Description:Pero ahora ya estaba hecho. Era uno más. Un nuevo mundo del Cinturón-Conquest.Cinturón-Conquest había parecido siempre un proyecto de locos, una obra que sólo podía existir en el cerebro de un puñado de dementes, en un momento de delirio de grandeza totalmente imposible.Eso había sido antes, mucho antes. Quizá trescientos años antes. Quizá más. Había llevado casi cuatro siglos hacerlo realidad. Y ahora lo era. Era realidad.Claro que el Cinturón-Conquest era una especie de goma capaz de estirarse, de ampliar su cerco llegando más y más lejos. Pero, de momento, aquél era el punto máximo.Victor Krawok lo anotó, con un suspiro, en el enorme mapa mural representando la inmensidad celeste. Desde el lugar señalado sobre el vidrio multicolor, de fondo azul, iluminado por detrás, trazó dos coordenadas hasta sus correspondientes puntos de longitud y latitud. Todo eso dio una situación concreta en el tablero mágico del orientador magnético del mapa: Alfa-Seis