Un héroe literario marginal, hermano de sangre de Flannery O'Connor, Charles Bukowski y Harry Crews.
Esta es la historia de un naufragio, el del matrimonio del narrador con Sarah, su primera esposa y madre de sus dos hijos. También es un autorretrato demencial donde Scott McClanahan se pinta como un alcohólico notable y paranoico que emprende la ruta hacia el desastre a través de los paisajes inhumanos de Virginia Occidental. Pero este libro es también una bella canción de amor, una nota de despedida que le sirve al autor para recordar los detalles más íntimos de su enamoramiento. De esta novela, a medio camino entre la ficción y las memorias, se ha dicho que toma el lenguaje de los poetas románticos ingleses y lo pone en boca de un paleto de los Apalaches. No puede ser más cierto.
La crítica ha dicho...
«El libro de Sarah es la canción más triste que hayas escuchado. Es el último trago de whisky de una botella que ha dado demasiadas vueltas. Sus protagonistas son el amor verdadero, la paranoia, el demonio y Dios. Tiene lugar en aparcamientos y locales de striptease y en centros comerciales. Es a la vez ficción y autobiografía, y tampoco es nada de eso. Es una lectura brutal.»
The Fader
«El libro más divertido que leerás jamás sobre el divorcio. De acuerdo, también es uno de los libros más divertidos que hay sobre cualquier tema. Está escrito de una manera valiente y espontánea que mágicamente convierte la risa y la tristeza en la misma cosa.»
Medium
«McClanahan escribe como si fuera el hijo literario bastardo salido de una cópula accidental entre Flannery O'Connor y Harry Crews tras una larga borrachera de bourbon y de que algo hubiera ido mal en el parto.»
3am Magazine
«Leer a Scott McClanahan es como si te golpeara en la cabeza un luchador de MMA colocado con metanfetamina cocinada en una autocaravana sin agua corriente y aparcada