Fundamentos De Psicologia Politica

265 Pages·8.638 MB·Spanish

by  Reich Wilhelm

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ZARAGOZA
CARRERA DE ENFERMERÍA
ACADEMIA DE EXTENSIÓN UNIVERSITARIA Y DIFUSIÓN DE LA CULTURA
DIRECCIÓN DE PUBLICACIONES
Fundamentos de Psicología Política de
Wilhelm Reich
Erick Daniel Granados Monroy
Febrero del 2016
Universidad Nacional Autónoma de México
Facultad de Estudios Superiores Zaragoza
Datos para catalogación bibliográfica
Autor: Erick Daniel Granados Monroy
Fundamentos de Psicología Política de Wilhelm Reich
UNAM, FES Zaragoza, marzo de 2016.
Peso: 3,886 KB.
ISBN: 978-607-02-7840-2
Diseño de portada: Carlos Raziel Leaños Castillo.
Diseño y formación de interiores: Claudia Ahumada Ballesteros.
_____________________________________________________________________________
DERECHOS RESERVADOS
Queda prohibida la reproducción o transmisión total o parcial del texto o
las ilustraciones de la presente obra bajo cualesquiera formas, electrónicas
o mecánicas, incluyendo fotocopiado, almacenamiento en algún sistema
de recuperación de información, dispositivo de memoria digital o grabado
sin el consentimiento previo y por escrito del editor.
Fundamentos de psicología política de Wilhelm Reich
D.R. © Universidad Nacional Autónoma de México
Av. Universidad # 3000, Col. Universidad Nacional Autónoma de México, C.U.,
Delegación Coyoacán, C.P. 04510, México, D.F.
Facultad de Estudios Superiores Zaragoza
Av. Guelatao # 66, Col. Ejército de Oriente,
Delegación Iztapalapa, C.P. 09230, México, D.F.
Índice
AGRADECIMIENTOS ..................................................................................................... v
PRÓLOGO POR EL DR. JORGE VERAZA URTUZUÁSTEGUI ....................................... vii
INTRODUCCIÓN ........................................................................................................... 1
CAPÍTULO 1. FUNDAMENTOS DE PSICOLOGÍA POLÍTICA DE WILHELM REICH ........... 5
CAPÍTULO 2. ANÁLISIS CRÍTICO DEL TEXTO “SIGNIFICACIÓN CIENTÍFICA Y POLÍTICA 133
DE WILHELM REICH” DE JORGE VERAZA
CAPÍTULO 3. DIAGRAMAS Y NOTAS SOBRE “MATERIALISMO DIALÉCTICO Y 181
PSICOANÁLISIS”
CAPÍTULO 4. NOTAS SOBRE “PSICOLOGÍA DE MASAS DEL FASCISMO” ....................... 223
CONCLUSIONES GENERALES ........................................................................................ 245
ANEXOS ........................................................................................................................ 249

Agradecimientos
D
edicado:
A la Maestra Gabriela Trejo, por su apoyo, sus atenciones y orientaciones:
La única persona que me dio la oportunidad, la única académica que creyó en mí.
Nunca podré agradecerle lo suficiente por dejarme ser parte del proyecto FES.
A los preciados académicos: Dr. Omar Manjarrez, Dr. Marco Antonio González, y al Dr. José
Luís Díaz Meza, por su inestimable colaboración para los ajustes técnicos y conceptuales
de este texto: excelentes personas, valiosísimos docentes; las minorías valiosas que
afortunadamente sigue habiendo.
Al Dr. Jorge Veraza, por ser un dialogante riguroso, contrastante y crítico; gracias por
compartir y aportar.
A Perfecto Monroy Vargas, alguien especial, alguien que siempre confió, quiso y tuvo fe en
su servidor.
A Araceli Monroy, por su amor, comprensión y apoyo incondicional: Mi Madre.
A Itzel Granados, Ramsés Oswaldo, Stephanie Ayluardo, Guillermo Arellano, Tanya Yuridia,
Omar Viveros, Alex Monroy, Esteban Granados y Victoria Hernández, por su apoyo y afecto.
A Mario Granados y Estela Delgado, sin su apoyo, no hubiese podido continuar en la carretera.
A la Dra. Marina Reyes Sandoval, por sus atenciones, consideraciones, diálogo y amistad.
Finalmente pero no menos importante:
Agradezco todas las orientaciones, detalles y paciencia del Lic. Carlos Raziel Leaños y Claudia
Ahumada Ballesteros. Toda la parte formativa del presente texto es de ellos, son ellos.
Gracias.

Prólogo
por el Dr. Jorge Veraza Urtuzuástegui
En esa obra que hace época que es La psicología de las masas del fascismo, Wilhelm
Reich logró establecer rigurosamente el objeto teórico de la psicología social, entre las
varias hazañas teóricas que coronó durante sus poco más de sesenta años de vida (1897-
1957) y como una necesidad epistemológica intrínseca al desarrollo del resto de temas que
lo ocuparon, comenzando por la Función del orgasmo (1927) hasta la energía orgón y los
problemas del liderazgo involucrados en el Asesinato de Cristo (1954) etc.
La sociología se ocupa de las interacciones sociales y políticas, lo mismo que la ciencia
política; y las diversas ideologías son incumbencia de estas dos ciencias, lo mismo que de
la psicología social; que también investiga las interacciones sociales y políticas, etc. Por
donde mientras nos mantengamos evaluando a cada una de estas ciencias en referencia
a los diversos sectores empíricos que estudian, constataremos que sus ocupaciones se
traslapan y se confunde en el mismo objeto empírico; o en varios objetos empíricos, el
ejercicio del científico. En realidad, una ciencia se para sobre sus propios pies sólo cuando
logra establecer el objeto teórico del que se ocupa. Y en el caso de la psicología social, ha
sido Wilhelm Reich, como digo, quien logró tal hazaña.
¿Qué teníamos antes de él? Gustavo Le Bon en su Psicología de las multitudes, las considera
por oposición al individuo racional, irracionales y bestiales, animales; así que, en todo caso,
confunde su ocupación con la del etólogo. Su objeto animal es natural y el desempeño del
psicólogo de multitudes puede perfectamente prescindir de la ética en el tratamiento de
esas bestias. En verdad, lo mejor de Le Bon son sus descripciones del comportamiento de
masas pero no su reflexión teórica sobre las mismas, e, incluso, sus descripciones se cargan
en demasía hacia el terror romántico ante la bestia.
Wilhelm Wundt se sitúa de lleno en un ámbito humano -y, entonces, ético- cuando postula
el estudio de la psicología de los pueblos, su Völkerpsicologie, heredera de la reflexión de
la filosofía de la historia hegeliana sobre el Völkergeist (espíritu de los pueblos). Pero el
traslado de la especulación hegeliana al terreno de los hechos, si bien es sugerente, revela
inmediatamente una limitación al ejercicio de la razón. Pues el comportamiento sui generis
viii Fundamentos de Psicología Política de Wilhelm Reich
de un pueblo frente a otros y la misión que de acuerdo a tal comportamiento e ideosincracia
le corresponde, no reciben como contestación más que el así es; el cual detiene las razones;
mientras que en Hegel, por lo menos, este fingía dar razones al remitir dicho comportamiento
a las leyes del sistema especulativo, como el que el progreso de la humanidad va de Oriente
a Occidente y, por ello, los asiáticos no pueden tener un comportamiento libre como los
griegos y estos no pueden llegar al individualismo de los pueblos germánicos, base que son
de la modernidad europea. Así que la ciencia se desarrolla en Wundt como casuística de
los diversos pueblos humanos y, a lo más, se dedica al establecimiento de razones parciales
que dan cuenta de algunos rasgos de carácter. Pero el Völkergeist en cuanto tal es un ente
misterioso, un irracional impenetrable y, a lo más, coleccionable con curiosidad y simpatía a
la manera de la Völkerpsicologie.
Otra cosa es lo que tenemos con Freud, quien promueve un auténtico desarrollo científico
en este terreno; precisamente, en discusión con las observaciones y descripciones de Le
Bon. Las masas, asumirá, sí son irracionales, tal y como las describe Le Bon pero no animales
sino perfectamente humanas; tal y como lo es el comportamiento racional del individuo.
Mismo que de continuo actúa irracionalmente también; pues no es exclusivo de las masas
el actuar irracional, como cree Le Bon confundido en la observación empírica. Freud dice
reconocer en las descripciones de Le Bon lo que él ha descubierto en la observación clínica
de sus pacientes: que sus conductas voluntarias responden a motivaciones inconscientes; y
que la lógica del inconsciente-objeto teórico que debido a la represión sexual, se patentiza
sólo parcialmente en los lapsus o en el sueño- permite explicarlas racionalmente lo mismo
que la conducta neurótica de sus pacientes. He aquí un desarrollo científico y de una ciencia
humana puesta en terreno humano, al tiempo de correlacionarla con un objeto teórico -y no
con uno empírico- que la distingue rigurosamente y permite explicar racionalmente lo que de
otro modo sólo podría ser testificado como dato paradójico y misterioso en su singularidad.
Tal es la propuesta o hipótesis de Freud; aunque de ninguna manera demostrada en todos
sus pasos. (Así, por ejemplo, la ética del psicólogo social no es tematizada por Freud; al
revés de la del psicoanalista ocupado en hacer consciente lo que era inconsciente, lo que
constituye una labor terapéutica liberadora). Para ello deberá aportar lo propio Reich,
basándose en Freud y yendo más allá de él.
De ahí la muy pertinente exposición del pensamiento de Wilhelm Reich que nos ofrece
Erick Daniel Granados Monroy, precisamente, con vistas a promover en México el análisis
científico de las realidades psicosociales en el ámbito médico, educativo, político, social,
Prólogo ix
institucional o cultural, etc. Téngase en cuenta que el libro de divulgación de la obra de Reich
escrito por Constantin Sinelnikoff, La Obra de Wilhelm Reich (1970) (publicado en castellano
por la editorial Siglo XXI) hace tiempo que está agotado y se ha convertido en una rareza
bibliográfica.
Para concluir, revisemos el aludido trazo epistemológico de Reich, pues servirá para
introducir e invitar a la lectura de las páginas siguientes en las que Erick Daniel Granados
(EDG) explica con detalle las teorías reicheanas.
En 1933 Reich aplica a una experiencia concreta -la de la Alemania nazi y, en particular,
la del ascenso de Hitler al poder mediante el voto popular- las hipótesis generales de
Freud formuladas en su Psicología de las masas y análisis del yo de 1920. Pero este gran
aporte científico –que vuelve manejables las ideas freudianas y aptas para su aplicación
a cualquier realidad social, con las salvedades de cada caso, por supuesto, involucra, para
lograrse, otros aportes.
En efecto, obliga a profundizar la labor sociológica en vista de considerar en serio las
determinaciones sociales de las familias alemanas, su estructura, economía y formas de
poder; así como el modo en que se ejerce la represión sexual en su interior como forma de
control político en vista de garantizar la reproducción económica del organismo familiar.
Y así mismo correlacionar las diversas formas de familia del contexto alemán hasta lograr
establecer cuál es la dominante y por qué. En el entendido de que la psicología de las masas
depende de la de cada uno de sus integrantes; y que la psique de estos se ha formado en
el seno de familias determinadas que se encargaron de conformar la sexualidad infantil de
dichos individuos, base material e interactiva de su mentalidad.
Además, obliga profundizar el análisis económico de la sociedad alemana en dirección a
establecer el modo en que se relacionan sus diversas clases sociales y las diversas formas
de familia, hasta dar -por este camino- con aquella forma de familia que domina sobre el
resto y cuya moral se redimensiona como la moral social dominante. Todas cuestiones que
Freud apenas si barrunta y a lo más implica, pensando que debería ser hecho. Pero sólo
Reich es quien en verdad lo volvió realidad científica.
Y lo más importante, es obligado establecer con precisión la forma de conciencia de las
diversas clases sociales en acuerdo a sus intereses económicos y políticos. Labor científica