha alcanzado la satisfacción de sus necesidades básicas, puede plantearse otro tipo de actuaciones o consumos» (Sánchez, 1992: 42, 43). Además, para asegurar su su- pervivencia, se comporta de manera gregaria (lo que define nuestro carácter social y político), así como necesita del espacio geográfico, 1 En el 2006, el economista inglés Nicolás Stern entregó el informe Review on the Economics of Climate Change, respondiendo al estudio encargado por el Gobierno británico respecto del impacto económico que tendría el Cambio Climático. En él se advierte que este afectará a los elementos básicos de la vida humana, tales como el acceso al agua, la producción de alimentos, la sanidad y el medio ambiente, entre otros. Y si bien todos los países serán afectados, serán los más vulnerables, o sea los países y las poblaciones más pobres, los que sufrirán antes y más intensamente su impacto, pese a ser los que menos han contribuido a sus causas. Por otra parte, los costes globales y los riesgos del Cambio Climático implicarían una pérdida de un 5% a un 20% del PIB global anual. Pero si se actúa inmediatamente y de manera enérgica, reduciendo las emisiones de los GEI, esta pérdida se podría limitar a un 1% anual (Resumen informe Stern). 11 Fernando Estenssoro Saavedra entendido como el medio que le aporta los recursos necesarios para su existencia2. De aquí entonces, si el equilibrio ecosistémico y ambiental del espacio geográfico es clave para garantizar la vida y la seguridad de la Humanidad, y este equilibrio se ve amenazado por lo que se ha denominado la crisis ambiental global (se analiza en el capítulo siguiente), entonces las formas de uso y gestión de este espacio se transforman en un claro problema político, geográfico-político y estratégico. En este sentido, hoy en día se multiplican los análisis de poli- tólogos, sociólogos, geógrafos y otros cientistas sociales, que coin- ciden en señalar que, si hay un aspecto que será determinante en la geopolítica de este siglo XXI, será la problemática ambiental y/o ecológica. Por ejemplo, los españoles Nogué y Vicente plantean que la escasez de los recursos naturales, los riesgos ecológi- cos, la relación entre crecimiento económico y degradación ambiental, el miedo a una crisis medioambiental global, la capacidad de movilización social de la ecología, el cuestiona- miento por parte del medio ambiente de algunos aspectos de la soberanía de los estado-nación y el papel de los organismos internacionales, están llevando a la ambientalización de la geopolítica (Nogué y Vicente, 2001: 200). Por su parte, el canadiense Homer-Dixon señala que el «stress energético» a raíz de la crisis de producción del petróleo, unido al «stress ambiental», con problemas como la deforestación, la falta de agua y crecimiento demográfico, además del «stress del Cambio Climático», entre otras tensiones globales, se están transformando 2 Como bien plantea Joan Sánchez, siempre que estudiamos el medio físico lo hacemos desde el punto de vista de aquello que tiene interés para el ser humano. En este sentido, debemos entender por espacio geográfico, aquel espacio que actúa en primer lugar, como «el soporte de su vida cotidiana y de sus relaciones sociales, para, a continuación, obtener de él todos los recursos que necesita para su supervivencia, bien apropiándose de sus recursos, bien haciéndole intervenir como medio de producción. Sin olvidar que el espacio geográfico configura un ámbito global como un todo, y donde tiene efecto la interrelación con los otros individuos y grupos sociales. Es por ello, que, desde esta perspectiva, el individuo toma como punto de referencia el lugar en que se halla y desde el cual define las líneas maestras de actuación» (Sánchez, 1992: 47, 48) 12 Introducción en una amenaza catastrófica para el orden mundial (Homer-Dixon, 2006). Giddens, a su vez, ha escrito un texto para señalar que el tema del Cambio Climático estará en el centro de la geopolítica mundial de la primera mitad del siglo XXI (Giddens, 2010). Y, desde otra tradición epistemológica, los ingleses Taylor y Flint, concluyen que la problemática ecológica y ambiental lleva el conflicto geopolítico a un nivel cualitativamente distinto. Para ellos, en la actualidad existe la lógica de la ecología global que nos lleva a representarnos al planeta como el «hogar de la humanidad», y nos hace tomar conciencia de que estamos destruyendo este hogar «por nuestra cuenta y riesgo», y por lo tanto se enfatizará la demanda de su conservación dado que, finalmente, se trata de nuestra propia conservación (Taylor y Flint, 2002: 409). Sin embargo, agregan que también existen otras lógicas globales, como la lógica de la globalización financiera, que concibe al mundo «como un lugar, una plataforma abstracta para la acción en la que operan por ejemplo, el espacio financiero de veinticuatro horas al día de las ciudades mundiales» (Ibíd.). Así, mientras en una lógica nos preguntamos si el espacio geográfico es «sostenible», en la otra nos preguntamos si es «eficiente» (Ibíd.). De esta forma, en la geopolítica del mundo globalizado actual coexisten variables muy distintas como la preocupación por «la conservación de la biodi- versidad de las selvas tropicales» junto con «el mantenimiento de la competitividad de Londres» dentro del concierto de las ciudades mundiales (Ibíd.). Esta situación puede ser altamente confrontacional si se considera que el modelo de vida hegemónico impuesto por los EE.UU. y sus principales aliados del mundo capitalista desarrollado, se caracteriza, esquemáticamente, por el elevado nivel de consumo. Sin embargo, dada la gran cantidad de habitantes del planeta y sus proyecciones de crecimiento, no es posible que la Tierra sostenga ese estándar y estilo de vida para todos (o sea, si el consumo humano es llevado a unidades de energía, no hay suficiente energía en el planeta para que todos sus habitantes alcancen el nivel de consumo de un ciudadano estadounidense promedio). Por lo tanto, concluyen estos autores, «las tendencias actuales son insostenibles desde el punto de vista ecológico», por lo que «la crisis ecológica global es la tensión 13