Description:Desde tiempos remotos se tiene como verdadero, que el destierro, por las razones que sean, deviene en ser uno de los peores castigos que se le puede infligir a un hombre o a una mujer. Este era un punitivo aplicado por romanos, griegos, espartanos, civilizaciones egipcias y árabes, y en otras naciones del mundo, desarrollado o no, tanto antes como después de Cristo, a quienes las autoridades al mando consideraban incurrían en traición o que infringían otras leyes que merecían este castigo. Es así, como el tema del exilio ha sido una fuente feraz, para la literatura. La expatriación ha sido y seguirá siendo fuente de inspiración para novelas, poemas, ensayos, cantos, artículos de opinión, y trabajos de investigación. En la Biblia el libro Éxodo, que narra la salida de los hebreos de Egipto guiados por Moisés en el año 1250 antes de Cristo, es el mejor ejemplo entre los muchos textos literarios, que confiere mayor robustez a la premisa histórica que sostengo. Con esa tónica, esta obra viene a ser una más de las tantas que engrosan la bibliografía con este tema. Sus páginas, son cuitas, ayes, protestas, rabia, resentimiento, dolor, denuncias, desquites, desgarramientos, rebeldía, coraje, pero sobre todo son un llamado a reflexión a todos aquellos que con sus mezquinas acciones han creado las condiciones sociales para que un gran número de dominicanos haya, y aún tengan que emigrar. Todo lo escrito en este texto, tiene esa impronta.