«Y es que ciertamente parece que una personificación de Hyde aceptablemente realista anda suelta por Whitechapel», decía la Pall Mall Gazette el 8 de septiembre de 1888 en referencia al segundo asesinato de Jack el Destripador. La novela de Stevenson El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde se había publicado dos años antes, en 1886, y se prestaba ya a esta clase de comparaciones. Había entrado de lleno en el imaginario popular y aún hoy, en el siglo XXI, no somos inmunes a su efecto. El caso «esclavizaba» ya la «imaginación» del abogado Utterson, a quien le fue dada la horrible experiencia de ser testigo de la historia; podemos decir que también esclaviza la de sus lectores. Construido como una investigación detectivesca, con una forma narrativa diáfana y perfecta, este «relato alegórico que finge ser policial», según diría Borges, es sin duda una de las piezas maestras de su autor.
Esta edición presenta el texto en una nueva traducción de...