Description:En el cementerio de Atlanta, capital del estado de Georgia, se estaba procediendo a la inhumación del cadáver de Ross Garrett, un hombre que abandonaba el mundo de los vivos en plena juventud. Sólo treinta años de edad. Una verdadera pena. Y, hablando de pena, no parecía ser muy grande la que sentía Paula Garrett, esposa del finado. Sus ojos estaban totalmente secos. No habían derramado una sola lágrima, ni durante el funeral, ni cuando le fue comunicada por la policía la noticia de que su esposo había perecido al precipitarse contra el suelo su avioneta particular.