SECCIÓN DE OBRAS DE FILOSOFÍA FILOSOFÍA DE LAS CIENCIAS 2 Traducción JOSÉ MARÍA ÍMAZ GISPERT y MARIANO SÁNCHEZ-VENTURA Revisión de la traducción JOSÉ MARÍA ÍMAZ GISPERT 3 DANIEL ANDLER, ANNE FAGOT-LARGEAULT Y BERTRAND SAINT-SERNIN 4 Filosofía de las ciencias 5 Primera edición en francés, 2002 Primera edición en español, 2011 Primera edición electrónica, 2014 Título original: Philosophie des sciences (I y II) © Editions Gallimard, 2002 D. R. © 2011, Fondo de Cultura Económica Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 México, D. F. Empresa certificada ISO 9001:2008 Comentarios: [email protected] Tel. (55) 5227-4672 Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra, sea cual fuere el medio. Todos los contenidos que se incluyen tales como características tipográficas y de diagramación, textos, gráficos, logotipos, iconos, imágenes, etc., son propiedad exclusiva del Fondo de Cultura Económica y están protegidos por las leyes mexicanas e internacionales del copyright o derecho de autor. ISBN 978-607-16-2762-9 (mobi) Hecho en México - Made in Mexico 6 SUMARIO Introducción Primera Parte GNOSEOLOGÍA I. Las filosofías de la naturaleza II. La construcción intersubjetiva de la objetividad científica III. Procesos cognitivos Segunda Parte ÓRDENES DE LA NATURALEZA IV. El orden fisicoquímico V. El orden de los seres vivos VI. El orden humano Tercera Parte CONCEPTOS TRANSVERSALES VII. La causalidad VIII. La emergencia IX. La forma Conclusión Agradecimientos Bibliografía Índice onomástico 7 Índice analítico Índice general 8 INTRODUCCIÓN I. UN VISTAZO RÁPIDO A LA FILOSOFÍA DE LAS CIENCIAS DEL SIGLO XX ¿Qué es la filosofía de las ciencias en la actualidad? ¿Cómo y por qué practicar esta disciplina en los albores del siglo XXI? Estas preguntas se encuentran en el origen de la presente obra. Para ubicar el ánimo que preside a esta empresa, empecemos por arriesgar una mirada retrospectiva (e inevitablemente simplificadora, ¡que el lector nos perdone!) sobre la filosofía de las ciencias en el siglo XX. A nuestro parecer, ésta ha pasado por cuatro épocas. 1. El primer tercio de la centuria se ocupó en interiorizar los cambios mayores que se produjeron en las ciencias: la creación, durante el siglo pasado y por Cantor, de la teoría de conjuntos; el fin del reino exclusivo de la mecánica clásica; la unificación del magnetismo, la electricidad y la luz en el marco de una teoría de los campos totalmente matemática; la aparición de la mecánica estadística; el descubrimiento de los quanta por Planck; el triunfo del atomismo sobre el energetismo; el progreso de la química de síntesis; la formulación de las teorías de la relatividad, primero restringida (1905), luego general (1915), por Einstein; el redescubrimiento de las leyes hereditarias de Mendel (1900); el interés que suscita entre los filósofos la idea de la evolución (Peirce, Bergson) y, después, de manera más lenta, la del inconsciente; la formación, a partir de 1923, de la física cuántica; el nacimiento de una cosmología científica (1922-1929), etc. La física matemática les sirve a los filósofos de las ciencias como referencia mayor. El advenimiento de la lógica moderna (Peirce, Frege, Russell y Whitehead) y los primeros logros del “programa de Hilbert” para fundar las matemáticas refuerzan su fe en la unidad de la ciencia. Es una época fecunda, marcada por las obras de Bergson, Husserl, Mach, Duhem, Durkheim, Dilthey, Simmel, Russell, Whitehead, Meyerson, Brunschvicg y muchos más. 2. Hacia mediados de 1920 se inicia otro periodo, el cual incluye la segunda Guerra Mundial y llega hasta principios de la década de los sesenta: la mecánica cuántica, al dar lugar a grandes debates de interpretación (Einstein y Bohr), cobra la faz que todavía tiene en nuestros días; la física se instala en el centro de los grandes programas industriales, tanto civiles como militares; la programación matemática y la teoría de juegos se introducen en la economía. Se tiene una conciencia más firme del poder político que la ciencia y la tecnología aportan a los Estados: la ciencia no se conforma ya al modelo griego de la theoría; se transforma, de acuerdo con la expresión de Husserl, en un conjunto de “técnicas teóricas”. En la Sorbona, a partir de 1955, Georges Canguilhem y 9 Raymond Aron inician un análisis riguroso de este fenómeno, y Francia, al mismo tiempo y a semejanza del resto de los grandes países desarrollados, se dota de instituciones para la política científica. En filosofía, desde finales de los años veinte, surge una discrepancia: la fenomenología que, con Husserl, se inclinaba hacia la filosofía de las ciencias, se aleja de éstas; en cambio, un grupo de pensadores provenientes de áreas diversas pero animados por una voluntad común de construir una “filosofía científica”, es decir, no metafísica ni centrada en el sujeto (a diferencia de la fenomenología de Husserl), trabaja bajo el patrocinio de Mach. En 1929, este “círculo” publica un manifiesto titulado La concepción científica del mundo. Los vínculos entre la Sociedad Ernst Mach de Viena (Schlick, Neurath, Carnap...) y la Sociedad de Filosofía Empírica de Berlín (Reichenbach, Hempel, Richard von Mises...) se estrechan; en septiembre de 1934, en el Congreso Internacional de Filosofía de Praga, se dio “ante una muy numerosa comunidad filosófica, la primera aparición del Círculo de Viena en tanto que grupo constituido” (Cavaillès). Los polacos (Tarski...) participan en la empresa. Muy pronto, sin embargo, el arribo de Hitler al poder manda a esta extraordinaria constelación de pensadores al exilio, mientras que la Academia de las Ciencias de Berlín, con las leyes sobre los judíos, pierde la tercera parte de sus miembros. En 1935, los integrantes del grupo forman en París el proyecto editorial de la Enciclopedia de las ciencias unificadas, y la mayoría de ellos emigran a los Estados Unidos. Lejos de apagar esta llama, el destierro la propaga por todo el mundo, en particular en los países angloparlantes que, desde California hasta Nueva Zelanda, encuentran o crean cátedras universitarias para dar acogida a los fugitivos. Asimismo, su concepción de la filosofía de las ciencias adquiere su extensión plena a partir de los años cuarenta, gracias de modo conspicuo a la revista Erkenntnis, a la Enciclopedia de las ciencias unificadas —cuyo centro se encuentra en Chicago—, e incluso a la traducción tardía (en 1959 al inglés y... en 1973 al francés) del libro maestro de Popper, La lógica del descubrimiento científico, cuya publicación en Viena desde 1934 había pasado ampliamente inadvertida a causa de la situación política (en Francia, Gaston Bachelard había dado noticia de ella en 1936, así como de la obra de Reichenbach que la Sociedad Francesa de Filosofía acogió en 1937). El tratado monumental de Ernest Nagel, La estructura de la ciencia, de 1961 (nunca vertido al francés); la no menos importante obra (tampoco traducida) La explicación científica de Carl Hempel; y en 1966, el pequeño manual de éste, Filosofía de la ciencia natural, traducido en 1972 bajo el título de Éléments d’épistémologie, dan una representación notable de esta filosofía de las ciencias, cuyo centro de gravedad se ubica a partir de entonces en los Estados Unidos. 3. La publicación, en 1962 y dentro de la colección de la Enciclopedia de las ciencias unificadas, de La estructura de las revoluciones científicas, de Kuhn, ejemplifica el inicio del tercer periodo, de alrededor de 20 años, donde la política y la sociología de las ciencias adquieren sus títulos nobiliarios y los diversos epistemes (Foucault) se estudian como figuras de la cultura. Esta época, marcada hacia 1968 por la efervescencia de las universidades estadunidenses y europeas, se caracteriza por una 10