ebook img

El monitor de la educación común. Año 28 No. 431 Nov 30 1908 PDF

154 Pages·2015·40.47 MB·Spanish
by  
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview El monitor de la educación común. Año 28 No. 431 Nov 30 1908

m ~ R Q A ~W S d O N AOlOlYaL DE EDUOACI~W Preriídeatot ~ rD.. J OS* M. -08 qaEJf* DI. D. RkFAEL RUIZ DE LOS LLANOS, Dr. D. JOS* B. ZUBiAVa Dr, n. PASTOR LACASA. prot. DELF~PPJI JEIA IlsoFcvtprio: ALBERTO -N xABT~NE% OlReCTOR: ALBERTO JULIAN MART~NEZ Didáctica ? Corno k~ pdksionales, los maestros suelem l rar la importancia de su carrera. En codmn- clas y disertaciones, so~tienenq ue el objeto de la m- , cuela es formar al hombre para la vida eompletra r P prescindiendo de la familia 1u e resulta mero coEab- ra&r, y de la sociedad don e ha de situase el Hoin- bre futuro. Reducir 6 sus verdaderosl ímites este concepto exce- sivo, no amengua la importancia de la escuela, coma va rí verq pero tiene la ventaja de plantear el pro- blema en el terreno de la realidad. La escuela no forma al hombre sino ea parte, dado que aquél se halla sometido durante su existencia tres ensefianzas: la familiar, la escolar y la social. Si ellas son armónicas y correlativas, el tipo de hombre que producen es superior y equilibrada; de lo contrario se esterilizan en gran parte y pradmrl indi~iduosin feriores. m ilFil a R-IIWO anterior anunabinoe la priblioaoloa de e& 4e hp01- do Lngms mo- m el tmpitiulo imgllndo -0 smnto -ia%@c&k e@w&p- 4 un tenia qae en 1s s0hr&aad 6% dabate. Cm$Inwmw &ore eon al ea- psolo pnmi m paro rregaes mguEBFmafe lo piiblio~~oiodne lo obra De las tres: la escolar es condicional y prescindi- ble; la familiar, generalmente disfrutada; la social. inevitable. Las dos primeras, forman al hombre para si mis- mo; la tercera para los demhs. Aquellas cuentan con el individuo; ésta con el ciudadano. Por todos estos motivos, la ensefianza familiar y la escolar, resultan subordinadas k la ss.cial que viene api determinarlas originariimso&; S$ bien - reaccio- nan unas sobre atras en correlacf.dón cientfE[%b'empi- rica, pero inevifabk . - ' El hombre civilizadq es, primero, para la sociedad; despuks para los suyos; Ciltimamente para sí, En esta negacibn del egoismo, estriba todala civilizacián. La procedencia del hombre alumno es la faai- S, lia, base de la sociedad, pero conformada por de a~mrdoco n ciertas reglas civiles y morales, Su destinz, es la sociedad. la, resulta, pues, intermedio tua- e & t r v1! ~iv g ;p ;@S @ n j k o upgm+p *Q para la familiar hwcial una base, la*, coa. o promete fi ambas cualquiera que sea,g sz wl~di?l~~-' .*yg-. Dadas nuestras condiciones d~'.&&geil hbbre que pasa directamente de' la famillia 'li"l$'3ociedac& gueda en condiciones infed&ea..La escuela: es, pues, iudis. pensable en la vida civilizada. Esta qonclwsión, inoficiosa de por si, .nmw.aTia para asignar A .la escuela SU verdadero papel. Laesmela, noforma, pues, al hombre para la-vida completa; contribuye ;I formarla ventajosamezffeI- , Al completar Za accídn de la familia, @&a viene ccer su coIabc3radsréi; pero ella lo es tamhien de la so- ciedad en la cual figura corno institución. Su papel y sus condiciones, no son, entonces, abs- tractos ni abs~lutos. Como institución, debe contribuir á 10s fines de la saciedad donde funciona, dando por su parte al chdadano futuro, las condiciones; que dicha soeied;Pd exija. Así, no pueden ser idénticas las escnelas & un pais monárquico y unitario, con las de una r~pith3-im federal; las de una comarca agrícola, con las de wi minera; las de una ciudad con las de una villa, ' No sucede así, para tomar camo ejemplo la otra institución que comparte el dominio espiritual, con las if í.l esias cuya magnitud es lo finico que varia en las iversos medios. Porque las iglesias enseñan 10 que llaman verdad revelada, consistente en d ~ p a s inaveriguables y absolutos. iw- La misión de la escuela en la i&T. bre, consiste, esencialmente, 9 b adquirir - la verdad demostrada, :6 36$, qlicación racional de los fendmenoa4, qm latz151rad ser estable, pero que nunca se hk&a&cientee Cra'lh ambién el aprendizaje adquirido en la fa. milia cuya misión especifica es la formación del ser moral; y prepara la acción futura de la sociedad cuyo resultado es el ciudadano. No se trata, sin duda, de limitaciones completas; pues siendo la enseñanza una, en el individuo uno por definición, los resultados y acciones del hogar, la es- cuela y la saciedad, se compenetran profiindammte en (51. Pero por su caracte~in termedio, la escuela partici- pa mds del hogar y de la sociedad respecti~arnenk~ que &tos de ella, De aquí la atención equivaleate que ambos deben prestar kt su formacidn. Toma la escuela, del primero el prestigio aord y de la segunda el concepto del orden. Aqyello p~odu- ce 81 individuo conforme consigo mismo en la satbfac- cibd d deber. Esto otro al ciudadano conforme con la noma social en el encanto de la solidaridad. La moral deS hogar y la de la escuela debesa basar- se en principios inflexibles aunque sean ripr~amente izaaplicables en la existenoio social; pues lasi embates contra ellos sm&nt an distintos en esta, que á poco no subsistirán sino sus bases como puntos de apoyo para las reacciones del bien. Esto es lo único que en la existencia social, diferencia positivamente al buen ciudadano del individuo delictuoso. Sin duda la sociedad tiefie que limitarse á exigir del ciudadano una conformidad puramente externa con sus normas, pues de lo contrario atentaria contra la libertad de aquél; pero esto asegura tambikn Ci. las pasiones privqdas un relativo desenfreno, al cual sólo forman recinto salvador las bases subsistentes de los principios inflexible&, El concepto de orden que la sociedad reconoce, es actualmente una imposición de fuerza; porque debe sostener hechos consumados, no siempre compatibles con la equidad y la razbn. Pero ello supone desde luego la efectividad de la fuerza, al suscitar simultáneamente resistencias ob- vias. orden de la escuela, carece de dicha fuerza, es- tando sfob1'iado á realizame nl a forma ideal antes enunciada: la cóniEmmi$'BEdd el ciudadano con la nor- ma social, en el encanto de la solidaridad, Serh, pues, la escuela, una pequega sociedad ideal, donde el orden resulte una conveniencia y un en- canto, Ello s61o puede conseguirse haciendo del trabajo un placer, lo que no es difícil, pues física é intelectual- mente el organismo tiende & dar cierto rendimiento para asegurar el equilibrio que exige su paP el de con- sumidor. El haragán incorregíble es un en ermo. Bajo condíciones de buena instalación, de higiene apropiada, de esfuerzoscuya utilidad sea racionalmen- te explicable, de encanto estético y de economia justa para el tiempo y para el trabajo, el orden se impone por si mismo, mejor dicho se hace distrutar sin que se lo note, como las funciones de una víscera sana. Y la solidaridad viene también de par sí, como una ex- pansión comunicativa de las propias satisfacciones. L;ts cualidaae8 esenciales de31 profesor, ~ertin&, ton- des, la genwalkacidn y la inventiva, en fir enseilanza primaria, secundaria y noxmal, desde pite, par su natw relks ellas nada especialiw. Limitanse di metodi- zar la mente para ensefiarle & cmacer la esplieación de los hechas- jusb pmvwho, la disoIuc&n 'pmgresivs de las clanes sooiiales, ampliando el dadno del hombre ha& wpi. ~acioneisl iinitadai dentro de todas Im eventadidades pmibles, ha impuesto el tipo de la escueta j$.qr@lj b sea aquella que Baepierta La mayqr .sa&q dtpiifiida~n"- ' Ya m puede erimse al hombre parmi'.'&sfda'bq uello de preferencia, aunque una cmem:&5&$liae despues BUS esfuerzos; sino para ser generaldnte &id. Alqa &tiF todavk &o rrahtiy~L, a pobTacib.n, de%- gi.~por&an& con el ht0ri6~im pone; J -habitante un dwarrollh muy Y&O y con frecwda ine~perado de rptitu4es. La acuda integral resulta, así, la mas nacional y la más democrática, sin que eao implique negar la división del trabajo que es una mnwcumcia del progreso; pues su imperio ha de restablecerse en el adulto, con la carrera 6 el oficio. Tales son los principios de orden general, que dlse ben regir nuestra enseñanza. Los particulares serh estudiados en los capítulos sucesivos, La misibn de la escuela, es cada vez m8s importan- te en nuestras sociedades; pues la crisis que las ta- baja, compr>rtandod eseenlaces irnprevistcki en su sin- gularidad, E&pan@C ome finko resguardo de posibles calamidades, la educación de las masas. Nada hay tan -kmWa.~omdo ~Im perio de la fer&GM. ea bs evo- lucio-ne$m ides y aqd etstil él gran pdigro del %$u- ro. Es más fkcil adquirir el concepto de la libertad, que saber conducirse dentro de el. Tal es la situacián de la clase obrera, ineducada en la libertad y para la libertad, aunque poseida de su derecho a ella bajo muchos -de los aspectos que particularmente la inte- resan aiioi'a. S610 la educación de las masas puede impedir que el ejercicio de la libertad se convierta para ellas en el goce de un bien ajeno. Lo que nos ha sucedido en cincuenta afios de constituci6n mal usada, debe prevenirnos ante el incierto porvenir. En las sociedades donde la filosofia, la moral y la politica han seguido un desarrollo armónico como en Grecia, la escuela pudo no ser necesaria & titulo de institucidn piiblica, La canformidad general con las normas sociales, aseguraba un tipo ventajoso 4 la enseñanza, cualquiera que fuese el maestro. Los griegos no conocieron la escuela pdblica, sien- do esta una de sus grandes ventajas sociales sobre nosotros, El deber fiscal de educar al pueblo, proviene esen- cialmente de unadisociación fundamental de los prin- cipios filosóficos, morales y políticos en la sociedad moderna; pues ello ha obligado á imponer artificial- mente la norma que en las sociedades mencionadas resultaba como consecuencia natural. m3 Didáctica La Edad Media, bajo el catoli.ej,mo, presantb el mismo esfado verakajoso que la Grecia, y es sensible que ahora no sea asi; pero m se trata aqui de diseu- tir el bien en abstracta, sin@d a estudiar ua estado de casas aya brusca mdificaciBia seria impasible. Luego, nuestra nacimakidad cosmopolita, requiere la imposieidn rigwsd~e~ u~n a norma, por medios arn . tifSciaIes como es artificial su ~izsmafo ~rmación. Aquí es amnestet. 'extremar adn la accibn del Estada,' pue8 laiwcuela tiene que contribuir con vigor especial & hacer 1o patria, \ Su acción, en este c~nceptoe,s; susbtituta de muchos hogares, donde falta el patriotismo al ser extranjeros apenas vinculados al pais sus fundadores. Ya esta c-llcu nshsli,&a tan importante, le asigna un carácter peculiar que tratar&e n capIt.ízh aparte. Para la adquia46n de la verdad demostrada, es, SS . preferible en iiltimo extremo la nada á la mala escd. . $Jna crabona:, por los suburbias, en rma&a m- dwe8 aburridas, puede .sctx m@ que &tias; 3 por mi parte, recwcdo hhehra dquirido mAo de us; tawcirnient~& bil en smejantes excursiones. tscuela han rez~c-clonadmo ucho al respecko, ~z11-,8 n@ pero WavIa lo bastante, Rssu~tadlsa s ideas expresadas en este capitulo, puede e&aiBlmrse que la escuela bajo su carhcter transitivo & ensefianza interme-dia, prqm%imm d hombre en forrio$eán tres dernmkm: Uno que ae piar&ed wpuhs de llenar su objeto, y ea el metodo diiuikoti~o. Otro que permanece, y. san iw conocimientsrd iidqizkidos. O.t ro que se tfansfor- - ma y es 11 Impresihn moral. Bajo .este concepto estudiaré en esta obra el pro- blema, didktico, empezando, como es justo, por la escada-edificio Z~POLDLWO GONES.

Description:
La obra no puede dejase para miis tarde, porque las dificultaths 4 altues á aborrecer el arden y considerar las horas . $arde, con grandes fallas en el carácter. !' . del afio que acaba de terminar y á principios del corriente,.
See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.