Guatemala y la Guerra Fría en américa latina centro de estudios urbanos y reGionales Guatemala y la Guerra Fría en américa latina universidad de san carlos de Guatemala centro de estudios urbanos y reGionales centro de estudios urbanos y reGionales Guatemala y la Guerra Fría en américa latina Guatemala y la Guerra Fría en américa latina 197 - 1977 Roberto García Ferreira Coordinador Guatemala, octubre de 010 centro de estudios urbanos y reGionales 708l. García Ferreira, Roberto. (Coordinador) Guatemala y la guerra fría en américa latina 197-1977. Guatemala: CEUR, USAC, 2010. 533 p. temas _______ Diseño de portada y diagramación Diana Cecilia estrada Fotografías W. George lovell Fotografía de Portada Archivo fotográfico del CEUR universidad de San Carlos de Guatemala Centro de Estudios Urbanos y Regionales Edificio S-11, tercer nivel, Ciudad Universitaria, zona 12, 01012 tel./Fax: (50) 18-7750 y (50) 18-7753 tels. (50) 18-8000 ext. 1155, 8130 y 8131 http://ceur.usac.edu.gt e-mail: [email protected] Guatemala y la Guerra Fría en américa latina PRESENTACIÓN la historia guatemalteca desde el periodo colonial hasta mediados del siglo XX constata que prevalecieron situaciones negativas para la mayoría de la población. La pobreza y la desigualdad social eran parte del diario vivir de los guatemaltecos. el racismo, la falta de acceso a los bienes y recursos mantenían en una situación de calidad de vida deplorable a grandes conglomerados sociales. en ese contexto la revolución de octubre fue una manifestación de cambio ante esa situación, impulsada por los propios guatemaltecos a través de reformas sociales importantes. Se abrieron vientos de cambio que buscaban mejorar las condiciones de oprobio que prevalecían. Como proceso significó el inicio desde la visión de los propios guatemaltecos de incorporar cambios sociales, culturales y económicos dirigidos a desarrollar el país y a su población. Nefastamente un conflicto entre ideologías de dos naciones poderosas afectó duramente este proceso y vino a interrumpirlo abruptamente: la denominada Guerra Fría. el derrocamiento del presidente Jacobo Arbenz, y con ello la interrupción del proceso revolucionario, fue una de las primeras acciones en américa latina dentro de esa confrontación, aunque posteriormente se vieron implicados otros países. De eso trata este libro, haciendo una revisión de los impactos de la Guerra Fría en distintos países de américa latina: Uruguay, Costa Rica, Panamá, El Salvador, Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, Chile y Guatemala, en donde los autores analizan como este evento afectó distintos procesos políticos. Para el caso guatemalteco, max Friedman, Julio Pinto y George Lovell analizan respectivamente distintos periodos de la historia del país, la revolución de octubre, el golpe de estado de 193 y el periodo del conflicto armado interno, y su vinculación con la Guerra Fría. Además Douglas Kraft analiza el contexto del programa de la Alianza Para el Progreso como una acción contrainsurgente y Roberto García Ferreira reseña las peripecias del exilio de compatriotas. la CIa y otros sectores interpretaron como un éxito la interrupción del proceso revolucionario del . un éxito del cual ahora podemos ver claramente sus frutos: Guatemala es el país con mayor índice de mortalidad infantil, desnutrición y analfabetismo del hemisferio, sumado a las altas tasas de criminalidad y corrupción. la edición de este libro por el Centro de estudios urbanos y Regionales se realiza en el marco de la conmemoración de la gesta revolucionaria guatemalteca como un aporte para las nuevas 8 centro de estudios urbanos y reGionales generaciones sobre nuestra historia reciente, con la convicción que este conocimiento contribuirá a transformar las asimetrías económicas y sociales que prevalecen en la actualidad. amanda morán mérida Directora CEUR Guatemala y la Guerra Fría en américa latina PRÓloGo a nivel internacional la Guerra Fría continúa constituyendo un tema de encuentro y a juzgar por la revista académicas, su debate no cesa. una amplia literatura coincide en señalar que, al menos en los primeros momentos, américa latina permaneció prácticamente ajena a la Guerra Fría. Si hemos de tomar en cuenta las agendas de política exterior de ambas grandes potencias, ello corrobora que se trata de una zona de “baja prioridad”, pues las esferas de influencia a lo largo de todo el enfrentamiento bipolar parecen haber sido tácitamente respetadas. En razón de ello puede sostenerse que hasta el establecimiento de la Doctrina de la Seguridad Nacional a mediados de los años sesenta —y en cuya lógica habría de agudizarse el enfrentamiento bipolar a la luz de una lucha sistemática en pro del abatimiento del “enemigo interno”—, dos grandes episodios alteraron la región. El primero fue la breve “amenaza nacionalista” que supuso la política emprendida por el presidente guatemalteco Jacobo Arbenz, depuesto en junio de 1954 tras una persistente campaña de desinformación diseñada encubiertamente por la estadounidense agencia Central de Inteligencia (CIa). años más tarde, el segundo y por cierto más duradero desafío lo constituyó la paulatina consolidación de la Revolución Cubana, un “catalizador de la proyección soviética” en la región, algo sobre lo cual hoy sabemos cuán decisivo fue la fracasada invasión estadounidense de abril de 191. Sin embargo, lo anterior no significa que los ecos de la confrontación ideológica entre ambas grandes potencias no haya repercutido en suelo latinoamericano. Como se ha estudiado, culmina la Segunda Guerra Mundial y visto el progresivo deterioro de la alianza bélica contra el eje nazi-fascista, la enunciación del Plan Truman, el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) y, poco después, el establecimiento de la Organización de Estados Americanos (OEA) ponen de manifiesto una firme intención estadounidence de “cerrar las brechas del sistema interamericano” ante cualquier —y hoy se sabe poco probable— injerencia foráneas en una región históricamente considerada como su zona de influencia más directa. La rapidez con que Estados Unidos alcanzó dichos objetivos propios de esa nueva era que surgía, reforzó su relativa indiferencia política y dichos objetivos propios de esa nueva era que surgía, reforzó su relativa indiferencia política y escaso compromiso hacia la solución de las graves asimetrías económicas que sus socios menores del continente denunciaban desde fines del siglo XIX. Además, tales hechos vinieron a revelar, una vez 10 centro de estudios urbanos y reGionales más, cuán permeable eran los latinoamericanos a la directrices llegadas desde el más poderoso y mayor de sus vecinos, algo no ajeno a cierto “paternalismo” histórico estadounidence. Partiendo de ello, mucho es lo que aún resta saber acerca de cómo fue vivida la Guerra Fría latinoamericana. el inconveniente —nada menor por cierto—, es la falta de investigación en archivos latinoamericanos. Como ha sugerido recientemente Greg Grandin, ese tipo de pesquisas se tornan imperativas pues permitirán cambiar el “paradigma” tradicional por momentos casi obsesivo respecto de la importancia de los documentos norteamericanos. Si bien no debe desmerecerse su valor, ellos aclaran las motivaciones de la política esterior de Washington, al notoriamente insuficiente pues deja fuera de la discusión lo que pensaban sus pares latinoamericanos. además, dicha perspectiva parece estrecha en otros dos sentidos. Primero porque tiende a considerar como un todo homogénio a un continente rico en diversidades. Y segundo, porque presenta la región latinoamericana como exclusivamente “receptora” de las políticas de la Guerra Fría. Pero, ¿de manera tan pasiva los latinoamericanos vivieron un enfrentamiento que duró casi medio siglo? Partiendo de ello, este libro intenta continuar profundizando la tendencia historiográfica que, como se ha evidenciado a través de los más reecientes debates académicos, implica reposicionar al sur como centro del conflicto bipolar ya que sus habitantes fueron algo más que meros receptores pasivos de políticas que decidían más allá de sus fronteras. El corolario natural de lo afirmado precedentemente es este trabajo cuyo cometido central es acercarle al lector un enfoque transnacional acerca de la Guerra Fría en américa latina. Para la consecución del mismo debo reconocer la importante fuente de inspiración y deuda intelectual con el renovador aporte de la colega Daniela Spenser, coordinadora de un excepcional e internacionalmente reconocido emprendimiento historiográfico derivado de un congreso celebrado en México a finales del 2002.1 aclarado ello, y tras reconocer el carácter incompleto del presente volumen —por motivos de espacio y tiempo, otros colegas no pudieron integrar a tiempo sus ensayos— hemos de consignar que este 1 Daniela Spenser [Coordinadora], Espejos de la Guerra Fría: México, América Central y el Caribe (México: Porrúa-Secretaría de Relaciones Exteriores de méxico-Centro de Investigaciones y estudios Superiores en antropología Social, 00). este trabajo ha sido recientemente traducido y publicado en inglés como Daniela Spenser y Gilbert m. Joseph (ed.), In From the Cold: Latin America´s New Encounter with the Cold War (Durham: Duke university Press, 008).