ebook img

De Ockham A Suarez PDF

448 Pages·1994·47.257 MB·Spanish
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview De Ockham A Suarez

FREDERICK COPLESTON, S. l. Profesor Eméritode Filosofía de la Universidad de Londres HISTORIA DE LA FILOSOFIA Vol. III DE OCKHAM A SUAREZ EDITORIAL ARIEL, S. A. BARCELONA Títulooriginal: AHISTORYOFPHILOSOPHY Vol. IlI: Ockbam fo Suarez BurnsandOates Ltd. -The BellarmineSeriesXII Traducción de JUAN CARLOSGARCÍABORRÓN Edicióncastellana dirigida por MANUELSACRISTÁN 1.:1Y4.3 edición en ColecciónConvivium: 1971 y 1981 1.3 edición en ColecciónAriel Filosofía: enero 1985 2.3 edición: abril 1989 3.3 edición: julio 1994 © FrederickCopleston Derechos exclusivos de edición en castellano reservados para todo el mundo y propiedadde la traducción: © 1971 Y1994: EditorialAriel, S. A. Córcega, 270-08008 Barcelona ISBN: 84-344-8700-4(obra con1pleta) 84-344-8723-3 (volumen 3) Depósito legal: B. 25.105 - 1994 Impreso enEspaña 1994.- Talleres Gráficos HUROPE, S. A. Recaredo, 2-08005 Barcelona Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de la cubierta, puede ser reproducida, ° ahnacenada transmitida en nlanera alguna ni por ningún nledio, ya sea eléctrico, quínlico, ° mecánico,óptico,degrabación defotocopia, sinpermisopreviodeleditor. INDICE 11 ADVERTENCIA l. INTRODUCCIÓN. 13 El siglo XIII.- El siglo XIV comparado con el XIII.- Las filoso fías del Renacimiento.- Renovación de la Escolástica. PARTE 1 EL SIGLO XIV 11. DURANDO y PEDRO AUREOLI . 35 Jacobo de Metz.- Durando.- Pedro Aureoli.- Enrique de Har clay.- La relación de estos pensadores con el ockhamismo. 111. OCKHAM - 1 S2 Vida.- Obras.- Unidad de pensamiento. IV. OCKHAM - 11 . S7 Ockham y la metafísica de esencias.- Pedro Hispano y la lógica terminista.- Lalógica de Ockham y la teoría de los universales. Ciencia real y ciencia racional.- Verdades necesarias y demos tración. V. OCKHAM - 111 69 El conocimiento intuitivo.- El poder de Dios de causar un "co nocimiento" intuitivo de un objeto no-existente.- Contingencia del orden del mundo.- Las relaciones.- La causalidad.~"Movi­ miento y tiempo. VI. OCKHAM - IV 83 El objeto de la metafísica.- El concepto unívoco de ser.- La existencia de Dios.- Nuestro conocimiento de la naturaleza de Dios.- Las ideas divinas.- El conocimiento divino de los acon tecimientos futuros contingentes.- Voluntad y omnipotencia di vinas. 101 VII. OCKHAM - V . No se puede probar filosóficamente que un alma inmaterial e inco rruptible es la forma del cuerpo.- La pluralidad de formas real mente distintas en el hombre.- El alma racional no posee realmen te formas distintas.- La persona humana....:-La libertad.- Teoría ética de Ockham. 115 VIII. OCKHAM - VI La disputa sobre la pobreza evangélica y la doctrina de los dere chos· naturales.- La soberanía política no deriva del poder espi- 8 ÍNDICE ritual.- La relación del pueblo a su gobernante.- ¿Hasta qué punto eran nuevas o revolucionarias las ideas políticas de Ock ham?- La posición del Papa dentro de la Iglesia. IX. EL MOVIMIENTO OCKHAMISTA: JUAN DE MIRECOURT y 125 NICOLÁS DE AUTRECOURT . El movimiento ockhamista o nominalista.- Juan de Mirecourt.- Nicolás de Autrecourt.- El nominalismo en las universidades. Observaciones finales. X. EL MOVIMIENTO CIENTÍFICO 152 La ciencia física en los siglos XIII y XIV.- El problema del movimiento: ímpetu y gravedad.- Nicolás Oresme: la hipótesis de la rotación de la Tierra.- La posibilidad de otros mundos. Algunas implicaciones científicas del nominalismo; implicaciones de la teoría del ímpetus. . XI. MARSILIO DE PADUA . 165 Iglesia y Estado; teoría y práctica.- Vida de Marsilio.- Hostili dad a las pretensiones papales.- La naturaleza del Estado y de la ley.- El legislativo y el ejecutivo.- Jurisdicción eclesiástica. Marsilio y el "averroísmo".- Influencia del Defensor pacía. XII. EL MISTICISMO ESPECULATIVO . 177 Laliteratura mística del siglo XIV.- Eckhart.- Tauler.- El bea to Enrique Suso.- Ruysbroeck.- Dionisio el Cartujano.- Es peculación mística alemana.- Gerson. PARTE 11 LA FILOSOFíA DEL RENACIMIENTO XIII. EL RENACER DEL PLATONISMO . 203 El Renacimiento italiano.- El Renacimiento nórdico.- El rena cer del platonismo. XIV. ARISTOTELISMO. 212 Críticos de la lógica aristotélica.- Aristotelismo.- Estoicismo y escepticismo. XV. NICOLÁS DE CUSA . 224 Vida y obras.- La influencia de la idea capital de Nicolás en su actividad práctica.- La coincidentia oppositorum.- La "docta ignorancia".- La relación de Dios al mundo.- La "infinitud" del mundo.- El sistema cósmico y el alma del mundo.- El hom bre como microcosmos; Cristo.- Filiación filosófica de Nicolás. XVI. FILOSOFÍA DE LA NATURALEZA - 1 . 239 Observaciones generales.- Jerónimo Cardano.- Bernardino Te lesio.- Francesco Patrizzi.- Tommaso Campanella.- Giordano Bruno.- Pierre Gassendi. X\TII. FILOSOFÍA DE LA NATURALEZA - 11 254 Agrippa von Nettesheim.- Paracelso.- Los dos Van Helmont. Sebastián Franck y Valentín Weigel.- Jacobo Bohme.- Obser vaciones generales. ÍNDICE 9 XVIII. EL MOVIMIENTO CIENTÍFICO DEL RENACIMIENTO 263 Observaciones generales sobre la inHuencia de la ciencia en la filo sofía.- Ciencia renacentista; la base empírica de la ciencia, el experimento controlado, la hipótesis y la astronomía, la matemá tica, la concepción mecanicista del mundo.- La inHuencia de la ciencia renacentista en la filosofía. XIX. FRANCISCO BACON 278 Filosofía del Renacimiento en Inglaterra.- Vida y escritos de Bacon.- La clasificación de las ciencias.- La inducción y los "ídolos". XX. FILOSOFÍA POLÍTICA 295 Observaciones generales.- Nicolás Maquiavelo.- Santo Tomás Moro.- Richard Hooker.-Jean Bodin.- Joannes Althusius. Hugo Grocio. PARTE 111 LA ESCOLASTICA DEL RENACIMIENTO XXI. OJEADA GENERAL . 321 El renacer del escolasticismo.- Autores dominicos anteriores al concilio de Trento; Cayetano.- Posteriores autores dominicos y jesuitas.- La controversia entre dominicos y jesuitas a propósito de la gracia y el libre albedrío.- La substitución de los comenta rios a Aristóteles por "cursos filosóficos". Teoría política y jurídica. XXII. FRANCISCO SUÁREZ - 1 337 Vida y obras.- Estructura y divisiones de las Disputationes me taphysicae.- La metafísica como ciencia del ser.- El concepto de ser.- Los atributos del ser.- La individuación.- La analo gía.- La existencia de Dios.- La naturaleza divina.- Esen cia y existencia.- Substancia y accidente.- Los modos.- La cantidad.- Las relaciones.- Entia rationis.- Observaciones ge nerales.- l!;tienne Gilson y Suárez. XXIII. FRANCISCO 'SUÁREZ - 11 . 362 Filosofía de la ley y teología.- La definición de ley.- Ley (lex) y derecho (ius).- La necesidad de la ley.- La ley eter na.- La ley natural.- Los preceptos de la ley natural.- La ig norancia.de la ley natural.- Inmutabilidad de la ley natural. La ley de naciones.- Sociedad política, soberanía y gobierno. La teoría del contrato en Suárez.- La deposición de los tira nos.- Leyes penales.- Lasuspensión de las leyes humanas.- La costumbre.- Iglesia y Estado.- La guerra. XXIV. BREVE REVISIÓN DE LOS TRES PRIMEROS VOLÚMENES. J8i Filosofía griega; las cosmologías presocráticas y el descubrimiento de la Naturaleza, la teoría platónica de las formas (Ideas) y la idea de Dios.- Aristóteles y la explicación del cambio y del mo vimiento; el neoplatonismo y el cristianismo.- La importancia del descubrimiento de Aristóteles para la filosofía medieval. Filosofía y teología.- El desarrollo de la ciencia. 10 ÍNDICE APÉNDICES l. TÍTULOS HONORÍFICOS APLICADOS A FILÓSOFOS DE LOS QUE SE TRATA EN ESTE VOLUMEN . 405 11. BIBLIOGRAFÍA. 406 íNDICE DE NOMBRES . 424 íNDICE DE MATERIAS . 432 AD\,TERTENCIA La primera parte de este volumen se ocupa de la filosofía del siglo XIV. Una gran parte de la historia del pensanliento filosófico en dicho período está todavía oscura, y no puede darse cuenta definitiva de la misma hasta que tengamos a nuestra disposición un número mucho mayor de textos dignos de con~anza de los que ahora tenenlOS. Sin embargo, al publicar la exposición contenida en este volumen, lo hago animado por el pensamiento de que el erudito i!1vestigador franciscano padre Filotheus Boehner, que tanto está haciendo por proyectar luz sobre ángulos oscuros del siglo XIV, ha tenido .la amabilidad de leer los capítulos sobre ·Ockham y manifestar su aprecio por el tono general de éstos. Eso no significa, desde luego, que el padre Boehner suscriba todas mis interpretaciones de Ockham. En par ticular, no comparte mi opinión de que el análisis descubre dos éticas implí citamente contenidas en la filosofía de Ockham. (Esa opinión es, en todo caso, como espero haber dejado claro en el texto, una conjetura interpre tativa, destinada a explicar lo que me parecen inconsecuencias en la filosofía ética de Ockham.) Y no creo que el padre Boehner se expresase a propósito de las opiniones de Ockham en teología natural del mismo modo en que yo lo hago. Menciono esas diferencias de interpretación solamente para que no pueda creerse que pretendo que el padre Bohener esté de acuerdo con todo lo que digo. Además, conlO los capítulos iban llegando al padre Boehner cuando ya estaban impresos, no pude hacer el extenso uso de sus sugeren cias que me habría gustado hacer en otras circunstancias. En conclusión, quiero expresar la esperanza de que cuando el padre Boehner haya publi cado los textos de Ockham que está editando, nos proporcione también una explicación general de la filosofía de éste. Nadie estaría mejor cuali ficado para interpretar el pensamiento del último gran filósofo inglés de la Edad Media. I J 1 I I I 1 CAPiTULO PRIMERO INTRODUCCIÓN El siglo XIII. - El siglo XIV comparado con el XIII. -- Las filo sofías del Renacimiento.' - Renovación de la Escolástica. . 1. En el volumen anterior he recorrido el desarrollo de la filosofía medieval, desde su nacimiento en el período pre-medieval de los primeros escritores cristianos y de los Padres, a través de su crecimiento en plena Edad Media, hastá el logro de su madurez en el siglo XIII. Esa lograda madurez fue debida, como hemos visto, en buena medida, a un mejor cono cimiento de la filosofía griega, particularmente en la forma del aristote lismo, un conocimiento que se consiguió a lo largo del siglo XII y la primera parte ~el XIII. La gran conquista del siglo XIII en el campo intelectual fue la realizaciót). de una síntesis de razón y fe, filosofía y teología. Estric tamente hablando, desde luego, sería mejor hablar de síntesis en plural, y no de "una síntesis", puesto que el pensamiento del siglo XIII no puede quedar legítimamente caracterizado con referencia a un solo sistema; pero los grandes sistemas, a pesar de sus diferencias, estuvieron unidos por la aceptación de unos principios comunes. El siglo XIII fue un períódo de pen sadores positivos y constructivos, de filósofos y teólogos especulativos, que podían criticar mutuamet:tte sus opiniones respecto de tal o cual punto, pero que al mismo tiempo coincidían en aceptar los principios metafísicos funda mentales y la capacid~d de la mente humana para ir más allá de los fenóme nos y conquistar la verdad metafísica. Escoto, por ejemplo, pudo criticar en ciertos puntos las doctrinas tomistas del conocimiento y de la analogía; pero sus críticas iban dirigidas por10 que él, acertada o erróneamente, consi deraba como los intereses de la objetividad del conocimiento y de la especu lación metafísica. Escoto creyó que santo Tomás debía ser corregido o complementado en ciertos puntos; pero no tenía la menor intención de criticar los fundamentos metafísicos del tomismo, o de socavar el carácter objetivo de la especulación filosófica. Del mismo modo, santo Tomás pudo pensar que debía concederse al poder natural de la sola razón humana más de 10 que san Buenaventura le había concedido; pero ninguno de aquellos filósofos-teólogos dudó de la posibilida9 de alcanzar algún conocinliento 14 INTRODUCCIÓN relativo a 10 transfenoménico. Hombres como san Buenaventura, santo To nlás, Gil de Roma, Enrique de Gante y Duns Escoto fueron pensadores originales; pero trabajaron' dentro de una común estructura de síntesis ideal y de armonía entre 10 filosófico y lo teológico. Eran filósofos y teólo gos especulativos, y estaban convencidos de la posibilidad de constituir una teología natural, corona de la nletafísica y vínculo de ésta con la teología dogmática; no habían sido infectados por ningún escepticisnlo radical rela tivo al conocimiento humano. Eran también realistas, y creían que la mente puede alcanzar un conocinliento objetivo de esencias. Ese ideal de sistema y de síntesis, de armonía entre filosofía y teología, característico del siglo XIII, puede ser visto quizás en relación con la estruc tura general de la vida en dicho siglo. El nacionalisnlo estaba ya desarro llándose, en el sentido de que los Estados nacionales estaban en proceso de formación y consolidación; pero aún estaba vivo' el ideal de una armonía entre el Pontificado y el Imperio, los dos focos, sobrenatural y natural, de la unidad. Puede decirse, en efecto, que el ideal de armonía entre Pontificado e Imperio tuvo conlO su paralelo, en el plano intelectual, el ideal de la armonía entre la teología y la filosofía, de modo que la doctrina, mante nida por santo Tonlás, del poder indirecto del Pontificado en los asuntos temporales y la autonomía del Estado en el interior de 10 que era estric tamente su esfera propia, tenía un exacto paralelo en su doctrina de la función nornlativa de la teología respecto de la filosofía, y de la autonomía de la filosofía dentro de su propia esfera. La filosofía no tonla sus princi pios de la teología, pero si el filósofo llega a una conclusión que no está de acuerdo con la revelación, sabe que su razonamiento ha sido erróneo. El Pon tificado y el Imperio, especialmente el primero, fueron factores unificadores en las esferas eclesiástica y política, y la preeminencia de la Universidad de París fue un factor unificador en la esfera intelectual. Además, la idea aristotélica del cosmos era generalnlente aceptada y ayudaba a nlantener fija la perspectiva medieval. Pero aunque el siglo XIII puede ser caracterizado con referencia a sus sistemas constructivos y a su ideal de síntesis y armonía, la arlllonía y el equilibrio logrados fueron, al nlenos desde el punto de vista práctico, pre carios. Algunos tonlistas entusiastas estarán seguranlente convencidos de que la síntesis conseguida por santo Tonlás tenía que haber sido universal mente aceptada conlO válida y que debía haber sido conservada. No estarían dispuestos a admitir que el equilibrio y armonía de aquella síntesis eran intrínsecamente precarios. Pero supongo que deben estar dispuestos a admi tir que en la práctica era difícil esperar que la síntesis tomista consiguiese una aceptación universal y perdurable. Yo creo, además, que hay en la síntesis tomista elementos que la hacían, en cierto sentido, precaria, y que ayudan a exp1ic~r el desarrollo de la filosofía en el siglo XIV. Trataré de poner en claro 10 que quiero decir con eso. La afirmación de que el acontecimiento filosófico nlás inlportante en la

See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.