LÉXICO DE ESTÉTICA La estética del romanticismo Traducción de Juan Díaz de Atauri Aun siendo una disciplina relativamente reciente, la estética hunde sus raíces en los orígenes de la cultura occidental. A la cultura griega debe su originario significado etimo lógico: aisthesis, sensación. Como todas las disciplinas, tiene un lenguaje con significa ción específica, aunque aparentemente no sea así. Esa supuesta no especificidad de su lenguaje pone al lector «ingenuo» en peligro de ser arrastrado a terrenos pantanosos, muy alejados del camino real. La colección Léxico de estética, dirigida por Remo Bodei, se compone de una serie de volúmenes, no muy extensos, escritos con lucidez y rigor, dirigidos a un público culto aunque no especializado. Los discintos textos, que tienen su propia fisonomía autónoma, por lo que se pueden considerar como monografías independientes, proponen la recons trucción por sectores del mapa de ese vasto territorio que ha recibido el nombre de «esté tica». La colección se articula en tres secciones: Palabras clave, El sistema de ¡as artes y Mo mentos de la historia de la estética. La primera aborda, desde una perspectiva teórica e his tórica, los conceptos fundamentales que utilizamos para comprender los fenómenos esté ticos o para valorar obras de arte, productos manufacturados o de la naturaleza (lo bello, el gusto, lo trágico, lo sublime, por ejemplo). La segunda está dedicada a la estética apli cada a los campos considerados mis importantes, como la pintura, la arquitectura, el cine y los objetos de la vida cotidiana. Finalmente la tercera examina la disciplina en su desa rrollo histórico, sobre la base de los distintos planteamientos teóricos específicos y de las prácticas artísticas concretas, desde el mundo antiguo hasta la Epoca Contemporánea. Fruto del trabajo de los principales especialistas en la materia, italianos y de otros países, todos los volúmenes, aun en la especificidad y diversidad de cada sección, autor y asunto de cada uno de ellos, tienen en común la amplitud de perspectiva y el lenguaje sencillo, una bibliografía comentada que orienta hacia otras lecturas más concretas y es pecializadas y, finalmente, sus dimensiones contenidas, aun cuando se ocupen de asuntos vastos y complejos. La colección se constituye de la siguiente forma: PRIMERA SECCION: PALABRAS TERCERA SECCION: MOMENTOS CLAVE DE LA HISTO RIA DE LA ESTETICA — La forma de lo bello — Estética clásica — Lo sublime — Estética medieval — Lo fantástico — Estética del Renacimiento — Lo cómico - Estética barroca — Trágico/tragedia — Estética del siglo XVI [I — El gusto — Estética romántica — El genio - Estética del siglo XIX — La imaginación — Estética del siglo XX SEGUNDA SECCION: EL SISTEMA DE LAS ARTES — Estética de la pintura — Estética de la arquitectura — Estética de la literatura — Estética de la música — Estética del cine — Estética de los objetos y de lo cotidiano — La estética, las artes y las técnicas Paolo D’Angelo La estética del romanticismo ¿"/fe. Visor La balsa de la Medusa, 97 Colección dirigida por Valeriano Bozal Léxico de estética Serie dirigida por Remo Bodei Título original: L’estética del romanticismo © by Societá editrice il Muíino, Bologna, 1997 © de la presente edición, Visor Dis., S.A., 1999 Tomás Bretón, 55, 28045 Madrid ISBN: 84-7774-597-8 Depósito legal: M-14.869-1999 Visor Fotocomposición Impreso en España - Printed in Spain Gráficas Rogar, S.A. Navalcarnero (Madrid) Indice Preámbulo ......................................................................................... 11 Introducción. Cronología y geografía de la estética romántica .... 13 I. El arte entre historia y absoluto........................................... 45 «La ciencia del arte es su historia».....................—.................. 45 Antiguo/Moderno, Ingenuo/Sentimental, Clásico/Román tico ............................................................................................... 52 El descubrimiento de la Edad Media y de Oriente.............. 69 «Cuanto más poético, más verdadero» ................................... 76 Imaginación estética e Inteligencia intuitiva......................... 84 «Gnoseología superior»............................................................. 95 El problema de la Nueva Mitología....................................... 102 Nihilismo romántico ................................................................. 110 II. Categorías estéticas.................................................................... 117 La superación del principio de imitación .............................. 117 La ironía.....................¿k......................................................123 El «Witz» y el fragmento........................................................... 135 Genio, gusto, imaginación ..... ......................................... 146 El arte como expresión............................................................... 155 Lo feo, lo característico, lo grotesco „.................................... 161 Lo sublime y lo maravilloso ...,.......:.................................. 167 Alegoría y símbolo .......................;¡.......................................... 173 III. Poética y crítica.......................................................................... 177 «Una novela es un libro romántico» ....................................... 177 El libro absoluto y la tragedia.................................................. 200 La crítica literaria..............................................................—..... 206 La obra de arte como organismo............................................ 213 9 El debate entre clásicos y románticos ..................................... 218 La polémica contra las reglas................................................... 227 Pintura y música como «artes románticas»............................ 232 La poesía popular y la historia de las artes ............................. 243 Bibliografía......................................................................................... 249 índice de nombres .........................................................>................. 265 10 Preámbulo Uno de los autores de quienes más se hablará a lo largo de este libro, Friedrich Schlegel, decía que un buen prefa cio debe constituir a un tiempo el cuadrado y la raíz cua drada del volumen al que precede. Mucho más trivialmen te, este preámbulo tan sólo pretende salir al paso de alguna crítica, presentar alguna sugerencia de lectura y saldar algu na deuda de agradecimiento. Las críticas que más fácil me resulta prever son las que me llegarán de los expertos, tanto de especialistas en filoso fía del romanticismo, como de estudiosos de las distintas li teraturas; sé bien que presento el flanco a muchos frentes críticos, y todos ellos con causa suficiente. Sólo les pediría a los especialistas que tuvieran en cuenta que el libro no ha sido escrito para ellos. Todo lo contrario, es un libro pensa do precisamente para quienes nada, o muy poco, saben del romanticismo y de su estética. Precisamente por ello no he tenido el menor temor en insistir en asuntos sobradamente conocidos por los expertos, en la esperanza de exponerlos lo mejor y más claramente posible. Ese mismo motivo me ha llevado a centrarme en los autores y en los problemas y a evitar cualquier análisis de las distintas hipótesis de inter pretación. Y también por ello, en las notas de cada capítu lo, el lector sólo encontrará referencias a una bibliografía primaria y no a ensayos críticos ni a estudios contemporá neos sobre el asunto. Esto no significa naturalmente que no 11 haya tenido en consideración tales estudios, ni que muchos de ellos hayan dejado de serme de gran ayuda; de tales tra bajos he intentado dar una referencia esencial en la biblio grafía que cierra el libro; pero debo advertir que, también ahí, he tenido en cuenta sobre todo las exigencias del lector corriente, y me he fijado fundamentalmente en los estudios accesibles en italiano, por lo que he dejado sin mencionar muchas obras en otras lenguas en las que, como asimismo es evidente, he aprendido mucho. Tanto los capítulos, como también los apartados que contienen, se pueden leer perfectamente por separado, como bloques discretos de información. De todas formas, a quien quiera valorar la interpretación que el libro ofrece, yo le rogaría que lo considerara en su totalidad, pues el trata miento procede por temas y problemas -no sigue el desa rrollo de las ideas de los autores en particular— y sólo puede obtenerse una idea, no diré que exhaustiva, pero sí menos pobre, de cualquiera de ellos si se presta atención al cuadro en su conjunto. He discutido el planteamiento general del libro y su ar ticulación con el profesor Valerio Verra, que leyó, además, una primera versión del mismo y me hizo al propósito su gerencias preciosas. También han leído la versión definitiva Michele Cometa y Federico Vercellone a quienes debo indi caciones importantes. A uno y a otros mi más vivo agrade cimiento. 12 y Introducción. Cronología geografía de la estética romántica En vano buscaremos un capítulo dedicado específica mente a la estética del romanticismo en las historias de la estética escritas en el siglo XIX, y lo mismo podríamos decir de la mayoría de las publicadas en el XX. Los autores de quienes nos ocuparemos más extensamente, los hermanos August Wil.hel.rn y Friedrich Schlegel, Novalis, Wackenro- der, de Alemania; Coleridge o Wordsworth, de Inglaterra, están tratados muy de prisa, a menudo nada más que refe- rencialmente. Otros pensadores, a quienes también dedica remos una atención semejante, Schelling o Soiger, por ejemplo, son objeto de un estudio más extenso en aquellas historias, pero no se les considera en el marco de la estética romántica, sino en tanto en cuanto representantes de la es tética del idealismo alemán. En realidad, durante mucho tiempo, se ha tendido a pensar que los teóricos del roman ticismo eran demasiado fragmentarios y rapsódicos, dema siado poco sistemáticos y demasiado poco inclinados a la profundización como para poder atribuirles una estética fi losófica. Se les ha venido considerado, más bien, como crí ticos e historiadores del arte, o como artistas ocupados en la reflexión sobre el propio trabajo, como autores, en últi mo término, de una poética, de una reflexión programática e inmediata sobre el quehacer artístico; mucho antes que como autores de una estética, de una teoría filosófica del 13