Imagina a una chica de 16 años, embarazada e indefensa, que acaba de ser arrancada de la traquilidad de su hogar y arrojada en el interior de una sucia furgoneta. Secuestrada, sola aterrorizada. Ahora, olvídate de ella... Imagínate, en cambio, a una chica de 16 años, embarazada y diabólicamente inteligente y manipuladora. Desde el primer momento de su secuestro, alimenta cuidados e implacablemente dos únicos deseos: el de salvar a su bebé, y el de vengarse. Es metódica y calculadora, y lo planea todo con mentalidad científica. No deja nada al azar, mientras espera el momento perfecto para poner en acción su plan. Porque en este caso, la víctima es tan fría como sus secuestradores...