ebook img

el sáhara occidental en la bibliografía española y el discurso colonial PDF

826 Pages·2014·3.68 MB·Spanish
by  
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview el sáhara occidental en la bibliografía española y el discurso colonial

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BARCELONA Departamento de Historia Moderna y Contemporánea EL SÁHARA OCCIDENTAL EN LA BIBLIOGRAFÍA ESPAÑOLA Y EL DISCURSO COLONIAL Tesis doctoral de Pablo-Ignacio de Dalmases y de Olabarría Directores: Dr. Joan B. Culla y Dr. Larosi Haidar 1 Barcelona, 2012-2013 2 INTRODUCCIÓN La elección de tema como eje central de una investigación puede tener diferentes orígenes. En algunos casos, es fruto de la orientación recibida de quien dirige o tutoriza al estudioso, a veces es resultado del hallazgo de ciertos indicios que suscitan su curiosidad o, simplemente, puede ser fruto de los intereses personales del investigador e incluso de su peripecia vital. El doctorando que suscribe vivió de forma directa y por razones profesionales la última etapa de la presencia española en el Sáhara Occidental. Tuvo, por tanto, ocasión de conocer los distintos lenguajes empleados por las partes implicadas en el conflicto y reunió una no despreciable documentación sobre aquella singular situación histórica. Este ha sido el punto de partida de su interés por profundizar en la bibliografía que se ha venido publicando en España sobre este tema, en la inteligencia de que en ella se encuentran las claves para interpretar las razones históricas del interés de España por África occidental, la forma en que se desarrolló su lento asentamiento, la competencia entablada con otras potencias europeas a la hora del reparto colonial, la política mantenida por los sucesivos gobiernos españoles, las peculiaridades de la colonización económica y humana del territorio y los conflictos habidos en el mismo; en definitiva, para conocer cuáles fueron los argumentos que justificaron en cada momento la presencia colonial de España en la zona. 1.- Las preguntas del historiador 3 Antoine Prost recuerda a los historiadores que “sin hechos no hay historia, como no la hay sin preguntas1”. Un buen punto de partida para cualquier trabajo de investigación historiográfica será, por tanto, establecer desde el principio los interrogantes a los que deseamos hallar respuesta. Llevando este principio a nuestro proyecto de investigación, hemos de reconocer que no fueron una, ni dos las preguntas con que tratamos de justificar nuestra tarea, sino muchas más y entre ellas: -¿cuáles fueron los antecedentes remotos del interés de los reinos españoles –Castilla, Aragón…- por África occidental? -¿existió en España a lo largo del siglo XIX un verdadero discurso africanista? En caso afirmativo, ¿lo fue por iniciativa autóctona o como reacción mimética al surgido en otros países? ¿Tuvo intencionalidad expansionista o fue eminentemente científico? ¿Quedó circunscrito a ciertas elites cultivadas o fue compartido con mayor o menor amplitud por la opinión pública? ¿Cuál fue su manifestación concreta con respecto al Sáhara occidental? ¿Tuvo este movimiento una expresión bibliográfica importante o fue residual? -¿cuáles fueron los presupuestos mentales del africanismo español: morales y humanistas (acción civilizadora), políticos (prestigio internacional, laminamiento del expansionismo galo), militares (defensa del archipiélago canario), económicos (nuevas fuentes de riqueza, si las hubiere, hipótesis sobre posible afincamiento de colonos, apertura de nuevas vías comerciales transaharianas), sociales (expansión de la cultura hispana), humanistas (misión civilizadora) y, en su caso, incluso religiosos. -en el reparto colonial España tuvo que pactar los límites de sus zonas de influencia; en lo que respecta a África occidental y ecuatorial, con Francia. ¿Cuál es el discurso que se desprende en la historiografía clásica española sobre la forma en que se desarrollaron las negociaciones y los acuerdos a que se llegaron? ¿Generaron éstos un discurso satisfactorio o dieron lugar a un sentimiento irredentista? -España vivió durante el siglo XX tres regímenes políticos diferentes ¿supuso cada uno un 1 Prost, Antoine, Doce lecciones sobre la historia, Cátedra, Madrid, 2001, pp. 90 y sigs. - 4 - 4 lenguaje diferente del hecho colonial, particularmente en lo que respecta al Sáhara occidental? ¿Tuvo el Sáhara algún papel de cierto interés en el contexto general de la política española? -¿cómo dio respuesta España al discurso universal de la descolonización surgido tras la segunda guerra mundial, discurso que las Naciones Unidas empezaron a aplicar de forma inexorable? ¿Hubo un doble discurso español hacia el interior y hacia el exterior? La provincialización de 1958 ¿constituyó un acierto o error? ¿Fue una mera fase en el proceso de emancipación o la excusa adecuada para la continuidad indefinida? ¿Resultó válida jurídicamente desde el punto de vista español o constituyó una pura ficción legal, como se ha pretendido después? -¿cómo se ha justificado en cada momento el título jurídico que ha avalado la legitimidad de la presencia de España en África occidental? ¿Se ha argumentado siempre con el mismo título o ha variado éste de acuerdo con las circunstancias? ¿Protectorado? ¿Soberanía plena? ¿Administración fiduciaria o colonial? -¿en qué medida la intromisión de los países vecinos o las interferencias internacionales han condicionado la evolución histórica del Sáhara? -¿cómo han visto a los saharauis los españoles de las diferentes generaciones? ¿Cómo salvajes ingobernables y enemigos del cristiano para los primeros viajeros, rapaces y vagos para los colonizadores pioneros, fieles soldados para los nacionales durante la guerra civil, gente de dudosa fidelidad durante la guerra de 1957-58, españoles de pleno derecho durante la etapa provincial, nacionalistas, revolucionarios desagradecidos, nostálgicos del pasado, soñadores de un país libre que trata en hacerse realidad? -¿qué tipo de relaciones estableció la metrópoli con la población autóctona? ¿Se produjo, como consecuencia del hecho colonial, alguna interacción cultural y social? -¿cuál fue el discurso de los diferentes sectores de la vida española frente a la descolonización del Sáhara occidental y cuál el habido tras la frustración histórica de este 5 proceso? ¿Existe coherencia entre lo que manifestaban cada uno de estos sectores en una y otra coyuntura o se aprecian sensibles contradicciones? -la frustrada descolonización del Sáhara occidental ¿ha dado lugar a un discurso novedoso o ha reincidido en el discurso y en los tópicos anteriores? -¿ha sido el Sáhara fuente de inspiración para la creación literaria de los autores españoles? En caso afirmativo ¿qué discurso se desprende de su obra? He aquí un amplio abanico de interrogantes capaces de motivar al historiador en su tarea y de orientarle en la búsqueda de las fuentes capaces de darle las claves para hallar las respuestas apropiadas. 2.- Perfiles de la investigación El propósito de estudiar una realidad denominada Sáhara occidental o Sáhara español comporta algunas cuestiones que no son precisamente baladíes y que conviene esclarecer desde el principio para evitar tanto la excesiva concreción, que desvirtuaría el objetivo a analizar, como la desmedida dispersión, que lo diluiría en una realidad excesivamente amplia. La primera puntualización que cabe hacer es de carácter conceptual. Nuestro trabajo gira en torno a la bibliografía española y al discurso o discursos que contiene, pero para ello hemos considerado necesario realizar una evaluación previa de los estudios bibliográficos disponibles, lo que nos llevará a descubrir, no sin sorpresa como veremos en el capítulo siguiente, que los primeros y más concienzudos estudios referidos a los territorios españoles, no fueron realizados por connacionales sino, en el pasado, por autores franceses y los más recientes y ambiciosos, por norteamericanos, sin que ello impida la existencia de algún otro de origen local y valor sin duda muy estimable. La segunda precisión se refiere a la delimitación geográfica del territorio objeto de nuestro estudio. El Sáhara occidental que fue español forma parte de una realidad espacial y humana mucho más amplia que se conoce como trab el bidán y que Laiglesia ha explicado muy convincentemente: “Existe en el oeste del Gran Desierto del Sáhara un amplio territorio que constituye una unidad geográfica, cultural, religiosa, lingüística y humana. Está habitado por nómadas y seminómadas en su casi totalidad. Esta circunstancia, unida a los azares de la historia, ha hecho que hoy se 6 encuentre troceado y dividido entre los países más o menos artificiales que lo rodean y a veces integran. Este territorio es el país de los “moros”, la Trab al Bidan, como ellos mismos la llaman; esta expresión quiere decir en hassaniya (el dialecto árabe que hablan todos los habitantes de este territorio), la “tierra de los blancos”; como se ve, no es en realidad un nombre propio; es un nombre descriptivo que utilizan los moros (ante sí mismos, los “blancos” por antonomasia) para designar a su país. El nomadismo de sus habitantes no ha permitido nunca la instauración de instituciones políticas auténticas, pero la comunidad religiosa, cultural, lingüística, geográfica y – hasta cierto punto- racial de éstos ha hecho que se sientan todos (con una reciente y notable excepción: los habitantes del antiguo Sáhara español, conocidos como “saharauis”) miembros de un mismo país, un país sin estado constituido, sin fronteras legalmente delimitadas, pero real en la mente y el corazón de sus habitantes, un país del que están profundamente enamorados y que es para ellos el más hermoso del mundo. La Trab al Bidan (trab es femenino en hassaniya, contrariamente al árabe literal) tiene unos límites geográficos bastante claros y precisos. Son los siguientes: -al norte, el Uad Draa desde donde deja de ser subterráneo hasta su desembocadura, y más al este, la línea Tinfusi-Gemilas-Hasi Bu Bernús; -al oeste, el océano Atlántico; -al sur, el río Senegal hacia Kaihedi, y más al este la línea Kaihedi-Artemu-norte de Yelimane-norte de Nioro del Sahel-norte de Balle-norte de Nara-Nampala-Lere-límite norte de la zona de inundación del río Níger hasta Timbuctú; -al este, la línea que parte de Timbuctú hacia el norte, bordea por el oeste las estribaciones del Yebel Timetrin y continúa hacia Hasi Bu Bernús …debe entenderse que todos estos límites y consideraciones geográficas son las históricas y las tradicionales; en los últimos tiempos, sobre todo desde las independencias de los países africanos, se han producido movimientos de población que alteran este esquema (aunque no en lo esencial)”2. Paralelamente, el antiguo Sáhara español fue un territorio que, como consecuencia del reparto colonial, tuvo cierta complejidad jurídica: estuvo formado inicialmente por una zona comprendida entre los cabos Bojador y Blanco, sobre la que Cánovas declaró el protectorado, aunque se la reconoció internacionalmente como colonia; a ella se sumó, en virtud de lo acordado con Francia, otra zona de pleno dominio entre el cabo Bojador y el paralelo 27º 40’ y más tarde, una tercera, ésta como zona sur del Protectorado de España en Marruecos, entre dicha línea astronómica y el río Draa. A mayor abundamiento y durante varias décadas, el Sáhara español formó una entidad político- administrativa denominada “África Occidental Española” con el enclave de Ifni, del que estaba separado por discontinuidad geográfica y fue gobernado desde Sidi Ifni e incluso, durante un período no breve, permaneció bajo la suprema y muy lejana jurisdicción del alto comisario de España en Marruecos. Todas estas puntualizaciones territoriales, de las que en su momento hablaremos mucho más pormenorizadamente, vienen a cuento porque buena parte de la bibliografía 2 Laiglesia, Antonio Carlos de, Breve estudio de las tribus moras de Mauritania, Instituto Hispano-Árabe de Cultura, Madrid, 1985, p. 89. 7 es común a varios de los territorios citados y, en todo caso, la peripecia histórica que ha sufrido el Sáhara español no puede sustraerse en mayor o menor medida a tales vecindades. Una tercera puntualización es la de carácter temporal. Nuestro estudio tiene como objeto principal los dos últimos siglos, XIX y XX, desde la aparición en España del movimiento africanista, que dio lugar a las primeras expediciones y ocupaciones coloniales en el continente africano, entre ellas la del Sáhara, al término de la historia colonial, que se malcerró en 1976. Pero hemos considerado de interés añadir un capítulo previo en el que traemos a colación los antecedentes literarios de la presencia española en el continente africano con textos de los siglos XV y XVI en los que se expresa ya desde aquel momento un interés por aquellas tierras, entonces ignotas. En este mismo orden de cosas, consideramos que el discurso colonial no se agota con el término estricto de la presencia española y la extinción unilateral de responsabilidades, sino que tiene una cierta continuidad en forma de discurso poscolonial que trata de comprender y/o justificar lo ocurrido, pero que acaba diluyéndose en otro discurso nuevo, distinto y, por tanto ajeno ya a nuestro estudio, y que está centrado bien en un contencioso jurídico no resuelto internacionalmente, bien en los problemas derivados de la nueva ocupación del país, bien en la penitencia que se ha autoimpuesto espontáneamente la propia sociedad española por el abandono del pueblo saharaui y que se manifiesta en forma de intensa acción solidaria con éste. 3.- Fuentes de la investigación 3.1.- Fuentes primarias El quehacer historiográfico distingue entre fuentes primarias y secundarias. Pues bien, de una forma muy elemental diríamos que la fuente primaria de nuestra tesis ha sido el patrimonio bibliográfico referido directa o indirectamente al Sáhara occidental y su contexto y publicado en España en cualquier lengua española. Pero esto no es en modo alguno suficiente, porque conviene acompañar tan inmenso fondo documental de una serie de elementos modificativos que amplían muy generosamente las fuentes utilizadas. En primer lugar, entendemos como libros no sólo las publicaciones unitarias que por su volumen y aspecto son reconocidas generalmente como tales, sino también otras publicaciones menores como opúsculos, folletos y separatas. Este último tipo de 8 publicaciones resulta de clasificación un tanto confusa puesto que, siendo entidades singulares, constituyen a la vez parte del despiece de otra publicación mayor, generalmente periódica. De hecho, muchas revistas científicas ofrecen a sus colaboradores un determinado número de ejemplares de su aportación literaria en forma de separata. En nuestro ámbito de investigación hemos detectado numerosos ejemplos de ello, incluso en el siglo XIX. En segundo lugar, y de forma casi inadvertida, ello nos ha llevado a tomar en consideración asimismo determinadas publicaciones periódicas, porque algunos autores han optado por publicar sus textos no en forma de libro, sino de colaboración en revistas. No podríamos conocer la peripecia que vivieron Quiroga y Cervera en su viaje de 1886 al Sáhara sin consultar lo que comunicaron a través de las revistas de las sociedades geográficas, puesto que ninguno de los dos publicó nunca un libro sobre su periplo por el desierto. Ni es suficiente trabajar sobre la bibliografía que publicaron los investigadores españoles que trataron de desbrozar los secretos del Sáhara durante los años cuarenta y cincuenta del siglo XX, habida cuenta que buena parte de sus experiencias se publicitaron también a través de revistas, muy en particular África y Anales del Instituto de Estudios Africanos, aunque también en otras más especializadas y vinculadas con sus respectivas profesiones. 3.2.- Fuentes secundarias La inmensa selección de libros cuyo contenido hemos tenido que tomar en consideración para nuestro estudio nos ha llevado, a veces de forma inductiva y otras, seamos honestos en reconocerlo, casual, a otros títulos que, en principio, no hubieran tenido por qué despertar nuestro interés, pero que, una vez descubiertos, nos han producido gratas sorpresas, bien porque insertaban algunos contenidos útiles o porque dedicaban parte del texto, o algunos de sus capítulos, al Sáhara occidental o su contexto temático. Este tipo de libros sería nuestra primera fuente secundaria. Por otra parte, la investigación hemerográfica en la que nos hemos visto velis nolis reiteradamente inmersos ha dado generoso juego como fuente de información secundaria y no sólo en las publicaciones o revistas científicas, sino también, en algunos casos, en la prensa diaria, particularmente cuando hemos tenido que referirnos a acontecimientos puntuales, pero de extraordinaria importancia para nuestro estudio 9 (visita de Franco al África Occidental Española, conflicto del AOE, crisis de 1975, marcha verde y evacuación, etc) Fuente de inestimable valor han sido asimismo algunos estudios previos que permanecen inéditos, como es el caso de tesis doctorales no publicadas y las antiguas tesinas de licenciatura. En el primer caso, el hallazgo de tesis doctorales referidas al tema sobre el que hemos trabajado es relativamente fácil porque el fondo de las mismas se encuentra catalogado y aparece en internet. No ocurre lo mismo en el segundo, ya que las tesinas para la colación de grado no sólo desaparecieron como requisito académico, sino que las existentes son difícilmente localizables dada su enorme dispersión. Las que hemos podido consultar, algunas particularmente valiosas, ha sido porque sus propios autores nos dieron noticia de ellas y nos facilitaron el uso de un ejemplar de las mismas. Hoy en día, existe otra fuente indispensable y de extraordinario interés. Nos referimos a las bases de datos localizables por vía electrónica, a través de las cuales se abren miles de senderos que, eso sí, hay que saber utilizar para llegar a encontrar los documentos que deseamos. Téngase en cuenta que estamos asistiendo a un gigantesco proceso de digitalización de textos en soporte papel –libros, revistas, diarios, documentos de todo tipo- que pueden consultarse, en su inmensa mayoría, sin dificultad y sin más requisito que saber hallarlos. La biblioteca y hemeroteca digital de la Biblioteca Nacional de España, el portal del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales (antiguo Instituto de Estudios Políticos de la Secretaría General del Movimiento), el portal de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (http//jable.ulpgc.es) y la página web La mili en el Sáhara, obra colectiva de antiguos reclutas con testimonios personales literarios y gráficos, son elementos valiosísimos para interpretar mejor el hecho colonial, sobre todo en su última etapa. Y todavía nos queda dos fuentes más que en otro tipo de investigación entrarían con todo derecho en lugar de honor entre las primarias, pero que a nuestros efectos, y sin que ello signifique minusvaloración alguna, nos hemos permitido enmarcarlas dentro de las secundarias. Nos referimos a la investigación archivística no estrictamente bibliográfica y a los testimonios personales, particularmente de autores, todavía vivos, de libros objeto de nuestro estudio. Téngase en cuenta que el contacto con estos autores es, a veces, requisito imprescindible para poder acceder a su obra, puesto que nos 10

Description:
quatrocie(n)tos y treinta y cinco los tornó a e(m)biar el infante, y pasando de Agra de los Ruivos au Río de Oro o Smara, the forbiden city.
See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.