El arte de presentar: Cómo planificar, estructurar, diseñar y exponer presentaciones

322 Pages·2012·10.376 MB·Spanish

by  Gonzalo Álvarez Marañón

El arte
de presentar

El arte
de presentar
Cómo planifi car, estructurar, diseñar
y exponer presentaciones
Gonzalo Álvarez Marañón

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Una presentación es un acto vivo de comunicación en el que un ponente
expone desde el corazón sus ideas delante de una audiencia formada por
personas con sus inquietudes, problemas e historias personales con el fi n de
inspirarles un cambio que mejore su situación actual.
Capítulo 1
Presentar es un arte
«El arte es cualquier cosa que sea creativa, apasionada y El arte de presentar no tiene que ver tanto con crear trans-
personal. El verdadero arte resuena con el receptor, no parencias bonitas como con comunicar ideas que cambien a los
sólo con el creador. (…) Un artista es alguien cuyo coraje, oyentes a través de tu historia, de tu pasión y de tu diseño. Una
intuición, creatividad y valentía desafían el statu quo.» presentación no tiene que ser decorativa: será puro arte en la
medida en que cambie a la audiencia.
Seth Godin, Te transformas en un artista de las presentaciones cuan-
¿Eres imprescindible? do éstas constituyen un regalo personal con el potencial de
cambiar a quienes lo reciben. En veinte minutos puedes dar
Componer canciones es un arte. ¿Y las presentaciones? Mu- algo a una persona que lleve consigo el resto de sus días. ¿Pue-
cha gente me pregunta por qué sostengo que presentar es un des imaginar mayor regalo?
arte: «¿Por qué hablas de El arte de presentar?». Posiblemen-
te hasta tú te hayas hecho esa misma pregunta al leer el títu-
lo de este libro. ¿Acaso lo digo porque considero que hay No busques más, el arte ya está dentro de ti
que ser un artista para presentar? No.
Creo con todo mi corazón que el arte, para ser verdadero, Como ves, no hay que ser un artista en el sentido tradicional del
debe producir un cambio en quien lo recibe. Si no hay cambio, término para realizar grandes presentaciones. Si eres un buen
no hay arte. Para mí ésa es la medida del arte, y no la pericia comunicador no tienes por qué ser diseñador, ni dibujante, ni
técnica o las cualidades estéticas. Si sólo fuera cuestión de téc- actor. En su lugar, pregúntate:
nica, un artista podría ser sustituido por una máquina.
En el arte siempre existe un presente, un regalo por parte ¿Soy capaz de poner pasión y contagiar emoción en
del artista. Algo que no puede pagarse con dinero. El cambio mis intervenciones?
que produce en quien lo recibe no tiene precio. ¿Antepongo los intereses de quienes me escuchan a los
míos propios?
¿Estoy dispuesto a inspirar un cambio en este público
No temas equivocarte, teme no probar nada con mis exposiciones?
nuevo
Si la respuesta a todas las preguntas es afirmativa, entonces
El arte no está libre de defectos. No te obsesiones con la perfec- ya eres por derecho propio un maestro del arte de presentar. El
ción. Las creaciones extraordinarias nunca cumplen las especi- resto no son más que meras cuestiones técnicas que desde mi
ficaciones porque, si lo hicieran, podrían estandarizarse y deja- experiencia tendré mucho gusto en compartir contigo a lo lar-
rían de despertar admiración. go de estas páginas.
Las presentaciones mediocres son
invisibles
«El mundo real no es un lugar, es una excusa. Es una Las presentaciones son cada día menos y menos eficaces.
justifi cación para no arriesgar.» Cualquiera de ellas es igual a otra. La gente está harta de ver las
mismas presentaciones de siempre: PowerPoint y más Power-
Jason Fried y David H. Hansson, Point. ¡Basta ya! Necesitas una vaca púrpura en cada una de las
Reinicia tuyas. El 80 por ciento de las que ves en las salas de congresos y
conferencias del mundo entero son iguales unas a otras, indis-
No sé en tu caso, pero en el mío, entre tesis, tesinas, foros de tinguibles entre sí, invisibles.
inversión, eventos, inauguraciones, presentaciones de libros, ¿Quieres que tus intervenciones descuellen? ¿Quieres que
talleres, reuniones, seguimiento de proyectos, ruedas de prensa hablen de ti, de tu producto, de tu empresa? ¿Quieres ser recor-
y demás, asisto a cientos de charlas y conferencias al cabo del dado? Si al crear y exponer tus presentaciones dejas que las
año. Si representásemos en una gráfica cuántos de esos actos ruedas de tu carro avancen por los viejos surcos, llegarás a
son horribles, mediocres y excelentes, comprobaríamos que se los mismos aburridos destinos de siempre. Salirse de los vie-
trata de una distribución gaussiana: aproximadamente el 10 jos surcos es arriesgado porque puedes llegar a destinos insos-
por ciento de las presentaciones es horrible, el 80 por ciento, pechados. Pero sólo esos nuevos destinos serán dignos de ser
mediocre, y el 10 por ciento, excelente. Nuestro objetivo es des- recordados, comentados y admirados.
plazar nuestras presentaciones todo lo posible hacia la derecha,
hacia ese glorioso 10 por ciento.
O encajas o destacas
Tememos sobresalir, no nos gusta destacar: preferimos encajar,
pasar inadvertidos. Por eso nos refugiamos detrás de transpa-
rencias antes que salir a hablar a pecho descubierto. Antepo-
nemos un documento muerto al acto vivo de comunicar. Vol-
camos datos desde la cabeza en vez de contar historias desde el
10% 80% 10% corazón.
Con esta actitud, nuestras presentaciones no descuellan ni
para bien ni para mal. No serán excelentes, pero tampoco ho-
Horribles Mediocres Excelentes rribles. No llamarán la atención ni en una dirección ni en otra.
Serán, en definitiva, invisibles. ¿Eso es lo que quieres para ti y
para tu empresa? ¿Que nadie se acuerde cuando termine tu ex-
posición?
Cuenta Seth Godin1 que el hecho de ver vacas cuando se En este libro te propongo un enfoque radicalmente nuevo
conduce por una carretera pintoresca puede resultar interesan- de las presentaciones, que chocará frontalmente con lo que
te al principio, pero rápidamente se vuelve aburrido. Una vaca estás acostumbrado a ver y a hacer. Será muy distinto de lo
es igual a otra vaca. Claro que si hubiera una vaca púrpura…, que te imponen en tu empresa. Te propongo llevar tus charlas
¡qué interesante! al siguiente nivel. Al principio te sentirás incómodo y comete-