La nave llevaba muchos siglos vagante por el Cosmos. Era una nave inmensa, una metrópolis de metal y fuego en la que nacieron, sufrieron y murieron muchas generaciones. Perdido el recuerdo del lejano origen y del gran Objetivo, sólo unos extraños Cuadros Simbólicos que representaban ríos, nubes, mares y montañas, recordaban algo fabulosos y mítico que un día se llamó Tierra. Pero de la nave pasamos al desolado mundo de Marte donde los Seis buscan al Siete, como único medio de perpetuar una raza agonizante en la unión de siete sexos. Visitamos la Tierra el día que llegan los Educadores para llevar a la Humanidad - por fin - hacia insospechadas cumbres de sabiduría. Pero otros visitantes no fueron tan afortunados, como los que descubrió el pequeño Jhonny, aunque le aportaron el presente del Amor…, estremecidos, asistimos a la función representada por espectros mentales, que terminan por volverse de carne y hueso y mezclarse entre los humanos. He aquí algunos de los temas extraordinarios que baraja Clifford D. Simak en esta fascinante obra, que cautiva ininterrumpidamente la trémula atención del lector.