ebook img

Antología. Vol. 4. Estudios de historia e historiografía. Tomo II. Historia agraria PDF

391 Pages·2011·34.856 MB·Spanish
Save to my drive
Quick download
Download
Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.

Preview Antología. Vol. 4. Estudios de historia e historiografía. Tomo II. Historia agraria

Antología Jesús Antonio Bejarano Volumen 4 Estudios de historia e historiografía Tomo II Historia agraria NACIONAL UNIVERSIDAD DE COLOMBIA VICERRECTORÍA ACADÉMICA EDITORIAL Bogota, D. C., septiembre de 2011 © Universidad Nacional de Colombia Agradecimientos © Editorial Universidad Nacional de Colombia © Facultad ele Ciencias Económicas © Jesús Antonio Bejarano (1946-1999) © Herederos ele Jesús Antonio Bejarano Editorial Universidad Nacional de Colombia Luis Ignacio Aguilar Zambrano Director Comité editorial Luis Ignacio Aguilar Zambrano Jaime Franky Juliáu Garcia González Luís Eugenio Andrade Pérez Salomón Kalmanovitz Krauter Gustavo Silva Carrero La Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia agradece de manera especial a Consuelo Páez, esposa de Jesús Antonio Bejara Coordinación editorial Luz Stella Parrado no, a Eduardo Bejarano y a Adriana Bejarano, hijos del profesor, por la cesión de los derechos para la edición y publicación de la Obra de este gran Maestro. Primera edición, 2011 Al profesor Jorge Iván Bula y a la profesora Consuelo Corredor quienes ISBN 978-958-719-990-1 OBRA COMPLETA desde la Decanatura de la Facultad de Economía propiciaron las condiciones ISBN 978-958-719-996-3 (tapa dura) necesarias para llevar a feliz término la edición de la obra. Especial recono ISBN 978-958-761-003-1 (rústico) ISBN 978-958-761-010-9 (e-book) cimiento se hace también a la colaboración permanente del doctor Mauricio Pérez, decano de la Facultad de Economía de la Universidad Externado de Diseiio de la Colección Obra Selecta Colombia. Marco Aurelio Cárdenas Debe gratitud también a los profesores Astrid Martínez, María del Rosario Edición Guerra, Humberto Vergara, Beethoven Herrera y Luz Stella Parrado, quienes Editorial Universidad Nacional de Colombia [email protected] participaron de manera activa en la escritura de los textos introductorios de www.editorial.unal.edu.co cada uno de los volúmenes que conforman la Obra de Jesús Antonio Bejarano. Bogotá, D. C. Colombia 2011 La Universidad hace extensivo su agradecimiento a los profesores Álvaro Zerda, Gustavo Junca, Armando Rodríguez, Antonio Hernández Gamarra y Prohibida la reproducción total o parcial por cualquier medio sin la autorización escrita del titular de los derechos patrimoniales César González por su interés para que la obra se editara. Se hace un reconocimiento especial a los estudiantes Magaly España y Impreso y hecho en Bogotá, D. C. Colombia Jersson Guerrero por su colaboración en la sistematización, clasificación y digitación de los textos. Catalogación en la publicación Universidad Nacional de Colombia Para la publicación fue fundamental el trabajo de la Editorial de la Uni Bejarano Ávila, Jesús Antonio, 1946-1999 Antología Jesús Antonio Bejarano -Bogotá : Universidad Nacional ele Colombia. versidad Nacional de Colombia. Agradecemos el interés permanente de su di Vicerrectoría Académica, 2011 rector el profesor Luis Ignacio Aguilar Zambrano y de su equipo editorial. 4 v. en 7 -(Colección obra selecta) Incluye referencias bibliográficas Contenido : v.1. t.l. Estudios económicos. Economía colombiana --v.l. t.Il. Estudios económicos. Teoría económica e instituciones--v.2. Estudios de paz --v.3. t.!. Estudios agrarios. Desarrollo de la agricultura --v.3. U!. Estudios agrarios. Desarrollo y crecimiento económico --v.4. t.I. Estudios de historia e histmiografía. Histmia económica--v.4. t.II. Estudios de historia e historiografía. Historia agraria ISBN: 978-958-719-990-1 (obra completa)-ISBN: 978-958-719-991-8 (v.l t.I) ISBN: 978-958-761-011-G (v.l t.II) --ISBN: 978-958-719-992-5 (v.2) -- ISBN: ISBN: 978-958-719-993-2 (v.J t.!) --ISBN: 978-958-719-994-9 iv.3 t.II)-ISBN: 978-958-719-995-6 (v.<l t.l)-ISBN: 978-958-719-996-3 (v.4 t.II) l. Colombia-Condiciones económicas 2. Teoria económica 3. Solución de conflictos 4. Acuerdos de paz 5. Economía rural 6. Colombia-Condiciones rurales 7. Colombia-Politica económica l. Tit. 11. Serie CDD-2 1 330.986! / 2011 Contenido Prólogo La necesidad de la historia en la economía Luz Stella Parrado 11 El fm de la economía exportadora y los orígenes del problema agrario I 19 El fm de la economía exportadora y los orígenes del problema agrario II 79 El fm de la economía exportadora y los orígenes del problema agrario III 129 El contexto económico, social y político de la Ley 135 de 1961 193 La legislación y el desarrollo agrario hasta 1944 205 La violencia y las transformaciones sociales 219 Las luchas campesinas de los años veinte y treinta 231 El despegue cafetero ( 1900-1928) 241 Las técnicas agropecuarias en el siglo XX 273 Notas para una historia de las ciencias agropecuarias en Colombia 297 Economía y poder. La SAC y el desarrollo agropecuario colombiano, 1871-1984 373 El régimen agrario: de la economía exportadora a la economía industrial 605 Índice temático 763 Índice onomástico 779 Prólogo La necesidad de la historia en la economía Luz Stella Parrado Los estudios de historia e historiografía muestran fluidez y versatilidad en el conocimiento ele la economía, el fenómeno agrario, en particular el conflicto agrario, los movimientos campesinos y la propiedad ele la tierra, e incluso in cursiona en la historia ele las mismas ciencias. Jesús Antonio Bejarano fue uno ele los intelectuales más preocupados por el conocimiento y la investigación sobre la historia económica ele Colombia; además, siempre estuvo presente en los debates sobre la necesidad ele involucrar la historia en los diferentes pro gramas ele investigación ele las ciencias sociales; con frecuencia analizó desde muchas aristas las historiografía económica, agraria y social ele los economistas e historiadores colombianos, e incluso controvietie sobre el uso pertinente de algunos métodos contemporáneos ele la historia, quizás volviéndose incómodo pero siempre dispuesto para los más caros debates. Estos rasgos se pueden observar en su prolíftca obra y en particular en las empresas intelectuales que sobre historiografía emprendió y en las que involu cró a toda una comunidad ele académicos e intelectuales ele su generación y de las anteriores. No omitió esfuerzo alguno al adelantar empresas intelectuales de la envergadura de obras como El régimen agrario. De la economía exporta dora a la economía industrial o Economía y poder, en el estudio y reflexiones que hizo considerando diversas perspectivas disciplinares. Fue denodado su interés por fortalecer la alianza entre historia y econo mía. En este sendero defendió con convicción la idea de que a la economía como ciencia social le era ineludible abordar la historia para dar cuenta de los diversos subsistemas sociales y porque los acontecimientos sociales cobran mayor signiftcación cuando se comprenden como proceso, en sus regularida des, en su esencia. De lo contrario, la ciencia económica, según él, la corriente neoclásica, terminaría reducida a un sistema cerrado relacionado con la sa tisfacción de demandas y donde lo político y lo social serían apenas variables exógenas respecto al comportamiento del mercado. De manera precisa escribió 11 ANToLOGÍA PRóLOGO JESÚS ANTONIO LA NECESlDAD BEJARANO DE LA HISTORIA Anotaciones sobre la historiografía económica de Colombia, preámbulo de lo deraban algunos como "el avance de la historiografía, otros como la emergen EN LA que será después Historia económica y desarrollo; en una y otra publicación cia de un nuevo paradigma historiográfico" ... , pero Bejarano consideraba que ECONOMÍA alude a las implicaciones interpretativas del análisis económico y la historia ese campo de estudio, el de las mentalidades, más bien corroboraba la "crisis para dar cuenta del hecho social. Tenía la convicción explícita de que la teoría de la historiografía que no es, por otra parte, atributo exclusivo de la investi económica no solo es útil para la explicación de la historia económica, sino gación nacional sino de un clima intelectual más amplio que caracteriza hoy también la de que una teoría sin historia resulta endeble o por lo menos limi al mundo occidental". Frente a la historiografía colombiana trata de incitar la tada cuando se trata de identificar variables relevantes para comprender los discusión cuando argumenta que los trabajos de los historiadores nacionales problemas del desarrollo. son con frecuencia acríticos y que el nuevo pensamiento historiográfico, el ele En su conferencia "La necesidad del saber histórico" afirmaba que era las mentalidades, se ha utilizado para realizar estudios ele historia nacional sin necesario el conocimiento de la historia en cualquier campo de las ciencias hacer ninguna reflexión sobre la utilidad o efectividad ele su adopción. sociales, pero también creía en la necesidad de saber Lo que trata de mostrar en este texto es que la principal consecuencia de las tensiones surgidas por el cambio del paradigma, el del estructuralismo, en qué dirección debe ubicarse la necesidad del conocimiento histórico, es decir, a qué orden ele problemas debe responder, cuál debe ser el el de las concepciones de totalidad y de las interpretaciones del pasado, por sentido ele su desarrollo, esto es, cuál debe ser la jerarquización que se el nuevo, un paradigma "posmoderno", fundadci en la "historia narrativa", establezca ele las diferentes regiones ele la historia y, lo más esencial, es que se ha generado una confusión historiográfica y que se han afianzado cuál debe ser el tipo ele saber histórico capaz ele trascender la erudición métodos y perspectivas totalizadoras para dar cuenta de los acontecimientos propia ele las "humanidades" tradicionales y ele superar el carácter ele de la historia colombiana, y que esto ha traído como consecuencia "la frag "ciencia inútil" aprendida por puro clive11imento. mentación y la dispersión ele los estudios históricos, la disolución del núcleo ele la historiografía, es decir, la disolución del propósito ele la reconstrucción Complementaba, en otro de sus textos, que "parcelar la historia, como del pasado cuyo resultado principal es la pérdida ele identidad ele la historia objeto ele estudio, en campos específicos puede ser o bien un procedimiento como disciplina". a1iificioso para defmir los términos ele un problema, o bien una postura teó Las preocupaciones de Bejarano en torno al uso de los métodos de in rica sustentada en la posibilidad de fragmentar el conocimiento de la realidad vestigación vinculados a la escuela ele las mentalidades son expuestas en la social". conferencia que realizó en el "Primer seminario sobre la enseüanza de las Fue un académico prolíflCo y audaz pues pa1iicipó activamente ele mu ciencias sociales en las universidades del Estado", en la Universidad Nacional, chos debates en las diversas disciplinas sociales en Colombia, hizo parte inte Sede Meclellín, en abril ele 1978; allí presentó un panorama sobre los métodos gral ele ellas sin alinearse en las corrientes principales ele las corrientes teóricas narrativos ele los historiadores europeos, para concluir que no había en esas de esas épocas. Sus controversias se muestran por ejemplo en su trabajo his narrativas ele la historiografía moderna una preocupación por el pasado en toriográfJco Guía de perplejos: una mirada a la historiografía colombiana, en cuanto tal, como tampoco había un interés por aiiicular los estudios de la el cual esgrime la tesis de que en los afias noventa era evidente el declive de historia a las nacientes Ciencias Humanas ... Se trataba más bien ele asignar la producción académica en historia económica y social colombiana y aduce, una función ideológica a los hechos históricos y de darle gran significación a en forma más enfática, que en Colombia han venido haciéndose trabajos de la cultura burguesa ele Occidente. En el caso colombiano se "trató ele dar a los historia con gran influencia de la historia de las mentalidades a la que consi- 12 13 ANToLOGíA PRóLOGO JESÚS ANTONIO LA NECESIDAD BEJARANO DE LA HISTOREA trabajos históricos un aire ideológico a la manera europea pero no en el senti entonces recursos que harían posible la fmanciación de un programa masivo EN LA do de las vivencias sociales del acontecer histórico, sino al tratar de fundar la de obras públicas. Identificó la expansión exportadora y el mejoramiento de la ECONOMÍA autenticidad de lo nacional sobre el espíritu de los héroes". relación de precios de intercambio, la ampliación del fmanciamiento externo Bejarano reconoce sin embargo que las perspectivas con que se realizan y la llegada de los recursos provenientes de la indemnización de Panamá, lo estudios históricos en la denominada Nueva Historia de Colombia han supera que dio lugar a una mayor capacidad de gasto público y de importaciones. do las miradas de los más ortodoxos. Advierte, de acuerdo con Marrau, que el Los aüos veinte fueron pues considerados como los tiempos de la expansión camino es esa nueva historia, es la de aquel que se complace en la historia y exportadora. que sabe nutrirse de este conocimiento, auténtico aunque siempre parcial en la La crisis económica que comienza a sentirse en 1929 acelera procesos captación de su objeto. Recomienda entonces que a los hechos históricos se les económicos, sociales y políticos que ya se venían incubando: "un orden eco dé una explicación verificable, documentada y precisa. "Las interpretaciones nómico orientado hacia la industrialización, un Estado políticamente más de la historia han de ser objetivas y críticas de la historia subjetivista propia abierto y modernizado en sus instituciones, pero sobre todo un orden social de la cultura posmoderna". mucho más conflictivo que exigía la presencia de nuevas fuerzas políticas ca Escribe Historia económica, un intento de delimitación. Allí, lo que perci paces de encauzar el clima de reformas que acomodaban al país a las nuevas be en primer lugar es que la historiografía económica colombiana se había in circunstancias". En esta linea publica también La economía colombiana entre clinado entonces por una temática cuya preocupación central era el desarrollo, 1930 y 1945, donde hace un recorrido descriptivo y analítico sobre las trans concebido como un proceso que vincula las transformaciones sociales internas formaciones del aparato productivo nacional, teniendo como fondo la primera de los países con la economía mundial. gran crisis económica mundial en la era moderna. En el rango que va de 1930 Por otro lado, presentía los límites analíticos de las teorías duales del a 1939 el país experimentó un gran dinamismo industrial y, en contraste, desarrollo cuando mayor vigencia académica ostentaban: mantuvo su interés entre 1939 y 1945 el país declinó su crecimiento pues se vio afectado por los crítico sobre los enfoques marxistas que acudían a la historia para explicar los desastres de la Segunda Guerra Mundial; en estas circunstancias, el gobierno "estadios" del desarrollo o la explicación del atraso de los países periféricos colombiano diseüó y aplicó una serie de medidas para reducir el gasto público a partir del virtuosismo de los países industrializados. De la misma manera y controlar la oferta monetaria. Describe los acontecimientos económicos de relativizaba la utilidad de la Escuela de Annales que a muchos economistas e esos dos periodos teniendo como referente las transformaciones del rol del historiadores latinoamericanos entusiasmaba. Estado sobre el mercado interno y la sociedad; en el análisis incluye de ma Su mirada crítica alcanzó a las corrientes de la Cepa! y dependentistas nera consecuente los aspectos políticos, sociales y de la dinámica externa que que hacían historia sobre el desarrollo por fases en una doble dimensión: el influyeron en el despegue industrial y en su inmediata crisis. estimulo exportador y el desarrollo hacia dentro en América Latina. Bejarano aborda también otros campos de la producción del saber his Su producción intelectual sobre la historia económica colombiana es tórico. En esa línea están, por ejemplo, Estudios sobre la historia del café: en una manifestación fehaciente de sus preocupaciones; escribe, por ejemplo, La este trabajo caracteriza y clasif1ca los estudios sobre la economía cafetera economía colombiana entre 1922 y 1929, en que da cuenta de cómo desde considerando que algunos se han dedicado al análisis de la estructura interna comienzos de los años veinte el país encuentra una confluencia de factores de las unidades productivas, de las formas de explotación del trabajo, de los que permitirían superar la escasez tradicional de recursos externos, y habría mecanismos de comercialización, y otros tratan de establecer los efectos de la 14 15 ANToLOGíA PRóLOGO JESÚS ANTONIO LA NECESIDAD BEJARANO DE LA HISTORIA producción y comercialización cafetera sobre el desarrollo del país; por último Bejarano escribe también acerca de los movimientos agrarios y la lucha EN LA señala que hay algunos estudios de la historia cafetera que ponen el énfasis en por la tierra. Produce los más variados argumentos para demostrar las rela ECONOMÍA la comprensión de las estructuras políticas asociadas al café. Así mismo, trae ciones que ha habido entre la apropiación de la tierra y las formas de trabajo a colación los más impmtantes estudios realizados sobre la economía cafetera en el marco ele una sociedad dinámica, en la cual la diferenciación social es y el comercio exterior. compleja y la fuerza ele trabajo es mucho más móvil y más estratificada. En sus trabajos resaltó la más variada producción ele los especialistas en el Bejarano da toda la importancia a los trabajos que ponen tema, como Absalón Machado y el texto El café: de la aparcería al capitalismo; el acento en la estructura interna de la economía cafetera, en las di Mariano Arango y Marco Palacios: El café en Colombia, 1850-1970; Malcolm ferencias regionales alrededor de la organización productiva y de las Deas: Una finca cundinamarquesa: la hacienda Santa Bárbara. La Geografía eco relaciones ele producción en cada zona, en los mecanismos de comer nómica de Colombia, de Antonio García y M. Galán Gómez. Reconoce que algu cialización del café y en las fom1as de explotación del trabajo, es decir, nos de estos trabajos sobre la historiografía del café trascienden la perspectiva cuando se intenta la reconstrucción del proceso cafetero desde su inte de considerar que el café fue el impulsor del clesaJTollo económico, y hace una rior y no desde sus efectos sobre la economía nacional. reconstrucción ele las líneas esenciales de la historia del café. Sobre la historia agraria del café analiza varios aspectos: 1) La evolución Advierte entonces que el acervo bibliográfiCo se enriquece cuando se arti general de la agricultura como sector, gracias a Jos trabajos historiográficos cula la historia económica con los procesos políticos y sociales en el origen y que se han realizado sobre el desarrollo ele la agricultura desde el siglo XVII, constitución ele las clases, en sus ritmos ele diferenciación y en el modo como el régimen de hacienda del siglo XVIII y las variadas haciendas cafeteras del la vida política y el Estado se entrelazan con los hechos económicos. Hace una siglo XIX y comienzos del XX. En ellos hay una mayor precisión de los pe reconstrucción histórica de la evolución ele la economía cafetera asociada a riodos, de las coyunturas y de los agentes de cambio; 2) Los movimientos la economía colombiana y su inserción a la economía mundial, con base en agrarios y la lucha por la tierra. Y aquí llama la atención sobre la necesidad ele los estudios ele largo aliento que fueron escritos por historiadores y economis situar los acontecimientos políticos asociados a los movimientos agrarios en tas colombianos. Muestra aquí cómo el sector cafetero se vincula al mercado el contexto de las transformaciones de la agricultura y los efectos que las lu mundial, con lo cual se configura la etapa conocida como de "desarrollo hacia chas sociales tienen sobre la estructura productiva. Esta línea de pensamiento fuera" y luego de "desarrollo hacia dentro" después ele la crisis ele 1930. Otro la profundiza en su trabajo Campesinado, luchas agrarias e historia social en aspecto importante es el estudio ele la estructura interna y la dinámica del sec Colombia: notas para un balance historiográfico. Ahí reconoce que los trabajos tor, lo que, por último, muestra cómo se plantearon las relaciones del proceso de historia social han tenido mayor énfasis sobre la estructura productiva, la social y político derivado del desarrollo cafetero, la formación y consolidación conformación de la hacienda, las relaciones entre la apropiación de la tierra y ele la burguesía, la vida política, la intervención estatal y las luchas agrarias. las formas de trabajo, el impacto económico del mestizaje; lo que se descubre En esta línea también escribió Campesinado, luchas agrarias e historia es una sociedad dinámica en que la diferenciación social es mucho más com social en Colombia: notas para un balance historiográfico, donde debate con pleja y la fuerza de trabajo mucho más móvil y más estratificada, de modo que suficiencia las distintas interpretaciones que tanto historiadores como eco ese movimiento acaba sobrepasando el ordenamiento institucional y abriendo nomistas colombianos habían dado a la evolución del desarrollo económico, el camino a transformaciones futuras de las relaciones de trabajo en el campo. los movimientos campesinos y la lucha agraria en el país. Es claro que esos estudios ele los años setenta sobre historia social ya no ignoran el desen- 16 17 El fin de la economía exportadora y los orígenes del problema agrario I ANTOLOGÍA JESÚS ANTONIO BEJARANO Cuadnnos Colombianos 6, segundo trimestre de 1975, 225-303, Bogotá. volvimiento ni de los conflictos ni de las transformaciones rurales. "No solo han significado avances en el conocimiento de las sociedades agrarias, sino I ante todo han hecho una ruptura con los enfoques precedentes en cuanto a la jerarquización de los fenómenos sociales". Es teniendo en cuenta estos Casi a fmes de la primera guerra, declaraba don Esteban Jaramillo que múltiples trabajos que Bejarano muestra cómo hacen un mayor énfasis sobre la estructura productiva, la conformación de la hacienda, las relaciones entre la gueJTa actual ha demostrado, si es que tal demostración era necesaria, la apropiación de la tierra y las formas de trabajo, el impacto económico del nuestra inferioridad comercial y económica, en relación con otros países de Amé1ica Latina, quizás menos bien dotados que el nuestro, y nos ha señala mestizaje, etc. En fm, estos trabajos muestran las preocupaciones de Bejarano do la imperiosa necesidad en que estamos de desanollar otras fuentes de ri por integrar a la historia económica colombiana, los graves problemas de la queza además de las que hoy tenemos en explotación activa ... A tiempo que propiedad territorial, las reivindicaciones agrarias del campesinado y del sec todos aquellos países, cual más cual menos, han reportado ingentes benefi tor obrero, las brechas sociales causadas por las formas de distribuir la riqueza cios de su neutralidad suministrando a los beligerantes artículos necesmios etc. Entre un texto y otro hay siempre la tensión por asir todo el tejido de para la vida, Colombia no ha recibido provecho alguno y si ha sufrido en 'su percepciones que un hecho tiene y que, como él mismo decía, un historiador comercio y en su vida económica extraordinario quebranto'. Y ello se debe a no puede dejar de ponderar cuando busca dar sentido a esos acontecimientos. que el país ha estado vinculado casi exclusivamente a la industria del café'. Otras áreas significativas del trabajo de Bejarano se centraron en la in La guerra, en efecto, trajo consigo no pocos contratiempos a la economía vestigación de la historia regional y local y su papel en el desenvolvimiento de nacional: las exportaciones, que habían registrado un crecimiento considerable la sociedad colombiana; toma en cuenta aquí que la historiografía regional ha en los inicios de la segunda década, vuelven en 1917 al mismo nivel de 19122 venido utilizando y reconfigurando el concepto ele región como un concepto ; el índice de precios del café desciende de 68 en 1913 a 56 en 1917 y el de los nuclear del quehacer de este tipo ele historia. La región se ha vuelto el marco términos de intercambio de 93 a 47 en el mismo periodo3 ele referencia para aproximarse a los conceptos ele nación y Estado, afmna Be • El efecto sobre la capacidad de importación es inmediato: se reducen jarano está de acuerdo con un concepto de región que pueda articularse con sobre todo las importaciones de textiles y de alimentos. La ruptura de los la historiografía, interpretar los hechos de una manera un poco distinta y más circuitos comerciales normales con Europa, que se constituían hacia 1910 en bien considerar que la historiografía nacional es como un rompecabezas que hay un mercado para el 50% de las exportaciones y proveía casi el 75% de las que reordenar todo el tiempo. Estas consideraciones las realiza en "El todo y las partes. A propósito ele los vínculos entre historia nacional e historia regional". En todas sus reflexiones Bejarano reitera que "quizás sea necesario volver a los problemas centrales, a las preguntas relevantes sobre la sociedad, que nos protejan ele los riesgos ele la dispersión y la banalidad". Por eso invitó siempre a renovar el diálogo entre la historia y la economía pues este tiene frutos ina Esteban Jaramillo, Factores esenciales del progreso comercial y económico ele Colombia gotables para la formación académica y para la inacabada comprensión de los después de la guerra, en Primer Congreso de Cámaras de Comercio de Colombia. Estudios l' Conclusiones. Imprenta Nacional, Bogotá, 1918. p. 56. . fenómenos económicos contemporáneos. 2 Cfr. Miguel Urrutia y Mario Arrubla, Compendio de estadísticas históricas de Colombia, Universidad Nacional ele Colombia, Bogotá, Tabla IX. 3 !bid. Tabla. 18 19 importaciones totales4, habría de pesar sensiblemente sobre una economía que Las diflcultades de importación fueron aprovechadas inmediatamente. En dependía para su supervivencia del comercio exterior. el ramo de los textiles, la inversión que a comienzos de la guerra fue de 3,5 mi Sin embargo, y tal como lo veía Esteban Jaramillo, estos contratiempos eran llones de pesos, era en 1919 de cuatro millones y en 1920 se calculaba en diez estimados por la burguesía más bien como una advertencia y como una oportuni millones9• En 1916la fábrica de tejidos Obregón en Barranquilla incorporó 100 dad. Respecto del café, por ejemplo, Antonio José Restrepo anotaba en 1917 que, telares más y comenzó a montar una hilandería que entró en funcionamiento una baja en dos centavos -por libra- mermaría la riqueza nacional en en 1919. Entre 1915 y 1917 se instalaron en Bogotá las fábricas de paños La $3000 000 de dólares ... fluctuaciones como las antedichas, que a menu Magdalena y Paños Colombia. En 1917 Rosellón montó su hilandería y dos do se verifican, afectan el valor total de las expoliaciones en Colombia años después se ensanchó nuevamente absorbiendo dos pequeñas fábricas de en un 10%. Nada extralio es, por tanto, que la prosperidad de Colombia tejidos. Otros ramos industriales dieron también muestras de expansión: en dependa hoy día, casi única y exclusivamente, del precio del café. He 1918 el ingenio La Manuelita elevó su capacidad de producción en un 35%. En ANTOLOGÍA aquí el mal5 (subrayado en el original). Barranquilla se montó en 1918 una nueva fábrica de grasas vegetales y se en EL FJN JESÚS ANTONIO sancharon las de cervezas, jabones, harina, etc. En 1919 se fundó la Compañía DE LA ECONOMÍA BEJARANO De igual modo, se advertía la necesidad de darle al comercio exterior Colombiana de Tabaco con fábricas en Medellín, Barranquilla y Manizales10• EXPORTADORA colombiano una reorientación distinta buscando mercados diferentes a los También la reape1tura del debate sobre el proteccionismo formaba pa1te de Y LOS ORÍGENES europeos. Se pensaba ya, naturalmente, en los mercados americanos6• este clima que la guerra había promovido. Aunque de él no resultaron leyes de DEL PROBLEMA La oportunidad se revelaba especialmente en la producción interna de ma AGRARIO ] cisivas, ese debate ponía de todos modos de maniflesto el afán de la burguesía nufacturas. Era indudable que las dificultades de importación y el abandono de por apoderarse de un mercado hasta ahora satisfecho casi enteramente por las los mercados nacionales por los países europeos creaban posibilidades para im pulsar la producción interna de manufacturas. Asimismo, el estancamiento del imp01taciones11• Sin duda, y más por efectos de la coyuntura que de la incipiente protección, la composición de las importaciones se modiflcó, sobre todo en el comercio exterior cerraba parcialmente la órbita de operación de los capitales ramo textil, que constituía casi la mitad de las importaciones totales. También el comerciales que seguramente buscarían colocación en actividades industriales, conflicto bélico habría de reorientar el destino de las expoliaciones y el origen de Mariano Ospina Pérez se refería así a los acontecimientos derivados de la guerra: las imp01taciones po1: un desplazamiento -que habría de ser permanente- de los Esta disminución de las impmtaciones es más ventajosa cuanto afecta países europeos, en especial de Inglaterra, f01taleciendo el comercio de los Esta principalmente a los artículos de lttio, que son consumidos en el país dos Unidos con Colombia. Este hecho, como veremos luego, sería decisivo en las sin mayor beneficio para este, o a aquellos que pueden en gran pa1te ser transformaciones de los años veinte12 Por lo demás, el estrechamie.nto de los vín reemplazados por otros menos costosos y de producción nacional. En • culos de dependencia era propiciado no solo por los americanos, sino por los re segundo lugar, la falta de la competencia extranjera ofrece una opottu nidad para dar incremento a las industrias nacionales hoy en embrión o presentantes más notables de la burguesía que desde entonces encontraban en la en proyecto. Es esta una especie de ta1ifa proteccionista temporal que nos inversión de capitales extranjeros la vía de expansión de sus propias actividades D. permitirá echar las bases de nuestro porvenir industrial'. Así pues, las dificultades de la guerra habían adve1iido sobre la debilidad de una economía entregada por entero al comercio exterior y habían mostrado Refiriéndose a la agricultura, concretamente a la prohibición de exportar la posibilidad -por ahora era solo eso- de la producción interna de manufactu víveres a los Estados Unidos, acotaba: ras para aprovechar un mercado desarrollado y satisfecho por las importacio nes. También la guerra había acelerado la integración de la economía nacional Creemos que más que un mal será a la larga un bien, pues ha obligado al Gobierno y a los dirigentes del país a volver los ojos a la agricultura, única fuente estable y segura de nuestra riqueza nacional y la cual, hasta 9 Gerardo Molina, Las ideas liberales en Colombia 1915-1934, Tercer Mundo, 1974, p. 31. hoy, ha sido mirada por ellos no solo con indiferencia, sino con injusticia, 10 Gabriel Poveda Ramos, Historia de la industria en Colombia, Reuista Trimestral de la ANDI, haciendo pesar sobre el gremio de aglicultores, sin compensación alguna, 11, 1970, pp. 39-41. toda suerte de gravámenes8• 11 Cfr.: Luis Ospina Vásquez, Industria y protección en Colombia, Santa Fe, Medellín, 1955, p. 371 y ss. En el plano indusuial, las leyes lJ 7 de 1913 y 78 de 1916 se orientan, aunque débilmente, a la protección industrial. El proteccionismo a la agricultura empieza con la ley 85 de 1915 4 Véanse cuadros 2 y 3. También Hugo López, La Inflación en Colombia en la década de los y se amplía y precisa con leyes de 1916, 1922 y 1933. La ley 113 de 1919 hace explícita la veintes. Revista Cuadernos Colombianos, 5, pp. 58-59. protección agrícola y deroga la ley 30 de 1881 que declaraba exentos de derechos de impor 5 Antonio José Restrepo, El moderno imperialismo, Casa Editorial Maucci, Barcelona, p. 140. tación los artículos alimenticios de primera necesidad (cfr. Miguel Aguilera, Paz y progreso 6 Cfr. José Raimundo Sujo, El Comercio en la historia de Colombia, Cámara de Comercio de 1910-1930, en Re!!ista Nacional de Agricultura, Centenario de la SAC, diciembre de 1971). Bogotá, Bogotá, 1970, p. 180. 12 Véanse cuadros l, 2 y 3. 7 Mariano Ospina Pérez, El porvenir económico y comercial de Colombia y las medidas nece 13 Véase Free! J. Rippy, El capital norteamericano y la penetración imperialista en Colombia, sarias para impulsar su desarrollo. En Primer Congreso ... , p. 27. Oveja Negra, 1970, pp. 122 y ss. Sobre las opiniones de la burguesía respecto al capital 8 lbíd., loe. cit. extranjero, Gerardo Malina, óp. cit., p. 32 y ss. 20 21 a la órbita del comercio norteamericano y, en fm -si esto se interpreta con las Cuadro 2. Destino de las exportaciones de Colombia. Distribución porcentual del valor debidas precauciones-, había hecho percibir claramente, como se decía en la total (1912-1940) época, que "Colombia necesitaba un gerente"14 con lo que se quería decir que , al país le urgía un régimen político distinto y un Estado más decididamente Año EE.UU. ' Alemania 1 Canadá Francia Inglaterra 1 Holanda Otros inclinado al fomento de las actividades económicas. 1912 49,1 5,8 ' - - 13,5 - 3,6 1 1 Un plan de industrialización interna, como el que ilusionaba a la burguesía, 1913 55,0 1 9,4 11 - 2,3 16,2 ¡ - 17,1 1 1 1 nraol ees rae rfaa cnteibclees.a rSiain lae mcobnacrguorr, ean cpiaar tdier dfaec taocroens teecstimmicetnutroasle sp ucroammoe nlate ecxoisytuenntcuia 1914 56,0 111 5,5 i1 - - 18,0 1 - 20,5 1915 69,5 - 1 - - 11,7 - 18,8 del mercado, la disponibilidad de capital, una fuerza de trabajo movilizable -es 1916 86,2 - 1 - - 20,1 - 11,7 decir, asalariada- hacia los sectores que se pensaba crear y, por supuesto, una 1 1 ANTOLOGíA política proteccionista mucho más decidida que la existente hasta entonces. 1917 81,5 11 ----- 1 - - 1,3 - 17,2 EL FIN JESÜS ANTONIO 1918 82,5 - - 2,1 0,8 - 14,6 DE LA ECONOMÍA 1 1 BEJARANO Cuadro 1. Composición porcentual del valor de las importaciones 1912 -1940 1919 72,7 - 1' - 3,0 3,4 1 - 20,9 EXPORTADORA ~ 1920 - - i - - - - Y LOS ORÍGENES <ICo(: 1:.2¡V">::>-<;'! -c.uO~:.o.t: .: <l...""ogeE.-(.:'' :.V"""eE~.e.>:'''. '·~:Cr~:oi~" ."'·'"8e~!·-:'E" ·§-5~'-t~: -0.uoVo~".o..,I " . ".~4·..Vuuo':.E¡ :,-'>: ;l ·'L"Oc""oO-..U'-'e".O"c~!.t:'-',. -~"c.' . 1 -U.."2">~~:"'~!- 'o-"N'' 11 o.eV..>. 1 111999222132 7875,,-05 1 00,,-77 1 --- --- 74,,-54 2,--5 147,,-34 1 ADEGLR APRROIOBL] EMA 1912 44,0 12,7 12,2 1,6 3,5 4,3 2,0 2,1 17,6 1924 80,2 1,0 ' - 3,8 3,3 11,7 1913 40,1 9,9 11' 1 1,7 3,3 4,1 1,9 1,8 26,1 1925 82,1 1,6 ' - - 3,8 4,6 7,9 1914 32,3 9,4 12,7 4,3 1 3,7 i 4,9 2,7 2,4 1 27,6 1926 85,9 1,2 - - 3,8 2,5 6,6 1915 36,5 12,~--- 8,0 5,0 1 4,6 1 3,7 2,8 1,4 25,1___ -1--9-1--6 45,4 8,2 7,6 2,8 4,5 1,8 3,1 1,7 24,9 1927 83,0 2,6 1 - - 1 5,2 2,1 7,1 1918 43,5 4,0 10,5 3,9 4,5 3,2 3,2 2,3 24,9 1928 77,7 2,1 1,9 6,3 3,5 8,5 1 1919 33,8 7,4 8,4 2,4 4,3 2,9 1 2,7 1,7 36,4 1929 75,2 2,1 4,7 - 4,8 4,6 8,6 1922 37,5 7,3 9,9 1 6,2 4,1 5,9 1 3,4 2,8 22,9 1930 79,7 3,6 4,1 - 3,2 1 4,9 4,5 1923 38,9 8,0 12,0 6,3 3,5 4,3 3,2 2,9 20,9 1924 35,2 10,3 - 10,8 ----- 7,0 3,8 5,9 3,2 1 2,7 21,1 1931 80,2 3,4 5,5 - 2,6 1 3,6 4,7 1925 36,1 8,7 12,7 10,0 3,6 6,1 3,6 2,5 17,7 1932 75,9 4,3 4,7 3,0 1,2 3,8 7,1 1 1926 33,9 11,5 10,7 8,9 3,5 7,3 4,0 4,0 16,2 1933 72,6 1 5,0 5,8 4,2 r--3,0 l 4,5 4,9 1927 30,5 9,7 11,6 8,8 3,9 10,2 3,0 3,2 19,1 1934 65,6 L_5,6 6,8 7,0 2,3 3,1 9,6 1928 26,7 13,3 13,1 8,4 3,6 12,3 3,3 3,2 16,1 1929 27,3 14,4 9,9 8,7 4,2 8,5 3,6 3,2 20,2 1935 60,4 1 11,9 ! 5,8 6,3 1,6 2,3 11,7 1 1931 25,1 20,6 9,5 7,4 1 4,9 5,8 4,0 2,9 19,8 1936 54,3 16,6 5,9 4,6 1,7 - 16,9 1932 34,3 6,0 12,2 8,_~--__ _§,_9 --- - 3,4 3,4 2,4 232_ 1937 56,6 12,3 6,7 4,9 1,5 - 19,0 1933 34,6 3,7 12,2 8,2 7,6 4,1 3,1 1,6 24,9 1 1938 52,7 14,6 9,8 4,6 1,5 - 17,8 1934 30,0 4,7 12,4 8,4 6,4 5,2 3,3 1,7 27,9 1 1935 25,6 4,2 13,1 14,6 1 7,0 5,6 2,6 2,5 24,8 1939 '57,0 9,5 9,1 4,1 1,8 i 2,5 16,0 1936 23,6 5,5 14,5 14,3 7,7 6,7 2,6 2,8 22,3 1940 69,8 0,1 11,3 3,1 1,9 - 13,8 1 1937 21,1 5,2 14,6 17,1 7,8 7,2 2,9 _?;7__ _22.± 1 ----- ·-- ·- Fuente: Kathryn, óp. cit., p. 157. 1938 20,5 4,6 18,1 18,3 7,6 7,3 i 3,2 3,4 17,0 1939 21,0 6,4 15,2 17,5 7,8 8,9 1 2,5- 1,8 18,9 1 1940 16,6 7,0 15,6 11,3 8,9 7,1 i 3,4 2,3 25,3 Fuente: Kathryn H. Wylie, The agriculture ofColombia, USDA. Washington. 1942, p. 19. Sobre composición de las exportaciones. Véase Unutia y Anuble. p. cit. 14 Gerarclo Malina, óp. cit., p. 26. 22 23

See more

The list of books you might like

Most books are stored in the elastic cloud where traffic is expensive. For this reason, we have a limit on daily download.